Página/12 :: Sociedad :: El crimen de una maestra

Las imágenes de una cámara de seguridad en proximidades de la parada de colectivos donde fue asesinada la maestra Isolina Jazmín Stang, en el barrio Itaembé Miní de Posadas, resultaron claves para la identificación de los dos detenidos por el hecho, entre ellos un niño de 13 años. El juez de instrucción penal 1 de Posadas, Marcelo Cardozo, confirmó ayer que “la filmación de la cámara podría decirse que esclareció un poco la identidad de los presuntos autores”. Según los investigadores, esa cámara registró el momento en el que pasaban por el lugar del crimen los dos jóvenes que, luego, fueron detenidos como responsables del homicidio. Además, fue decisiva la declaración de una testigo que estaba en la parada de colectivos donde asesinaron a Stang, ya que también aportó datos para lograr las detenciones. En los allanamientos realizados se secuestraron ropas manchadas con sangre, una cartera con objetos de la víctima y un cuchillo con manchas que podrían ser de sangre. Stang, de 38 años y auxiliar de maestra jardinera, fue asesinada mientras esperaba el colectivo en la esquina de su casa para ir a trabajar. Allí fue abordada por dos jóvenes que trataron de robarle la cartera, lo que produjo un forcejeo que terminó con la maestra desvanecida en el suelo por una herida cortante en el pecho.