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Un empresario llamado Juan Ignacio Suris, amigo de Leonardo Fariña, fue detenido ayer en la casa de su pareja, la vedette Mónica Farro, en el barrio porteño de Belgrano, ya que tenía pedido de captura de la Justicia de Bahía Blanca en una causa por narcotráfico. Según el fiscal bahiense, Alejandro Cantaro, el hombre también se dedicaba a negocios vinculados con facturas, autos, dólares “truchos” y permisos ilegales para que ciudadanos chinos puedan trabajar en el país.
El arresto fue realizado por personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) cerca de las 16.15 del lunes cuando Suris circulaba a bordo de un taxi por la avenida Santa Fe al 2000, en el barrio porteño de Recoleta. Al momento de la detención, a Suris le secuestraron cuatro teléfonos celulares y dos juegos de llaves.
Luego, la Justicia ordenó un allanamiento en el departamento de la vedette Farro, en la avenida Cabildo al 2500, en el barrio de Belgrano, donde efectivos de la PSA secuestraron dos valijas con la ropa de Suris, un teléfono celular, facturas de distintos celulares y al menos seis tarjetas portachips vacías.
Cantero contó que, según se desprende de las escuchas telefónicas, “Suris era quien decidía todo” en la supuesta asociación dedicada al narcotráfico. “Yo también lo investigo por asociación ilícita tributaria porque integrando algunas sociedades se dedicaba a vender facturas truchas para la reducción del IVA y el Impuesto a las Ganancias del que las compraba”, explicó.
El fiscal añadió que “en su resolución el juez federal Santiago Martínez menciona varios negocios ilícitos que tienen que ver con la intervención” de los sospechosos.
“Por ejemplo, en los permisos de residencia de ciudadanos chinos que tienen visa para trabajar en la Argentina y que tendrían un contacto para facilitar esos trámites. También dólares truchos, autos truchos, comercialización de cereal en negro. Todo eso se menciona y en algunos casos no sólo hay mención, sino también datos que pueden ser muy útiles para la investigación de otros negocios ilícitos que no formarían parte de esta causa”, contó.
Sobre el papel de Farro, el fiscal dijo que “el juez decidió en el allanamiento que no la detuviesen”, pero a su juicio hay elementos para imputarla de encubrimiento agravado. “Ella sabía que (Suris) estaba siendo buscado por la Justicia, lo escondió y no tiene una relación de parentesco o una relación de intimidad que haga que quede excluida del encubrimiento.”
No obstante, aclaró que la vedette “no aparece para nada vinculada en la causa” por narcotráfico.
Ayer a la mañana, en declaraciones a los medios, Farro confirmó el allanamiento realizado en su casa y dijo que los investigadores “no encontraron lo que buscaban, que era drogas y dólares falsos”.
La vedette dijo que “está tranquila”, que “hace dos meses” que está con Suris y que “estaba al tanto” de que sobre él pesaba un pedido de captura. Sobre el vínculo de Suris con Fariña, el fiscal expresó: “Con Fariña la relación era mucho más íntima. De hecho hace poco éste fue detenido en un auto trucho y dijo que era de Suris, quien viajó a ratificarlo”.
La causa que involucra a Suris se inició hace más de un año y medio, y a partir de escuchas telefónicas –más de dos mil horas–, se intervinieron ocho teléfonos celulares de alta tecnología y grabaciones de video que permitieron descubrir el accionar del grupo supuestamente dedicado al tráfico de cocaína.
Durante los allanamientos secuestraron vehículos de alta gama y elementos de corte de droga.
Una de las principales hipótesis que barajan los investigadores es que la cocaína era trasladaba en forma líquida a través de botellas que simulaban contener agua y una vez en Bahía Blanca se la volvía a solidificar.
En el marco de la causa fue también detenido el cuñado de Suris, Mariano Wagner, quien, según los investigadores, ayudaba en la distribución de los estupefacientes.
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