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Los bancos y el complejo agroexportador embolsaron importantes ganancias a partir de la nueva política económica de la administración Macri. La megadevaluación, que ya acumula una suba del 60 por ciento en el valor del dólar desde mediados de diciembre, les posibilitó a las entidades financieras contabilizar fuertes beneficios por la diferencia de cotización de sus activos. El último informe del Bancos Central sobre el sistema financiero destacó que los bancos ganaron 4847 millones de pesos en diciembre por el movimiento abrupto del tipo de cambio, tras el anuncio a mitad de mes de la flexibilización de los controles cambiarios. En noviembre, las utilidades por la diferencia de cotización habían sido de 772 millones, lo que implicó que de un mes a otro la banca multiplicó por casi seis veces sus ingresos en ese rubro.
El sistema consiguió incrementar en forma notable los beneficios gracias a las medidas del gobierno. El mercado bancario se encuentra fuertemente concentrado, con lo cual unos pocos se apropiaron en mayor medida de la suba de las ganancias por la devaluación. La Asociación de Bancos de la Argentina (ABA) publica un ranking de entidades privadas en función de su patrimonio neto, lo que resulta un documento central para observar el grado de concentración del sector. Diez bancos explican el 73 por ciento del negocio privado. En la lista de entidades que contabilizan mayor patrimonio neto se destaca el Santander Río (representa el 12,0 por ciento del total), el Banco Macro (11,3 por ciento), Grupo Financiero Galicia (10,4), Banco Francés (10,2), Citibank (6,9) HSBC Bank Argentina (6,3), Banco Patagonia (5,7) e Industrial and Commercial Bank of China ICBC (4,5). Estas entidades fueron las que consiguieron capturar la porción principal del salto de los ingresos por la corrección del dólar.
Las ventajas que obtuvieron los bancos por el cambio de la política económica no se limitaron a las ganancias por diferencia de cotización, sino que las nuevas autoridades del Banco Central avanzaron con múltiples normativas para desregular la actividad. Una de esas iniciativas fue desarmar los controles a la compra de dólares y dar de baja la plantilla de inspectores públicos que se ocupaba de fiscalizar agencias y casas de cambio. Así las entidades financieras recuperaron capacidad para reconstruir vasos comunicantes entre el mercado legal e ilegal del dólar. Las entidades también dejaron de tener la obligación de ingresar (liquidar en el mercado de cambios local) las divisas obtenidas por deudas financieras negociadas en el exterior.
Otro de los principales negocios que fue restituido a los bancos fue la liberación para fijar los márgenes de las tasas de interés y comisiones, al tiempo que se subió el rendimiento de las Letras del Central a casi 40 por ciento, garantizándoles un instrumento muy rentable en pesos. El mencionado informe de Bancos muestra que en diciembre el resultado del sector por el rubro intereses -diferencia de tasa ofrecida por depósitos respecto de la cobrada por créditos- se ubicó en 8188 millones de pesos, con un avance del 13 por ciento respecto de noviembre. La suba en meses anteriores no había llegado al 2 por ciento. La banca extranjera que concretó un pase por 5000 millones de dólares con el BCRA para aumentar el nivel de las reservas internacionales también obtuvo importantes beneficios por la comisión y la elevada tasa de interés de esa operación de corto plazo.
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