Imprimir|Regresar a la nota
Domingo, 1 de septiembre de 2002
logo cash

Pedalear con letras

La crisis regional, el conflicto con la Corte y las trabas para el acuerdo con el FMI no impactaron en la cotización del dólar. La estabilidad de la divisa se debe a la bicicleta con las Lebac.

Por Claudio Zlotnik
/fotos/cash/20020901/notas_c/pedalear.jpg
El stock de Letras asciende a 2500 millones de pesos y la mayor parte va venciendo cada 14 días.
Ni Roberto Lavagna ni el más entusiasta de los financistas habrá imaginado hace apenas un par de meses que se avecinaba un "veranito" en la city. Tanto los terremotos económicos de Brasil y Uruguay como el ahondamiento de la crisis institucional en la Argentina –por el enfrentamiento entre el Ejecutivo y la Corte Suprema– y la negativa del Fondo Monetario a rubricar el acuerdo pasaron desapercibidos para el mercado cambiario. Pero la estabilidad tiene un costo muy alto y está dando lugar a una bicicleta financiera peligrosa.
La zanahoria que tiene entretenidos a los operadores está representada en las altísimas tasas de interés que está ofreciendo el Estado, a través del Banco Central. Mientras los financistas obtengan una renta atractiva apostando por las Letras del BCRA (Lebac) que comprando dólares, la moneda estadounidense permanecerá en calma. El problema aparecerá cuando se quiebre el equilibrio en el mercado y vuelva a ser negocio adquirir divisas. ¿Qué podría detonar esa ruptura? Todas las miradas están puestas en los exportadores. El único día que, durante la última semana, liquidaron menos divisas que lo habitual, el dólar pegó un salto. En la city creen que las liquidaciones de divisas se mantendrán en torno de los 50-60 millones de dólares al menos hasta fin de mes, y hay quienes suponen que ese nivel óptimo para mantener calmo al mercado podría extenderse hasta mediados de octubre.
Mientras tanto, los operadores –sobre todo los bancos y las grandes empresas– aprovechan las altas tasas de interés. Los instrumentos elegidos son las Lebac y los depósitos a plazos fijos de cortísimo plazo.
n Lebac. El stock actual asciende a 2500 millones de pesos y la mayor parte va venciendo cada 14 días. En la última licitación el Central obtuvo una tasa del 60 por ciento anual, mucho más baja que el 130 por ciento pagado un mes y medio atrás. El promedio de agosto se ubicó en torno del 75 por ciento. Un nivel que hace imposible una recuperación de la economía. El otro drama es que este mecanismo genera un déficit cuasifiscal que podría agrandarse como bola de nieve en caso de que no bajen las tasas. Como cualquier burbuja, en algún momento revienta.
n Depósitos. Los bancos están ganando plazos fijos gracias a que ofrecen una tasa promedio del 55 por ciento anual. En agosto capturaron unos 1700 millones de pesos, la mayor parte con fondos del corralito. Un monto que supera los 350 millones que se habrían fugado por los amparos. A su vez, las entidades financieras utilizan esa liquidez para invertir en Lebac.
Por ahora, el delicado equilibrio favorece al Gobierno, que logró ponerle un corralito al dólar. Pero deberá estar atento a que la situación no le estalle en las manos.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.