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Nacida hace 71 años, la Federación Internacional de Archivos de Films (FIAF) es una de las instituciones más prestigiosas en materia de preservación del patrimonio fílmico. Entre sus diversas funciones está la de reunir periódicamente a cinematecas, archivos nacionales y museos de cine, con el objetivo de discutir un tema específico sobre el tema audiovisual. Para poner en marcha esta tarea promueve desde 1945 congresos que pueden ser técnicos o culturales. Por primera vez, el 65º Congreso de la FIAF se desarrollará en Buenos Aires, entre este domingo y el sábado 30 de mayo, y participarán del mismo representantes de 140 países del mundo. La sede donde se realizarán los debates será la Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín y el tema a debatir será “Las cinematecas al encuentro de sus nuevos públicos”.
La organizadora local del evento es la Fundación Cinemateca Argentina, una institución histórica que por estos días cumple sesenta años de existencia, a lo largo de los cuales logró reunir en su archivo más de veinte mil películas argentinas y extranjeras, una colección de más de sesenta mil fotografías vinculadas al cine, once mil afiches originales y más de cincuenta mil críticas de cine microfilmadas. La Cinemateca Argentina contó con la invalorable colaboración del Museo del Cine Pablo Ducrós Hicken.
La vicepresidenta de la Fundación Cinemateca Argentina, Marcela Cassinelli, aclara que este congreso será cultural y, por lo tanto, los que debatirán serán directores e intelectuales. El tema del simposio lo elige el país anfitrión. “Nosotros hace dos años en Tokio presentamos el tema ‘Las cinematecas al encuentro de su público’–señala Cassinelli–. Entonces, vamos a tener una mirada global de qué es lo que pasa en cada región: en Asia, Africa, Europa, América del Norte, Asia y Latinoamérica.” Cassinelli sostiene que las realidades son distintas en cada país: “En los países escandinavos la gente prácticamente no va al cine. En México aumentó la concurrencia. Entonces, la idea es comparar entre todos y analizar cuáles son las políticas a seguir para educar a la gente para que vaya al cine; es decir, formar nuevos públicos. Otra cosa que sucede es que, de pronto, hay programaciones muy buenas en cinematecas como, por ejemplo, la de Canadá, pero el promedio de la gente que va al cine es de 65 años. Entonces, ¿cómo llegamos a la juventud? Esa es la gran inquietud”, afirma Cassinelli.
En el marco del congreso de la FIAF, la Fundación Cinemateca Argentina ha previsto actividades abiertas al público, con el objetivo de rendir homenaje al centenario del cine argentino. Un día como hoy pero hace cien años se exhibió la primera película argentina con argumento: La Revolución de Mayo, dirigida por Mario Gallo, en el viejo Teatro Ateneo. El film, mudo y en blanco y negro, narra la epopeya desde el Cabildo Abierto hasta la Revolución. “La Revolución de Mayo es una película realmente adorable. Está hecha en una terraza del edificio del restaurante La Emiliana y tiene una intención artística muy interesante”, describe Cassinelli, mientras recuerda que desde su estreno, el 22 de mayo de 1909, “duró una cantidad de tiempo en cartel y al año siguiente, para el centenario de la Revolución, se reestrenó”. La Revolución de Mayo es una de las joyas de la Fundación Cinemateca Argentina y hoy a las 17.30 se proyectará una copia restaurada por Cinecolor en la Plaza Colón (detrás de la Casa Rosada), con acompañamiento musical de Santiago Chotsourian y César Lerner. La entrada es gratuita. En el acto estarán presentes el secretario de Cultura de la Nación, José Nun; la presidenta del Incaa, Liliana Mazure, y el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli. Siguiendo con los festejos, luego de La Revolución de Mayo podrá verse Expedición Stoessel, documental que narra el viaje que emprendieron los hermanos Adán y Andrés Stoessel, a finales de la década del ‘20, a bordo de un Chevrolet que recorrió el periplo de 32 mil kilómetros entre Buenos Aires y Nueva York. La proyección también contará con acompañamiento musical de Chotsourian y Lerner. Vale destacar también que, como parte de los festejos por el Día del Centenario del Cine Argentino, se exhibirá Mundo Alas, la road movie documental dirigida por León Gieco, Sebastián Schindel y Fernando Molnar que narra la gira que realizó el músico santafesino por el todo el país junto con un grupo de artistas discapacitados. La cita es mañana a las 17.30 en la Plaza Colón, donde estarán Gieco y los artistas. La organización de estas tres proyecciones contó con la colaboración del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa).
