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Un aviso en el diario y un colaborador falso. Con esas dos herramientas, el representante de modelos Francisco “Pancho” Dotto recuperó ayer en pleno centro porteño la valiosa camioneta que le habían robado hace diez días en San Isidro, y la policía detuvo a dos personas por el hecho. Antes de eso, llegó a pedir ayuda al Ministerio del Interior.
El llamativo procedimiento comenzó cuando Dotto publicó en los diarios un aviso en el que ofrecía una recompensa para quien aportara datos sobre la localización del vehículo, una Range Rover. Días después, un hombre respondió al pedido y acordó encontrarse con uno de los colaboradores del empresario en un bar de Córdoba y Carlos Pellegrini.
Como sospechó de la llamada, dio aviso a la policía y, en lugar de un empleado, el que acudió a la cita fue un agente encubierto, que en el bar se encontró con dos personas. Allí, uno de los hombres pidió 11 mil dólares de recompensa. Cuando en supuesto colaborador constató que tenían la llave de la camioneta, se produjo la detención de ambos negociadores. Acto seguido, la camioneta fue hallada en un estacionamiento ubicado a pocas cuadras del bar, con la patente cambiada.
Los detenidos aseguraron que habían comprado la camioneta robada, y Dotto especuló: “Salieron a venderla y vieron el aviso. No eran ellos (los que robaron la camioneta). Estos parecían más que normales. Venían a buscar la plata y entregar las llaves”.
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