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Con globos y banderitas de todos los colores para disimular el clima de velorio del PRO, Mauricio Macri lanzará su candidatura en la ciudad mañana en un club de Villa Pueyrredón. Para levantar el ánimo estarán los jóvenes PRO, los mismos a los que el jefe de Gobierno les prometió que “en 2011 PRO es la alternativa de gobierno en una nueva Argentina”. Macri no anunciará allí quién será su compañero de fórmula y dejará abierta la puerta para un acuerdo con otros sectores a nivel nacional. Horacio Rodríguez Larreta aseguró ayer que irán “con candidatos propios” en octubre, pero nadie en el macrismo lo tomó muy en serio. El jefe de Gabinete también se ocupó de aclarar que bajarse de la contienda nacional “no es un retroceso”.
Tras un profundo malhumor que descargó sobre todo su gabinete por las filtraciones a los medios, Macri abandonó la idea de una conferencia de prensa y eligió, en cambio, anunciar que va por la reelección en un encuentro de los jóvenes PRO en el Club Cultural y Deportivo 17 de Agosto, que queda en Albarellos 2935. A las 14 del sábado, en un acto de lanzamiento cargado de la nueva estética multicolor del macrismo, el jefe de Gobierno hará su anuncio y repetirá el llamado al resto de los opositores a unirse detrás de una candidatura, que ya no será la suya.
“Nosotros vamos a seguir trabajando en una alternativa nacional, el hecho de que no tengamos a PRO en todas las provincias no significa que no pueda ser candidato a presidente, significa que necesitamos de acuerdos y de alianzas”, planteó Larreta. “Mauricio llamó hace un mes, 45 días, a sentarse a todos los líderes de la oposición para buscar consensos en pos de un gran acuerdo nacional”, recordó el fracaso de su conductor en conseguir que le respondieran los otros referentes de la oposición. “Con algunos tuvo mejor recepción, con otros menos, eso es cierto. Pero seguimos pensando que hay que construir una alternativa con candidatos propios del PRO a nivel nacional o formando parte una alianza”, aseguró.
La opción de los candidatos propios, hasta ahora, no fue evaluada muy seriamente por la mesa chica del PRO. Más probable es que terminen cerrando una alianza con Eduardo Duhalde o con Ricardo Alfonsín. Por ahora, la idea de los negociadores del PRO es insistir en un acuerdo de toda la oposición. Si eso termina siendo tan inviable como hasta ahora, en el macrismo advierten que sus afinidades lo llevarán a acordar con Duhalde y con Felipe Solá antes que con los radicales. “Son con los que tenemos una conversación más fluida. Lo otro es una alquimia más difícil”, reconoció a Página/12 uno de los armadores nacionales del PRO.
En ese plan, Jorge Macri debería aliarse con Graciela Camaño en la provincia de Buenos Aires, a imagen y semejanza de lo que hicieron en Santa Fe, donde van unidos a los peronistas disidentes. En el PRO minimizaban el impacto que la decisión de Macri tendrá sobre la candidatura a gobernador de Miguel Del Sel. “Las elecciones en Santa Fe son separadas, no hay que votar junto con las de presidente”, estimó Larreta. Ayer el candidato-comediante hizo una recorrida por Rosario con la diputada Gabriela Michetti y Macri volverá a la provincia a apoyarlo, pese a haber abandonado sus aspiraciones presidenciales.
Larreta enfatizó que esto no implica “un retroceso”. Para ayudarlo, el ministro de Espacio Público, Diego Santilli, contó que Macri les había dicho que va a comunicar su decisión el fin de semana. “Y después dijo que va a comunicar más adelante quién es su vicejefe de Gobierno”, se le escapó. El peronista es uno de los tres candidatos a acompañarlo. “A mí me encantaría, pero es una decisión de él, hay que respetarlo”, se atajó.
Los otros dos candidatos a vice son el ministro de Cultura, Hernán Lombardi, un radical cercano a Gabriela Michetti, y la de De-sarrollo Social, María Eugenia Vidal, del ala de Larreta. Esta última es, según comentan en los pasillos de Bolívar 1, la que corre con mayor ventaja, dada la alta estima que le tiene el jefe de Gobierno.
Otros especulan con que Macri lleve en la fórmula a un radical, como Ricardo Gil Lavedra, como parte de un acuerdo nacional con la UCR. Sin embargo, en la mesa chica del PRO no están ni evaluando esa posibilidad. Tampoco habrá tanto lugar para extrapartidarios: Sergio Bergman podría integrar la lista de legisladores, pero en el cuarto o quinto lugar. “Junto con los de De Narváez”, se sonreían en el Palacio de Gobierno.
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