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Agustina dice que ese comentario que indexa tan bien en el buscador (léase que figura en los primeros puestos) al googlear su nombre no la representa. Que es un asunto sin importancia para ella. Pero ahí está, hablando de ella acerca de si las madres prefieren los pañales x o y. Ante disconformidades varias, por no hablar de las filtraciones de información personal no deseada, aparecen cada vez más servicios y consejos a la hora de intentar borrar lo que nos disgusta de Internet.

Año Nuevo, vida nueva, podría decirse y comenzar a ajustar nuestro nombre en la web a lo que quisiéramos que diga de nuestra persona. ¿Cuánto habla de cada cual el auto search? O sea, buscarse a sí mismo en la web. Ante todo, hay dos aclaraciones pertinentes. Una, si se está logueado, o sea se ingresó el nombre de usuario y contraseña en Google por ejemplo, y se busca allí, es posible que los resultados se vean alterados con respecto a una búsqueda sin loguearse. Esto es porque el buscador entrecruza un montón de info que le hemos estado brindando sobre nuestros intereses y arroja resultados en consecuencia. La otra es que siempre conviene buscarse con el nombre entrecomillado, para que el resultado sea más preciso.

La wiki de la famosa revista Wired (http://www.wired.com) lanzó recientemente una breve guía de posibilidades a la hora de ajustar nuestros datos online. Aconsejan googlearse de vez en cuando para monitorear qué pasa con nuestros nombres en la red. Si parece un exceso de vanidad, sepa que cada vez son más las empresas que hacen esto, pero con los nombres de sus empleadas y empleados. Cuando vea algo que no le gusta, si tiene el mail de quien lo subió a la red o puede contactarlo, pídale que lo borre. ¿Fotos en poses ridículas? ¿Lista de asistencia a la boda del primo de nuestro amigo? Si no desaparece de Internet inmediatamente, al menos logrará que en el mediano plazo deje de indexar. Hay que tener en cuenta que, a veces, esos resultados les están quitando lugar a sitios que sí representan su perfil. Configure la privacidad de sus redes sociales. En Facebook, por ejemplo, ir a configuración y allí seleccionar “Sólo mis amigos” en todas las opciones, para permitir que sólo ellas y ellos acceden a su material desde sitio. También puede configurarse para que lo encuentren o lo oculten al ser buscado su usuario de Facebook en la red. También puede configurarse la opción para no dejar a nadie etiquetarla en una foto que se suba a la red social. Otra opción es crearse un Google Profile (http://www.google.com/profiles), donde cada cual sube su bio y enlaces relevantes sobre sus trabajos y sitios que lo representan, con una dirección personalizada. Luego, otro consejo es que si hay un sitio asociado a su nombre, con material que le disgusta, puede generar “ruido” escribiendo su nombre asociado a ese sitio o a un determinado tema para que la información nefasta pase más desapercibida en el bullicio general. O se pierda en él. Finalmente, hay que informar que si toda esta maraña virtual es demasiado para reacomodarla en soledad, hay consultoras que lo hacen por una.

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