Imprimir|Regresar a la nota
Martes, 5 de julio de 2016
logo espectaculos
Fotografìas de Gabriel Rud en la galería Leku

La nada como punto de partida

Especialista en Lógica y Técnica de la Forma y diseñador de Imagen y Sonido, Gabriel Rud afirma que sus fotografìas surgen de la nada. ¿Una cosmología alternativa? “Prefiero modelar y plasmar cosas que nunca vi”, dice.

Por Fabián Lebenglik
/fotos/espectaculos/20160705/notas_e/na37fo01.jpg
Dos de las extrañas fotografìas de Gabriel Rud exhibidas en la galerìa Leku

Para situarse en una “ficción de origen” propia, los artistas generalmente eligen (para sí mismos y/o para sus obras) dos caminos: el primero suele ser colocarse como resultado de las ramificaciones de un árbol genealógico (más o menos reducido) gracias al cual se ubican como descendencia de artistas que eligen como modelo de su propio trabajo. Así aparecen en un contexto controlado que les permite formar parte de un mapa que se define por el principio de autoridad y prestigio (por considerarse “hijo”, “sobrino” o “nieto” simbólico de tales y cuales artistas consagrados).

El segundo camino más usual de la “ficción de origen” es colocarse (a sí mismos y/o a su obra) como resultado de la generación espontánea, únicos en su género.

Gabriel Rud (Buenos Aires, 1979) sitúa su nueva serie de obras, con actitud irónica y bastante humor, en esta última versión. De modo que cuando el visitante entra a la galería Leku (especializada en fotografía argentina contemporánea) se encuentra con un breve texto del artista, que se titula “En el ignicio”, y describe el conjutno de piezas exhibidas: “En el principio no había nada. Quizás resultara entretenido ver a la nada crecer. Tiempos donde lo trascendente y lo intrascendente se mezclan, se alternan, se tornan indistinguibles. Pueblan allí estas formaciones diversas, que son causa y consecuencia de un extático devenir. Materia intangible que en caprichosas imitaciones se reproduce en fértil inutilidad. De la excursión por esos valles inquietantes son estas postales grises. Vistas fugaces, como entre relámpagos. Revelan unas sombras que se configuran así solo en aquellas regiones. Evocadoras de recuerdos primigenios oportunamente olvidados, o propiciadoras de presagios tan improbables que mueven a la risa. Enigmas cuya clave no posee ni su propio formulador. Truena el rayo del oxímoron, que al encender extingue y al extinguir enciende”.

La módica cosmogonía de Gabriel Rud plantea una génesis donde la lógica clásica ha sido abolida y por lo tanto resuelta o superada toda contradicción. Y a su vez se trata de una definición posible del arte.

El filósofo italiano Sergio Givone, en su sorprendente y bello libro Historia de la nada (2002) ofrece una genealogía del concepto de la “nada”, a modo de (en sus propios términos) “una contra-historia de la nada. Esto es, de la nada tal como aparece no en forma de negatividad que el ser evoca por oposición y excluye, sino como principio que convierte al ser en libertad, a medida que lo desliga del principio de razón y lo expone no sólo a poder ser de otro modo sino a poder no ser”. Desde esta perspectiva, Givone, aunque no sea artista, podría estar entre las ramificaciones del árbol genealógico ficcional de Rud.

Lo mismo sucede con la “rama” flauvertiana, porque el autor de la canónica Madame Bovary resumió su texto como una novela “sobre nada”.

Y si de “ramificaciones” se trata, las fotografías del artista, lucen precisamente como raíces, ramas también piedras o fósiles, al modo de una naturaleza literalmente muerta. Una especie de cementerio de especies que tiene la apariencia de evocar un anacronismo. Fotografías que remiten incluso al origen de la fotografía y tal vez también al origen de las especies. El paradigma científico se cruza con el del diseño, el del fotografía como arte y como herramienta.

Las imágenes parecen provenir de ensoñación (por el foco puntual, el uso de la luz, el modelado; el blanco, negro y grises, el efecto -por sectores- de imagen movida, el tamaño -generalmente pequeño, salvo la imagen de gran escala que recibe al visitante-, el “trazo” artesanal, etc), de un mundo extinguido que más que apuntar al futuro, buscaría reescribir el pasado: algo así como una cosmogonía alternativa. Se trata de imágenes realizadas con programas de computación, a las que luego les da un tratamiento fotográfico y finalmente imprime.

La sala de exposición también fue especialmente adecuada de un modo anacrónico, con las paredes pintadas de negro en el sector donde se exhiben las obras de pequeño formato. Y si este dato se suma a la obras que en vez de títulos y descripción llevan un número cómo única clasificacion, el artista sigue sosteniendo, en el montaje, la afirmación experimental (de laboratorio decimonónico).

Gabriel Ruda es especialista en Lógica y Técnica de la Forma y diseñador de Imagen y Sonido de la UBA. Trabaja como jefe de trabájos prácticos en la cátedra de Diseño Audiovisual de Luis Campos y Carlos Trilnick.

Entre otros premios y distinciones obtuvo el Primer Premio del Salón Nacional; IV Premio AAMC de Fotografía Contemporánea Argentina, en Córdoba; Usurp Zone 5 Film Festival, en Londres.

Integra el colectivo cerpunto.org, enfocado a las experimentaciones poéticas con dispositivos electrónicos y digitales.

Además de en la Argentina, mostró su obra en exposiciones individuales y colectivas en México, Perú, Francia, Reino Unido, España, Alemania y Bélgica.

En una entrevista realizada por la galería, el artista afirma que “Esa especie de triple oxímoron que forman las palabras ‘ver’, ‘nada’ y ‘crecer’ es del tipo de pensamientos que me estimulan. Nunca pensé tan literalmente, pero sí, pretender empezar desde la nada me atrae, es el camino más ambicioso, como el dios del génesis, él tenía al menos el lenguaje e iba pidiendo que se hagan las cosas, yo tengo apenas un par de herramientas y algunos conocimientos medio rústicos con los que voy intentando modelar y plasmar cosas que nunca vi. Reproducir, recrear, o remirar objetos tangibles ya existentes no me resulta tan estimulante”.

* En la galería Leku, Arenales 1239, Planta Alta “P”, de lunes a viernes, de 13.30 a 19.30, hasta el 29 de julio.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.