Página/12 :: espectaculos

8-Travesía americana

Neli Saporiti. Blue Art

Después de un dúo con su marido Gerardo Gandini, Neli Saporiti se larga como solista, proponiendo temas propios que son pequeñas perlas en su estructura melódica y poética y que sorprenden por su originalidad. La Travesía de Saporiti parte rioplatense a pura milonga, y va recorriendo el continente, también en las letras. Algunas herencias resuenan implícitamente: la de la tía Nelly Omar, la de la poeta Diana Belessi, con la que la cantautora se formó. El arte de Marcos López hace más americana y contemporánea esta travesía. K. M.

8-Venidero

Carlos Mancinelli. Independiente

El gesto de este cantante y guitarrista es un manifiesto de amor a la canción, puesta en primer plano en este trabajo. El repertorio apunta certeramente a canciones bellas en letra y música, más allá de su origen: Julio Lacarra y Teresa Parodi, Jaime Roos y Chico Buarque, Víctor Jara y Divididos, suenan bien tratados, cuidados y asumidos con expresividad propia. Jorge Giuliano, Facundo Guevara, Pablo Giménez, Marcelo Perea (piano, arreglos y dirección) y Damián Bolotín son algunos de los buenos músicos que tocan con Mancinelli. K. M.

7-Beyond Hell Above Heaven

Volbeat. Universal

Lo del cuarteto danés es una ciencia muy básica, pero ciencia efectiva al fin. Bajo la dirección de Michael Poulsen, Volbeat atiende a la canción como cirujano de su columna vertebral (las melodías que perviven); y opera un tórax amplio en el que caben rockabilly, hard rock, metal alternativo y rock’n’roll de raíz. Después revisa los nervios metaleros, irriga con sangre hardcore, clona el ADN de Misfits y crea este Frankenstein: un ensamble de prótesis ajenas y a la vez un cuerpo propio. L.P.

7-Fumigándonos

Bettinotti-Fernández. Independiente

El compositor Alejandro Bettinotti y el arreglador Hernán Fernández dan muestras en su sexto disco de una simbiosis irreversible. En ese geiser milonguero logran un acompañamiento liviano pero bello para sus reflexiones y descripciones directas y aleccionadoras. La virtud del disco es más bien documental: temas como “Amo a la reina del cabaret” o “Gatillo fácil volvió a hacer click”, aunque bien compuestos e interpretados, son más bien notables como miradas o crónicas y terminan de convencer con su uso del contrasentido. L. P.

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