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Un trabajador de mantenimiento del subte porteño murió electrocutado ayer por la mañana, mientras trabajaba en las vías de las cocheras del taller ubicado en Plaza Constitución. Luego de que el operario David Alfonso, de 40 años, con 22 de antigüedad, falleciera por haber recibido una descarga de 1500 voltios, la empresa Metrovías dio a conocer un comunicado en el que lamentó “profundamente lo sucedido”, una “situación sin precedentes desde el comienzo de la concesión en el año 1994”. En cambio, los delegados de la Asociación Gremial de Trabajadores de Subte y Premetro (AGTSyP) aseguraron que el accidente “se produjo por una innecesaria presión de parte de la jefatura para terminar los trabajos”. Los compañeros de Alfonso explicaron que el hombre murió porque la corriente de alta tensión, a contramano de lo aconsejado para estos casos, no había sido interrumpida y tampoco “se disparó la protección debida”. En señal de protesta, los metrodelegados anunciaron que el lunes próximo, a partir de las 7, levantarán molinetes en todas las líneas de subte.
El oficial general de mantenimiento calificado David Alfonso se encontraba en una de las cocheras del Taller Constitución, bajo la calle Pavón. Sus compañeros, aseguraron los delegados en un comunicado, explicaron que se disponía “a realizar las tareas de mantenimiento de los coches General Electric españoles”, que “reciben la corriente eléctrica de 1500 voltios ubicados en los techos de los coches”. La corriente, por causas que en la noche de ayer aún se desconocían, no había sido cortada.
“Los compañeros comentaron que una innecesaria presión de parte de la jefatura para terminar los trabajos desembocó en el fatal accidente”, informó el comunicado gremial. Además, los trabajadores también “protestan sobre las medidas de seguridad del lugar”, en especial porque “hace mucho tiempo que se viene informando sobre detalles que hacen a la seguridad y no son escuchados”. El cuerpo de Alfonso permaneció en las vías durante más de dos horas, antes de que fuera retirado.
Entretanto, los metrodelegados de la Línea B realizaron una protesta similar a la proyectada para el lunes. La demanda apuntaba a Metrovías y al gobierno nacional, a quienes los trabajadores pedían que se incoporara más personal y más coches para trasladar a los pasajeros y que se aplicaran más medidas de seguridad. Por el mismo motivo, anunciaron un paro en esa línea para el martes próximo.
La concesionaria Metrovías dio a conocer un comunicado en el que describía lo sucedido como “un accidente de trabajo”. La empresa, además, aseguró que “lamenta profundamente lo sucedido y se encuentra en contacto con la familia de su colaborador para brindar la asistencia y contención necesarias, ante esta situación sin precedentes desde el comienzo de la concesión en el año 1994”.
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