Página/12 :: las12 :: Detrás de un gran señor...

Antonio Dal Masetto
Señores más señoras
Editorial Sudamericana
$ 21.-

Este nuevo libro de Antonio Dal Masetto es una colección de historias muy breves en las que siempre y en primer plano aparece un señor. Señor detrás del cual, o arriba o abajo, se presenta una señora. La señora, de quien nunca se sabe demasiado, no va a arruinarle ni a solucionarle la vida al caballero, pero conseguirá convertirlo en un personaje digno de atención, y, sobre todo, de protagonizar un breve relato.

El narrador atónito y testigo privilegiado de los titubeos del corazón masculino persigue en los detalles –como ya lo supo hacer en Gente del Bajo (1995)– a su grupo de personajes que suele nombrar con el impersonal y afectuoso apelativo de “el hombre”.

“El hombre” piensa con melancolía en una mujer que se acaba de ir de su vida hasta que de pronto se distrae con una mariposa que también terminará partiendo. ¿Siempre piensa en ella o siempre se distrae? No están hechos estos cuentos para buscar este tipo de respuestas sino para que aparezcan las preguntas. “El hombre” va a ser abuelo, va a enamorarse, pelearse con su esposa, reconciliarse, ser objeto de habladurías. Y seguirá siendo siempre el mismo hombre, hijo del prototipo. Pero sin sentimientos, jamás. No es “el hombre” no lo que le acontezca –ambos esquemáticos y previsibles– sino el punto de vista que enaltece la influencia de “ella”, lo que va conectando cada historia e invitando a leer la que siga a medida que el sentido del humor va poniendo entre paréntesis cualquier afirmación tajante .

Quien avisa no traiciona se suele decir. Así es que el título de este libro en el que las señoras aparecen luego de una sumatoria, se puede tomar como invitación y contraseña para ingresar a los lugares más frecuentes del universo masculino tradicional. Las mujeres inspiran y pasan. No por error ni por azar esta selección de cuentos culmina con un “homenaje”, especie de himno a los ortos de todo tamaño, forma y envoltorio. Fruto de inspiración, de exclamación y zanahoria, para todo “hombre” que se precie de tal.