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El ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, defendió ayer en la Legislatura el proyecto de presupuesto para el área que, para 2014, prevé una reducción del 24,3 al 21,7 por ciento de participación en el total de la Ciudad, de acuerdo con las críticas de la oposición y los gremios docentes.
“Este año estamos aumentando 3000 millones de pesos de presupuesto, llegando casi a los 12.873 millones. Ese crecimiento se va a reflejar en más de 4 millones de útiles escolares, más de 74.000 becas de nivel medio, más de 6 millones de libros y 410.000 raciones diarias de alimentos”, afirmó Bullrich.
Tras su exposición, el diputado Francisco Nenna (Frente para la Victoria) destacó que, más allá del aumento nominal, “hay una baja de 2,73 puntos porcentuales en la participación de Educación en el presupuesto general”. “La baja representa 1621 millones de pesos menos, con los que se podrían construir 648 jardines, 270 escuelas primarias, 202 escuelas medias y 54 escuelas técnicas”, dijo.
En el mismo sentido, la legisladora Delia Bisutti aseguró que “es una preocupación” la disminución “año a año de la participación de Educación en el presupuesto general”.
Bullrich se defendió advirtiendo que el crecimiento presupuestario de Educación fue mayor en la Ciudad que en la Nación. “Lo que pasa es que estamos haciendo una inversión adicional en el subte y la Policía Metropolitana”, justificó.
A su turno, el diputado Alejandro Bodart (MST) replicó que la Ciudad “tiene muchas opciones” para hacer frente a los nuevos gastos para no “recortar lo social”: “Se podrían cobrar impuestos que hoy no se recaudan, se podrían quitar las exenciones impositivas que hay para sectores de alto poder adquisitivo, se podría recortar mucho más los subsidios de la educación privada”, enumeró.
Por su parte, la diputada María Elena Naddeo (Frente Progresista Popular) cuestionó que “tanto en educación, como en salud y vivienda, el presupuesto disminuya mientras otros ministerios aumentan su incidencia”.
En cuanto a los salarios docentes, Bullrich aseguró que entre 2007 y 2013 hemos cuadruplicado el salario de bolsillo de un maestro de grado de jornada simple, que pasó de cobrar 1040 pesos hace 6 años, a los 4125 pesos actuales. “La Ciudad de Buenos Aires está en el número 15 respecto de los salarios de todo el país y respecto de lo que fue de marzo de 2008 a diciembre de 2013, el aumento no fue del 400 por ciento sino de un 195”, retrucó Nenna.
En tanto, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) rechazó el presupuesto del macrismo y lo calificó como “el peor de la década”.
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