Imprimir|Regresar a la nota
Sociedad|Viernes, 2 de octubre de 2015
UN JOVEN DISPARO A MANSALVA EN UNA UNIVERSIDAD DE OREGON Y PROVOCO DIEZ MUERTOS Y SIETE HERIDOS

Otra masacre a los tiros en Estados Unidos

En medio del horario de clase, un joven de 20 años entró al Umpqua Community College, en la localidad de Roseburg, y comenzó a disparar sobre alumnos y docentes. El atacante fue abatido por la policía. No están claras las motivaciones de la agresión.

/fotos/20151002/notas/na21fo01.jpg
El jefe policial no aclaró si el conteo de personas muertas incluye al joven que realizó el ataque.

Un joven de 20 años provocó la muerte de diez personas y hirió a otras siete al disparar indiscriminadamente en aulas de una universidad en el estado de Oregon, antes de ser abatido por la policía, en una nueva matanza que sacude a Estados Unidos. Al fin de la jornada, el presidente Barack Obama lamentó que las matanzas de inocentes se hayan tornado una “rutina” estadounidense, y formuló un dramático llamado al Congreso a que acepte discutir algún tipo de legislación de control de armas.

El autor de los disparos en el Umpqua Community College, en la localidad de Roseburg, “está muerto”, dijo después de la masacre el comisario John Hanlin, quien sin embargo no ofreció detalles sobre la identidad del atacante. Por el momento se desconoce la identidad del autor de la masacre o su motivación. El funcionario policial no aclaró si el conteo de personas muertas incluye al joven que realizó el ataque. No queda claro si era un estudiante.

Los heridos fueron trasladados por ambulancia y helicóptero a hospitales cercanos. También se envió un equipo de psicólogos al campus para atender a los alumnos, amigos y familiares de las víctimas.

Todavía no se conoce los motivos que llevaron al presunto asesino a disparar contra las víctimas. La policía está investigando si, como asegura una testigo, la matanza podría haberse producido por motivos religiosos. La alumna Kortney Moore, testigo de la matanza, aseguró que el asesino disparó a un profesor y luego preguntó a los alumnos que estaban en la clase su religión antes de volver a abrir fuego.

“De alguna forma, esto se ha tornado rutina. Mi respuesta, en esta sala, se volvió una rutina”, dijo Obama en la Casa Blanca (ver aparte). En el mismo sentido, la candidata demócrata Hillary Clinton dijo que es necesario tomar medidas “razonables sobre las armas de fuego para prevenir la violencia”.

En Roseburg, el comisario Hanlin dijo que los agentes de seguridad que atendieron a los primeros llamados de ayuda “llegaron al lugar y localizaron al atacante en uno de los edificios. Hubo un intercambio de disparos y el sospechoso resultó abatido”. El funcionario policial también señaló que no tenía elementos para confirmar insistentes rumores sobre supuestos avisos que el atacante formuló en redes sociales desde la noche del miércoles. “No he escuchado comentarios sobre eso”, dijo Hanlin.

Por su parte, en una breve declaración a la prensa, la gobernadora de Oregon, Kate Brown, dijo que el responsable por la matanza era “un hombre de 20 años de edad”.

Ray Shoufler, responsable del cuerpo local de bomberos, informó que sus hombres retiraron del edificio a 11 heridos, pero que dos de ellos murieron cuando recibían atención médica. En el interior del centro educativo, añadió, había “numerosos heridos en muchas aulas” y por ello los servicios de socorro improvisaron un centro de atención de urgencia en el local para los casos más graves.

En la pequeña localidad de Roseburg, dijo Shoufler, “prácticamente todos nosotros tenemos parientes que estudian allí. Es un escenario típico en el que todo el mundo conoce a todo el mundo”. Por esa razón, “algo como esto afecta a mucha, mucha, mucha gente”, comentó.

Marilyn Kittelman, madre de un alumno de la institución, dijo a la prensa que su hijo logró esconderse en un anexo del edificio y le mandó un mensaje por un teléfono celular sobre lo que estaba ocurriendo. De acuerdo con Kittelman, su hijo le aseguró haber escuchado unos 30 disparos.

Todos los estudiantes que buscaban huir del edificio eran rigurosamente revisados por la policía, que también detuvo varios autobuses escolares. En tanto, agentes fuertemente armados efectuaban un barrido en todas las instalaciones del complejo, incluyendo los estacionamientos, donde eran utilizados perros entrenados para revisar vehículos.

Situado en un área semirrural, el centro de estudios tiene unos 3300 estudiantes.

Los tiroteos en las escuelas son una triste realidad en la vida estadounidense, y muchas instalaciones fueron reforzadas en los últimos años, en particular después del sangriento ataque a la escuela elemental de Sandy Hook, en 2012. En ese incidente, 20 estudiantes y 6 adultos resultaron muertos en un ataque perpetrado por Adam Lanza, de 20 años.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.