Imprimir|Regresar a la nota
Sociedad|Miércoles, 14 de abril de 2010
Un camión disfrazado para el rally llevaba 814 kilos de cocaína

Uno que no pasó el antidoping

Lo armaron en España para mezclarlo entre los equipos de apoyo del Rally Dakar 2010, que se realizó en enero pasado en Argentina y Chile. Lo regresaron a España con casi una tonelada de cocaína en un entrefondo. Lo detectaron en Bilbao. Siete detenidos.

/fotos/20100414/notas/na18fo01.jpg
El camión, a la llegada a Bilbao. Bajo el piso de su caja llevaba 24 millones de euros en cocaína.

Siguiendo el criterio de que la cocaína acelera, una organización de narcos española se decidió a poner en práctica la fórmula: compró un camión, lo disfrazó con toda la gráfica y ploteos (así se le dice ahora) como sus iguales del equipo de Volkswagen, el más importante y fuerte del Rally Dakar 2010, y se mezcló entre los equipos de la carrera que, como se sabe, no es delito. Pero finalizado el rally y con un cargamento a cuestas fue embarcado hacia España, donde lo esperaban dos conductores que lo transportarían a Ibiza. No pudieron. En el puerto de Bilbao fueron detenidos y el camión despanzurrado. Dentro, en 32 dobles fondos, tenía casi una tonelada de cocaína, 15 mil pastillas de éxtasis, cuatro kilos y medio de hachís, armas y casi 47 mil euros. Entre Ibiza, Barcelona y Bilbao fueron detenidos siete españoles, entre ellos el líder de la banda, mencionado por la policía ibérica, cuyo nombre sólo fue evidenciado con las misteriosas siglas de T.M.B.T. De este lado del océano, un argentino está prófugo, luego de acompañar al rally hasta Chile y no volver al país.

Todo indica que si la policía balear no hubiera tenido el dato hace aproximadamente un año, el camión hubiera pasado desapercibido por aquella hipótesis que Edgar Allan Poe ya había desarrollado en “La carta robada”, y que sostiene que para ocultar algo lo mejor es colocarlo a la vista de todos. ¿Qué significa? Que en un enorme camión pintarrajeado con marcas de primera línea y rodeado del aura y las luminarias del rally internacional, que obviamente llamaría la atención de todos, había un cargamento de casi una tonelada de cocaína cuyo valor de mercado, en Ibiza, rondaría en más de 24 millones de euros.

El dato surgió en julio de 2009, en Ibiza, la capital de una de las islas Baleares luego de la detención de un integrante de una de las redes de narcos más importante en operación en España. A través de esa detención se supo que el líder de las misteriosas siglas estaba dispuesto a dar “el gran golpe”. Una estricta vigilancia permitió detectar que había comprado un camión Mercedes-Benz Actros con patente 2704 BGJ. Lo curioso que fueron detectando los espías fue que al camión le empezaron a pegar en la caja y en el frente carteles de Telefónica, Red Bull, Repsol. Pero les empezó a llamar la atención que en su parte trasera le aplicaran un mapa de Argentina calado sobre el metal de la caja y un buggy, y sobre uno de sus laterales una insignia que reveló en qué consistía: el logo del Rally 2010. En el interior se montó un verdadero taller mecánico. El camión era idéntico a cualquiera de los camiones de apoyo logístico del equipo Volkswagen que resultó finalmente ganador de la competencia. El capo narco no reparó en gastos. Los narcos que lo conducirían en las rutas argentino-chilenas tendrían incluso las vestimentas de la marca alemana.

La policía española entonces decidió seguir los pasos del camión que, obviamente, había sido armado para integrarse al rally. Las autoridades españolas pidieron entonces colaboración con Interpol y con la Federal argentina. El camión partió de Bilbao hacia el puerto de Zárate, en un buque que nada tenía que ver con la empresa organizadora del rally, que había montado su propio transporte para trasladar a casi todos los participantes juntos. Pero el puerto fue el mismo.

Desde allí, sin mezclarse con los competidores, el camión y sus dos narcos se vareó en las cercanías. La profusión de notas y fotos sobre el rally en los diferentes medios, el acento español de los dos mecánicos y los logotipos habilitaron al Mercedes a recorrer cualquier rincón del país sin llamar la atención. En realidad, llamando la atención pero desviándola como un faro hacia los motivos del rally y no de su cargamento final.

Finalmente, cuando el rally partió, el equipo balear se disolvió junto con su camión Mercedes en la sombra. Los seguimientos que fueron haciendo los federales determinaron que fuera ocultado en el galpón de un campo de la localidad de Exaltación de la Cruz, próxima a Zárate, también considerada puerto de arribo y de partida de drogas provenientes del Perú o Bolivia y dirigidas a Europa, especialmente España. En ese galpón se supone que le incorporaron los 814 kilos de cocaína de máxima pureza. El rally terminó el 16 de enero. Los corredores y equipos regresaron al puerto de Zárate. Pero el Mercedes fue trasladado al puerto de Buenos Aires. Los dos narcomecánicos tomaron un vuelo a España y dejaron al camión cargado en el puerto de Buenos Aires. El viernes pasado arribó el barco al puerto de Bilbao. Allí, la policía española, ya enterada por la Federal, tomó el camión, lo desarmó y, después de 12 horas, encontró 32 huecos montados bajo una estructura de madera cubierta por acero. Dentro y envueltos en una capa de plomo para evitar al escaner, hallaron casi una tonelada de cocaína. Se realizaron allanamientos en Barcelona, Santander y Bilbao y fueron detenidos 7 españoles, incluido el misterioso T.M.B.T.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.