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Juan Casamayor (Madrid, 1968) es licenciado en Filología Hispánica por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza, donde realizó su doctorado en literatura española del siglo XVIII. “El gusanillo de la edición me viene porque mi tía materna, Cristina Vizcaíno, creó en 1970 la editorial Fundamentos, ahora muy apagada pero que los años ’70 era la envidia de Anagrama –subraya Casamayor–. Fundamentos publicó todo lo que no había llegado a España por la dictadura franquista, desde semiótica a crítica marxista. Pero cuando se dio la transición entre el ensayo y ganó terreno la novela, no hizo una buena lectura. Mis tíos se separaron y mi tía, que llevaba la parte literaria, se fue.” Cuando en 1997 terminó la carrera de Filología, Casamayor le prometió a su prima darle una mano en Fundamentos. “Ahí me entró el gusanillo del libro y empecé a trabajar free lance también para otras editoriales como Clan Editorial, con una colección dedicada a la bibliofilia, donde aprendí a hacer libros. Había un ambiente extraordinario en cuanto al cuidado pictórico del libro –recuerda–. Tenía una colección de cuentos finisecular, los cuentos de Unamuno, de Pío Baroja, de Azorín y de Francisco Ayala. Y me propusieron llevar esa colección. Y también hice trabajos para el grupo Akal, donde perdí la vista corrigiendo diccionarios Oxford.” Cuando Páginas de Espuma asomó en el horizonte, se fue desprendiendo de a poco de esos trabajos.

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