Página/12 :: espectaculos

- “Jim y yo trabajábamos juntos en el Actor’s Studio de Nueva York, y tengo un gran respeto por su talento. Sin embargo, en Rebelde sin causa, el señor Dean parece que lleva mi guardarropas del año pasado y que usa mi talento del año pasado. No era un héroe, sino un chico perdido que intentaba encontrarse a sí mismo” (Marlon Brando).

- “Antes de entrar en escena se preparaba como un combatiente para una pelea. No se situaba nunca ante la cámara sin haber dado antes unos saltos con las rodillas a la altura del mentón o de haber corrido alrededor del estudio lanzando gritos de ave de rapiña” (Rock Hudson).

- “Era muy amable, pero siempre llegaba a mi casa con dos horas de retraso. Entraba resoplando como un animal salvaje, con la cabeza baja, despidiendo un espantoso olor a cuero húmedo. Luego se volvía encantador. Desconcertaba a las mujeres. Pero, ¿por qué tenía que llegar tan tarde?” (Ursula Andress).

- “Creo que Jimmy era un hombre extraordinario. Lo congelé en mi memoria como aquel hermoso muchacho con el que trabajé en Al este del paraíso, en el verano de 1954. Siempre lo consideré una especie de Huckleberry Finn. Siempre estaba haciendo una travesura, buscando alguna aventura, lleno de curiosidad y entusiasmo. Le gustaba hacer que la gente se irritara” (Julie Harris).

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