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Se levantó ayer el tercer paro que el gremio de trabajadores de la Ceamse dispuso en el lapso de un año, y que ya el domingo había empezado a generar acumulación de basura en las calles del área metropolitana. En las tres oportunidades, los paros se vinculan con la gestión de la basura en la provincia de Buenos Aires, y en particular con la decisión de cinco municipios, en el área de La Plata, de modificar el sistema de disposición de residuos: el jueves se firmó la licitación para instalar varias plantas de procesamiento, lo cual facilitaría el cierre –ordenado por la Suprema Corte bonaerense– del relleno sanitario de Ensenada. La huelga de estos días se inició el viernes en Ensenada y se extendió a toda la Ceamse cuando los gremialistas denunciaron haber sido “patoteados”. Según el intendente de Ensenada, “el paro responde a los intereses de los dirigentes gremiales y de los grupos económicos que vienen manejando la basura en la provincia de Buenos Aires”.
El paro se levantó luego de una reunión entre Alberto Pérez, jefe de Gabinete bonaerense; Raúl de Elizalde, titular de la Ceamse (Coordinación Ecológica Area Metropolitana Sociedad del Estado), y Jorge Mancini, secretario general del gremio de trabajadores de la Ceamse (además de diputado provincial). Una fuente del gobierno bonaerense explicó que “se había generado un conflicto de encuadre gremial, que se resolvió con la decisión de que los trabajadores del nuevo consorcio de empresas que gestionan las plantas de procesamiento podrán afiliarse al gremio de la Ceamse. Además, como ya se había anunciado el año pasado, a los empleados del relleno sanitario que cerrará en Ensenada se les garantiza el trabajo, el sueldo y la antigüedad”.
Según Mancini, “el paro general fue porque personas vinculadas con el intendente de Ensenada, en complicidad con un juez, rompieron el portón de entrada al relleno sanitario de Ensenada, donde el personal efectuaba una huelga pacífica”. El gremialista sostuvo que “en la Ceamse tenemos los mejores técnicos para llevar adelante el plan ambiental”, y criticó que en las nuevas plantas de tratamiento “van a poner plantas separadoras traídas de España, como si no hubiéramos aprendido nada de la colonización”. El gremialista Mancini –vinculado con Hugo Moyano, titular de la CGT– anunció que “el miércoles nos vamos a reunir nuevamente con las autoridades del gobierno provincial para crear una agenda de trabajo”.
Mario Secco, intendente de Ensenada, sostuvo en cambio que el paro respondió a “los intereses de los dirigentes gremiales y de los grupos económicos que manejan la basura en toda la provincia de Buenos Aires. No puede ser que un grupo de empresarios pretenda imponer políticas contra la voluntad de las autoridades elegidas democráticamente. Cinco intendentes (de La Plata, Berisso, Brandsen, Punta Indio y Ensenada), de distintos partidos políticos, nos pusimos de acuerdo, luego de consultas especializadas y audiencias públicas, sobre el tratamiento de la basura para los próximos 50 años, lo cual permitirá cerrar el relleno sanitario de Ensenada, como lo ordenó la Suprema Corte de la provincia”, que desde hace varios años viene efectuando intimaciones al respecto.
El paro del personal de la Ceamse en Ensenada había empezado el viernes en protesta por la firma de la adjudicación de la licitación para los cinco municipios de la zona de La Plata; la medida de fuerza continuó el viernes, pese a la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo bonaerense.
Alfredo Vega, vocero de la Ceamse, señaló que “este organismo apoya todo lo que beneficie al medio ambiente, y no está en desacuerdo con lo que firmaron los intendentes”. En abril y en octubre del año pasado también se produjeron paros del gremio de la Ceamse en relación con el mismo tema.
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