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El hombre esposado, hallado muerto el martes, en el Riachuelo, próximo a la orilla de Budge, partido de Lanús, era un preso que presuntamente había escapado del patrullero durante un traslado, hace 16 días. Se trata de Walter Sotelo, de 36 años. Su cuerpo fue reconocido por un familiar. Los peritos determinaron que había muerto ahogado. Ya había abierta una causa por la fuga, que ahora debería reunirse con la investigación por el hallazgo. Los uniformados que trasladaban a Sotelo son investigados por la Justicia de Lomas de Zamora y por Asuntos Internos.
La autopsia, realizada por médicos forenses de la Morgue Judicial de Lomas de Zamora, estableció la asfixia por sumersión como la causa de muerte de Walter Sotelo (36), cuyo cadáver fue reconocido por un familiar. Durante el análisis no se detectaron otras lesiones, ya sean de arma blanca, de fuego o por golpes, que indiquen la participación de otra persona en el hecho, el cual hasta anoche seguía caratulado como “averiguación de causales de muerte”.
Además, los forenses establecieron que la data de muerte concuerda con la fecha en la que Sotelo escapó esposado durante el traslado policial, por lo que todo apunta a que falleció inmediatamente después. De hecho, los primeros peritos que revisaron ayer el cuerpo advirtieron que el mismo presentaba un avanzado estado de descomposición y que llevaba en el agua varios días.
Y si bien el cadáver fue reconocido por un familiar de Sotelo, los médicos legistas tomaron muestras en procura de recomponer las huellas dactilares del cadáver y poder hacer cotejos dactiloscópicos.
Según la Bonaerense, la fuga de Sotelo ocurrió la madrugada del 3 de este mes, en el Camino de la Ribera, cuando era trasladado en un patrullero del Comando de Prevención Comunitaria (CPC) de Lomas de Zamora hasta la comisaría 10ª de Ingeniero Budge, ubicada en Puente La Noria.
Sotelo fue detenido tras ser acusado de haber cometido un robo en una vivienda de esa localidad junto a dos cómplices que pudieron escapar cuando llegó la policía. Al momento de ser apresado, Sotelo ya había sido reducido a golpes por un grupo de vecinos.
Del lugar de su detención, Sotelo fue llevado al Hospital Alende para su revisión médica. Luego del chequeo, cuando era trasladado del CPC a la comisaría de Ingeniero Budge, se tiró esposado del patrullero, según aseguran en la Bonaerense. La lluvia ocurrió durante la madrugada, en medio de una lluvia torrencial y cuando el móvil circulaba por el Camino de la Ribera, por lo que una de las sospechas es que Sotelo se haya tirado o caído al Riachuelo mientras huía. Por esta fuga, los dos policías del CPC que trasladaban a Sotelo están siendo investigados en un sumario administrativo. Las preguntas que hay para responder son cómo puede haber escapado de un patrullero cuya parte trasera queda trabada desde adelante y es imposible abrir desde dentro. Y si se resbaló o se arrojó al agua para escapar, o ocurrió alguna ayuda externa.
El cuerpo de Sotelo fue hallado ayer por la tarde junto a un montículo de basura que flotaba en el Riachuelo, a metros del Puente Alsina, del lado de Lanús.
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