En el marco del Congreso de la FIAF, el Complejo Teatral de Buenos Aires y la Fundación Cinemateca Argentina, con el auspicio y la colaboración de las embajadas de España y México, organizaron también la retrospectiva “Buñuel en México”, que se desarrollará entre el sábado 30 de este mes y el 12 de junio en la Sala Lugones del Teatro San Martín (Corrientes 1530): se exhibirán Gran casino, Los olvidados, Susana: carne y demonio, Subida al cielo, El bruto, El, La ilusión viaja en tranvía, Ensayo de un crimen, Nazarín, La joven, Viridiana, El ángel exterminador y Simón del desierto. Todos estos films fueron dirigidos por Luis Buñuel durante su exilio en México. Junto a esta retrospectiva (que cuando finalice comenzará “Buñuel en Francia x 4”) se podrá apreciar la exposición México fotografiado por Luis Buñuel en el Hall Central del Teatro San Martín. La muestra está compuesta por 86 fotografías tomadas en México por el genial cineasta español en su trabajo de búsqueda de escenarios, que se exhibirán por primera vez en Sudamérica. México fotografiado por Buñuel cuenta con la curaduría de Elena Cervera, responsable de la colección del Museo del Cine de la Filmoteca Española, institución que envió junto con la Cineteca Nacional de México, copias en 35 mm de las películas que integran el ciclo. En coincidencia con el congreso de la FIAF también se desarrollará el ciclo “Palacios Plebeyos”, entre el martes 26 y el viernes 29 de este mes en la Sala Lugones. “Este ciclo es el que acompaña el tema del simposio sobre la formación de nuevos públicos. La mirada es sobre la sala de cine que es la protagonista de las películas”, explica Cassinelli. El ciclo abre el martes 26 a las 19.30 con Fantasma, de Lisandro Alonso, que tiene a la Sala Lugones como escenario de encuentro de los protagonistas de las dos películas anteriores de Alonso. Alas 22 se exhibirá Después de medianoche, de Davide Ferrario, que tiene como “protagonista” al Museo de Cine de Turín. El ciclo se completa con Nitrato de plata, de Marco Ferreri (miércoles 27 a las 19.30 y 22); En el transcurso del tiempo, de Wim Wenders (jueves 28 a las 14.30), y Goodbye Dragon Inn, dirigida por Tsai Ming-liang, que refleja la sala de cine que frecuentaba el director cuando era chico (viernes 29 a las 19.30 y 22).
En sesenta años de vida, la Fundación Cinemateca Argentina participó en numerosas actividades de difusión de su acervo como las mencionadas. Surgió como un cine club de Rolando Fustiñana, crítico de cine del legendario diario Crítica, de Natalio Botana. “El tenía el Cine Club Gente de Cine. En el primer Festival de Cine de Cannes, después de la Segunda Guerra Mundial, se encuentra con Henry Langlois, fundador de la Cinemateca Francesa.
Y Langlois le dice: ‘Usted tiene un cineclub, ¿por qué no crea una cinemateca?’. Fustiñana responde: ‘No, es que nosotros no tenemos clásicos’. YLanglois le señala: ‘Usted créela que yo le mando las películas y las normas de cómo trabajar’”, recuerda Cassinelli sobre el origen de la Cinemateca Argentina que se creó “a imagen y semejanza de la Cinemateca Francesa”.
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