Imprimir|Regresar a la nota
Sociedad|Viernes, 9 de agosto de 2002
LA POLICIA RECIBIO DATOS DE QUE PERALTA ESTARIA VIVO, PERO NO LO HALLARON

Dos mil hombres en busca de Diego

Los investigadores contaban con información de tres orígenes diferentes, según la cual se habría visto a Diego Peralta, vivo, en un complejo habitacional de Claypole. Un gigantesco operativo rastreó el lugar y allanó más de mil casas, sin resultado.

Por Mariana Carbajal
/fotos/20020809/notas/Na17fo01.jpg
Bien pertrechados, los hombres de la Bonaerense allanaron más de mil casas del complejo.
A pesar del tiempo transcurrido desde su secuestro, los investigadores trabajan con la hipótesis de que el joven Diego Peralta podría estar vivo. En un gigantesco operativo, casi dos mil efectivos de la Bonaerense allanaron más de un millar de viviendas de un complejo habitacional de la localidad bonaerense de Claypole en busca del chico, desaparecido hace 35 días. Según pudo saber Página/12, el juez federal Carlos Ferreiro Pella ordenó el inusual procedimiento al coincidir tres grupos de distintas fuerzas que investigan el caso que el adolescente de 17 años habría sido visto con vida en ese barrio, conocido como “el Fuerte Apache de la zona sur”, y ubicado en las cercanías del lugar donde se pagó el rescate.
El operativo fue supervisado personalmente por el magistrado de Lomas de Zamora. Los policías exhibieron fotos de Diego a los vecinos en busca de algún dato que permita dar con su paradero. Apenas se enteró del procedimiento, Luis Peralta, padre del adolescente, se acercó hasta el lugar y siguió de cerca los allanamientos. “Tanto mi señora como yo estamos esperanzados de encontrarlo con vida. La esperanza siempre la tengo y la voy a mantener mientras Dios me lo permita”, dijo Peralta en diálogo con los periodistas. Sin embargo, horas después, volvió a su casa sin buenas noticias.
La búsqueda comenzó a primera hora de la mañana y se extendió hasta las 14. Casi dos mil agentes de la Policía Bonaerense revisaron una por una, cerca de 1200 viviendas de más de 20 edificios del barrio Don Orione, en Claypole, partido de Almirante Brown. La pesquisa se concentró en dos de las manzanas: la 32 y la 34, consideradas las “más densas”, porque “se conoce que allí viven chorros pesados, profesionales”, según indicó una fuente judicial. Con más de cincuenta manzanas, Don Orione es el complejo habitacional más grande del conurbano.
Según confirmó a este diario una fuente cercana a la investigación, el juez Ferreiro Pella ordenó el procedimiento después de recibir el informe de tres grupos de distintas fuerzas de seguridad que investigan el caso que, con algunas variantes, coincidían en un punto: Diego Peralta habría sido visto con vida en Don Orione. Uno de los informes indicaba que el chico habría sido visto en el barrio “deambulando, como drogado”; los otros dos, que estaría allí “contra su voluntad”, se limitó a informar la fuente. A esta última conclusión llegó la pesquisa del Grupo Especial Antisecuestros que encabeza el comisario mayor Angel Casafús, quien ayer también tomó parte en el gigantesco operativo. Otro de los informes pertenecería a la Policía Federal.
Después de rastrillar cada uno de los domicilios de ambas manzanas, durante más seis horas, los uniformados no encontraron ni rastros del adolescente, secuestrado el 5 de junio a pocas cuadras de su casa, en El Jagüel, partido de Esteban Echeverría, cuando se dirigía al colegio en un remís y fue interceptado por tres hombres que se movilizaban en un Senda de color rojo y que dijeron ser policías. “Hay muchas líneas, vamos a seguir”, dijo escuetamente el juez al término del operativo.
Del procedimiento participaron efectivos de la Delegación de Investigaciones Complejas de Lomas de Zamora, junto a integrantes de la Dirección General de Investigaciones Complejas, Caballería, Infantería, Bomberos, Brigada Antisecuestro y Aérea de la Bonaerense, con la colaboración de algunos efectivos de la Federal. Según destacaron los propios uniformados, los habitantes del complejo colaboraron con el rastrillaje. “Estamos de acuerdo porque somos padres de hijos adolescentes y tenemos miedo de que les pase lo mismo”, dijo una mujer mientras le revisaban la casa.
Cerca del barrio Don Orione, en la localidad de Claypole, fue donde se pagó el rescate 19 días después de que el adolescente fuera secuestrado. En total, se entregaron 9 mil pesos más 2 mil dólares. Originalmente, los secuestradores habían exigido 200 mil dólares. El acuerdo era que Diego sería liberado cerca del penal de mujeres de La Plata, en la localidad deLos Hornos, pero nunca apareció y tampoco la familia volvió a tener noticias de los delincuentes.
El único detenido en la causa, Juan Pablo Gracía, de 22 años, sigue a disposición del juez Ferreiro Pella. “Se comprobó que había hecho llamados a la familia pidiendo dinero, pero todavía no se pudo determinar si realmente estuvo vinculado al secuestro o vio la oportunidad de obtener dinero aprovechando la situación”, señaló una fuente judicial.
Desde el martes está vigente un ofrecimiento del gobierno bonaerense de una recompensa de 50 mil pesos para quien brinde información certera que permita ubicar al chico. Desde ese día, en el juzgado se recibieron decenas de llamados, pero ninguno aportó pistas concretas para hallarlo. “Confiamos en lo que hace la policía y vamos tras de ella”, declaró el padre de Diego al finalizar el fallido procedimiento. Desconcertado, el hombre insistió en que no tiene “explicación” para entender por qué se llevaron a su hijo, si –dijo– “somos gente de trabajo”.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.