“Soy víctima de un ataque armado”

“Soy víctima de un ataque armado para perjudicarme.” En una conferencia de prensa que se pareció mucho a un acto partidario durante el cual fue aclamado por su público –que interrumpía las preguntas de los periodistas–, el intendente de Pinamar, Roberto Porretti, aseguró “no estar involucrado” en la denuncia por coimas que llevó a prisión a su principal colaborador, el secretario de Gobierno, Aldo Leonian, pero eludió responder cualquier requisitoria respecto de su actual situación procesal. El intendente adjudicó responsabilidad en el supuesto “ataque armado” a “estos empresarios de la noche”, en alusión a los dueños de dos boliches bailables que lo acusaron de haberles pedido una coima de 165 mil pesos. Porretti sorprendió ayer cuando se presentó, a primera hora de la mañana, en el palacio comunal, para desmentir las versiones que indicaron que había sido reemplazado en forma interina por el titular del Concejo Deliberante, Rafael De Vito. Porretti también concurrió a la Fiscalía de Dolores, donde se lo acusa por “extorsión y cohecho”. Fue una “presentación espontánea” para “ponerse a disposición de la Justicia”, pero se excusó de responder las preguntas que le quiso hacer la fiscal Fernanda Hachman.

Porretti, en la reunión la prensa que se hizo ayer por la tarde en la intendencia, insistió con la versión que habían adelantado sus allegados en horas de la mañana. De ese modo rompió el silencio que se había autoimpuesto durante 24 horas, desde el momento en que libraron la orden de detención en su contra, en la mañana del martes. “La denuncia contra el intendente forma parte de una batalla contra los empresarios de la noche de Pinamar”, dijo a Página/12 el vocero de prensa del intendente, Martín Camargo. De acuerdo con la versión oficial, los empresarios del complejo bailable Ku-El Alma tendrían con el municipio una deuda de 200 mil pesos. Eso se debería a la falta de pago del canon fijado por las normas municipales para ese tipo de emprendimientos comerciales.

Por esa razón, Porretti habló después de un “ataque armado” del que hizo responsables a “estos empresarios de la noche”. A pesar de la expectativa que se había creado frente a la primera aparición pública del intendente ante los periodistas, luego del pedido de captura en su contra, fue poco lo que aclaró durante el breve contacto. Rodeado por los miembros de su gabinete, Porretti sostuvo que desde el inicio de su gestión, hace dos meses, ha generado “un cambio en el control de los locales nocturnos” y que por eso “nos han respondido con un ataque”.

En medio de aplausos y vivas permanentes, por parte de sus allegados y seguidores, que habían copado el salón donde se hizo la reunión con la prensa, Porretti dijo que necesitaba “que las cosas se aclaren” y que por eso se había presentado ante la Justicia. Confirmó que los dueños de Ku y El Alma “debían pagar un canon por ocupación de espacio público”, pero eludió precisar el monto de la presunta deuda y otros detalles sobre el tema. El intendente, que habló muy poco, concluyó diciendo que seguirá en funciones a pesar de la causa pendiente y agradeció “el apoyo recibido por la comunidad de Pinamar, mi gabinete y mi familia”.

También hizo declaraciones el abogado del funcionario imputado. “No quiero dar detalles hasta que pueda ver los elementos que constan en la causa. Lo importante es que Porretti prestó declaración y está en libertad, gozando del principio de inocencia que tienen todos los ciudadanos.” El abogado José Ochoa, defensor del intendente de Pinamar, informó en forma muy escueta acerca de la “declaración espontánea” que el funcionario prestó ayer, en los tribunales de Dolores, ante la fiscal Fernanda Hachman, en la causa por los presuntos delitos de “extorsión y cohecho” contra los propietarios de un boliche bailable.

Porretti se presentó, en principio, “en forma espontánea para ponerse a disposición de la Justicia”, sostuvo el abogado defensor. En el mismo acto, luego de escuchar una breve exposición de Porretti, la fiscal Hachman le presentó las pruebas que obran en su contra y trató de tomarle una declaración testimonial, pero el intendente se negó a responder “por ahora”, confirmó el letrado.

Por la mañana, a las 7.30, ante la sorpresa de muchos, Porretti concurrió a su despacho, donde permaneció hasta las 10.20, cuando se dirigió a los tribunales de Dolores, para presentarse ante la fiscal Hachman. “Vengo a trabajar, como lo hago todas las mañanas”, declaró el intendente, desmintiendo así los rumores que indicaron que había sido reemplazado en el cargo, en forma interina, por el presidente del Concejo Deliberante, Rafael De Vito. Cuando se retiró de la sede gubernamental, Porretti aseguró ante los periodistas: “Estoy muy tranquilo y les pido a los votantes que también lo estén”, habida cuenta de la conmoción que se vive en Pinamar por su situación procesal.

“El intendente constitucional es Porretti y hasta que no haya una destitución, nadie puede asumir en su reemplazo”, le ratificó a Página/12 el vocero de prensa Martín Camargo. “En los videos (que demostrarían la supuesta coima), el intendente no está acusado en forma directa. Es una imputación indirecta. Por eso, Porretti quiere llegar hasta las últimas consecuencias, para que se aclare muy bien esta situación”, insistió Camargo. El portavoz confirmó que otro es el caso en relación al ahora ex secretario de Gobierno, Aldo Leonian. “En su reemplazo, en forma interina, ha sido designado el señor Mario Melía”, le dijo Camargo a este diario.

Camargo reiteró que lo que está ocurriendo “es el costo que tiene que pagar el intendente por emprender una batalla contra algunos negocios sucios de la noche”. Al mismo tiempo sostuvo que la realización de la cámara oculta, en la que aparecería el ex secretario de Gobierno, fue “un hecho ilícito” que sería rechazado por ellos como prueba de cargo.

Dijo por último que hoy, “como siempre, el intendente se hará presente en su despacho y seguirá en funciones como todos los días, sin dejar de lado su caballo de batalla, que es el combate contra los negocios sucios de la noche de Pinamar”. La situación podría variar si la Cámara de Garantías de Dolores ratifica la decisión de la jueza Laura Elías, que rechazó el pedido de eximición de prisión de Porretti. El fallo de primera instancia fue apelado por la defensa del intendente y la apelación tendrá que definirse en las próximas horas.

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