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El 30 de agosto se cumplieron 150 años de la circulación formal del primer tren en la Argentina. No encontré ningún alumno de secundaria o primaria que haya tenido como trabajo o tema particular este tema. Por lo menos para el caso de los niños y adolescentes con los que tuve contacto.

¿Ustedes lo saben? Estimo que sí. ¿Saben nuestros niños y adolescentes que teníamos casi 50.000 km de vías? ¿Saben que conectaban pueblos que todavía hoy siguen sin el asfalto a pesar de que hace 46 años que les sacaron los trenes y hasta las vías? ¿Saben que quedan en servicio realmente activo poco más de 13.000 km y que el resto, si no fue clausurado y levantado está siendo fuertemente depredado por todo tipo de personas (y hasta empresas)? ¿Saben que podemos hacer los ferrocarriles que necesitamos y hasta reconstruir los que teníamos? ¿Saben que hace un siglo se fabricaban todo tipo de vagones y coches de pasajeros? ¿Saben que hace 56 años se fabricó la primera locomotora diesel eléctrica en nuestro país? ¿Saben que el genio que diseñó y construyó aquella locomotora hizo diseños desde 1920 para los ferrocarriles ingleses y de otros países? ¿Saben que a ese genio lo acusaron de ser lavacopas en vez de ingeniero para que nadie más crea que podíamos hacer locomotoras? ¿Saben que toda la industria ferroviaria pública y privada ha quedado prácticamente desmantelada?

¿Saben que necesitamos que muchos chicos, adolescentes y jóvenes se interesen en ser ferroviarios públicos y privados para que podamos realmente hacer la reconstrucción? ¿Saben que los ferrocarriles nunca fueron una necesidad de los trabajadores ferroviarios, sino una herramienta estratégica de desarrollo para la Nación? ¿Saben que, dramáticamente, los ferrocarriles desarrolladores de territorio fueron cerrados durante un gobierno que se autodenominó desarrollista y se los terminó de destruir con otro gobierno que se autodenominó como revolución productiva? Y muchas preguntas más, para que comencemos a encontrar las respuestas. En los próximos 5 a 10 años necesitamos recrear esa masa crítica de gente entre joven y madura para poder creer que podemos recuperar y recrear la red ferroviaria. No fueron 150 años para el festejo, sino para la reflexión y preguntarle a mucha, pero a mucha gente ¿Qué pasó? ¿Por qué apoyaron ese bombardeo? ¿Por qué tantos se vendieron y entregaron a miles de trabajadores? ¿Por qué tantos intendentes y gobernadores se callaron? ¿Por qué tantos pero tantos escribieron noticias con informaciones que llevaron a tanta gente a creer que un ferroviario era un tipo que tenía una fuente de trabajo y no un tipo que daba un servicio? ¿Por qué, nuestra sociedad, se tragó esos grandes sapos y hasta los aplaudió?

Jorge de Mendonça
Ingeniero White
Buenos Aires
jorgedemendonç[email protected]

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