Página/12 :: Sociedad :: Las paradojas de una fiscal macrista

Daniela Bruna Ugolini es fiscal ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo de la ciudad. Según los expedientes es la fiscal que suele dictaminar a favor de Mauricio Macri. El dato queda confirmado por el propio Macri cuando presentó su pliego ante la Legislatura porteña para reemplazar a Julio Maier en el Tribunal Superior de Justicia de la ciudad. “Es el Nazareno de Macri”, describió en su momento el legislador kirchnerista Diego Kravetz. La designación de Ugolini viene dificultada porque recibió varias impugnaciones desde la oposición y desde organismos de derechos humanos. Ugolini es la fiscal que deberá decidir si apela el fallo del juez Guillermo Scheibler, quien ordenó al Registro Civil casar a la pareja homosexual Alvarez-Canevaro.

De sus antecedentes surge el pensamiento de la fiscal. Se pronunció contra la remoción de las placas con los nombres de las autoridades de gobiernos de facto, en contra de darles viviendas definitivas a los habitantes de Villa Cartón, a favor de la intervención de la Obsba (obra social de los trabajadores porteños) y de los 2400 despidos con los que desembarcó Macri.

En agosto de 2009, cuando el juez Julio Maier renunció a su cargo en el Tribunal Superior porteño, que equivale a la Corte Suprema de la ciudad, el estrado vacante dio la oportunidad a Macri de contar con una firma favorable. Ugolini fue subprocuradora en el gobierno porteño de Fernando de la Rúa y procuradora en el de Enrique Olivera. Un furcio la pinta por entero: quienes estuvieron el 27 de julio de 2000 en la audiencia pública por la que llegó a ser fiscal de Cámara recuerdan que le preguntaron por qué quería ser fiscal y respondió: “Para defender al gobierno”.

Durante la presentación de su pliego, Ugolini recibió varias impugnaciones de la oposición y de organizaciones sociales y organismos de derechos humanos. Seis fallos judiciales ordenaron detener el procedimiento por diversos vicios, pero el macrismo avanzó. Una jueza allanó la Legislatura por la desobediencia. En la Legislatura, finalmente no pudieron reunir los votos por lo que el gobierno porteño se presentó ante el Tribunal Superior de Justicia, que falló a favor de Macri. El jefe de Gobierno está detrás de que la Legislatura plantee un conflicto de poderes. De todos modos, el pliego de Ugolini en diciembre languidecía. Mientras, como fiscal, debe decidir si apela o permite el matrimonio gay.

Conservadora, debería decidir según el criterio de Macri

Las paradojas de una fiscal macrista