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Sociedad|Sábado, 28 de junio de 2003

Remodelado, el Santojanni estrenó consultorios, quiròfanos y más salas

El gobierno porteño finalizó las obras de remodelación y modernización del hospital del barrio de Mataderos. Tiene consultorios externos, quirófanos, áreas de obstetricia y salas de terapia intensiva e intermedia nuevas. Trabajarán casi doscientos empleados más.

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Ubicado cerca de la provincia, el Santojanni es uno de los hospitales con más demanda del país.
Los trabajos de ampliación y refacción significaron una inversión de nueve millones de pesos.
Después de casi tres años desde el inicio de las obras, ayer fueron inaugurados los trabajos de ampliación y modernización del Hospital Santojanni, uno de los más importantes y con mayor concurrencia de la ciudad de Buenos Aires, ubicado en el barrio de Mataderos. La remodelación demandó una inversión de nueve millones de pesos y cubre un área de 11.700 metros que incluye nuevos consultorios externos, quirófanos, los servicios de guardia y terapias, y el sector de administración. Trabajarán 185 empleados nuevos, entre profesionales y administrativos.
El acto se realizó en el flamante Pabellón de Consultas Externas, donde se congregó más de un millar de personas entre trabajadores del hospital, agrupaciones vecinales, y alumnos y docentes de escuelas del barrio. Presidió el festejo el jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra, y el secretario de Salud, Alfredo Stern. Ubicado en Mataderos, próximo a la avenida General Paz, el Santojanni es uno de los centros sanitarios con mayor demanda asistencial del país, ya que atiende a gran parte de la población del oeste del conurbano bonaerense, especialmente del partido de La Matanza, además de los barrios porteños de Liniers, Mataderos y Villa Luro. Una población que, de acuerdo con las cifras oficiales, se estima en tres millones de personas.
“El mundo viene a este hospital”, exageró ayer su director, Alberto Eurnekian, y explicó que “todos los días aumenta la cantidad de gente que se asiste aquí a raíz de la crisis del sistema de salud de la provincia de Buenos Aires”. “En mayo, sólo por la guardia pasaron 23 mil pacientes y en 2002, en pleno proceso de construcción y caos, se atendieron 250 mil personas”, remarcó.
Antes de recorrer las instalaciones, Ibarra destacó ayer que las obras inauguradas “están enmarcadas en la modernización del hospital público y representan el proyecto médico arquitectónico más importante, que se emprendió este año en la ciudad”. Los diferentes sectores que se habilitarán progresivamente, abarcan gran parte del hospital, entre obra nueva y remodelada: las áreas de Anatomía Patológica y Morgue, el Centro y la Guardia de Obstetricia, la Terapia Intensiva Neonatal, salas de hospital de día oncológico, 11 quirófanos de alta complejidad, salas de terapia, unidades coronarias y consultorios externos.
“La falta de infraestructura en relación con el número de población asistida hacía que un hospital de alta complejidad como es éste no pudiera ser aprovechado porque terminábamos superados. Ahora tenemos 185 nuevos nombramientos”, señaló Eurnekian.
El proceso de modernización del Santojanni comenzó en junio de 2000, con un plazo de finalización previsto en seis meses. Pero pasaron tres años durante los que el hospital quedó prácticamente fuera de servicio, funcionando al 25 por ciento de su capacidad, a raíz de la paralización de los trabajos. La remodelación terminó en diciembre del año pasado. Sin embargo, la inauguración se retrasó seis meses ante la exigencia de los médicos de que “no se cortaran las cintitas hasta que no llegaran los nuevos nombramientos para que realmente pudiera funcionar”, explicó Patricia Oreiro, médica pediatra y especialista en Adolescencia.
“Sinceramente estamos emocionados, porque esto fue también un logro nuestro, de la lucha conjunta de la Asociación de Médicos Municipales y Sutecba, y de los vecinos que se sumaron. En el medio pasaron tres movilizaciones y muchos reclamos”, recordó Oreiro. Tanto ella como la mayoría de los profesionales destacaron la importancia de las obras en los servicios de obstetricia, ya que el mayor porcentaje de las demandas que recibe el Santojanni a diario corresponde al sector materno-infantil.
Un poco más cauteloso, después de varios años de experiencia en la salud pública, uno de los médicos de Terapia Intensiva, Eduardo Vedovato, festejó la finalización de las obras, pero destacó: “Esperemos que lleguen los insumos suficientes y necesarios como para poder atender a la gente y aprovechar esta infraestructura, porque si no, por más que tengamos este lindo edificio, es lo mismo que nada”.

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