Página/12 :: libero :: Era muy tarde para los goles

Desde Mendoza

Si cuando se impone el freno se acelera y cuando hay que acelerar se frena.

Si cuando se remata de media distancia no se le acierta al arco casi nunca, como ocurrió con los volantes y los delanteros de Godoy Cruz.

Si se saca la pelota al lateral con la excusa de la simplificación cuando se tiene espacio para jugar con un compañero o tocar hacia atrás al arquero.

Si los buenos cabeceadores, como Obolo, le erran a la pelota cuando les llega un buen centro.

Si se toca con alguna precisión en la salida, pero se equivocan muchos pases en la medida en que el rival presione un poco o los espacios se cierren.

Si River pone mucha gente en la mitad de la cancha y un solo delantero, un pibe con poca experiencia, a quien la pelota le llega casi siempre cuadrada.

Si se tiran pelotazos a la bartola, en vez de generar juego desde abajo.

Si se confunde velocidad con urgencia y vértigo con barullo.

Si encima de todo eso los arqueros responden muy bien en las pocas oportunidades en que deben intervenir, es muy difícil que haya goles y por eso mismo sobrevoló sobre el Estadio Malvinas Argentinas la fuerte sensación de que el partido iba a terminar como terminó: cero a cero, nada a nada.

Ramón Díaz, amparado en el recurso de hablar de los que no están, lamentó las ausencia de Teo Gutiérrez y Rodrigo Mora, como un hecho decisivo para justificar la falta de gol.

“Jugamos bien, el equipo mejora y llega, pero nos faltó el gol”, dijo y habló de “las situaciones de gol” como si la gente no hubiera visto en qué consistieron esas llegadas de River. Pongamos la mira en las situaciones de gol de River, que no fueron muchas ni muy claras.

1 Gran corrida de Carbonero por la derecha y centro bajo, medido, para la entrada de Simeone que le dio de primera y encontró una buena respuesta en los rápidos reflejos del arquero Carranza.

2 Otra de Carbonero por la derecha y toque hacia atrás a Lanzini que, desde muy buena posición y beneficiado por un error en la marca de uno de los centrales de Godoy Cruz quedó solo, pero le dio por arriba.

3 Remate de media distancia de Fabbro bien desviado por Carranza.

Godoy Cruz, que en el primer tiempo fue un poquito más que River porque tocó mejor la pelota aunque lejos del arco de Barovero, también tuvo sus chances:

1 Remate de Castillón bien controlado por Barovero.

2 Apilada de Lértora y remate medio cruzado, sin demasiado ángulo

3 Entrada de Castillón, muy similar a la de Simeone en el primer tiempo y buena reacción del arquero de River para quedarse con la pelota.

Con un poco de benevolencia se podría agregar alguna otra acción, aunque las más destacadas fueron estas y también hay que señalar que hubo un penal clarísimo para River, cerca del final del primer tiempo (un empujón alevoso de Lértora a Carbonero) que el árbitro Etchenique no vio.

El empate, en definitiva, fue el resultado más justo para un partido que se olvidará muy rápidamente, más allá de lo que digan los técnicos, la satisfacción ficticia y el conformismo de siempre.

Estadio: Malvinas Argentinas (Mendoza).

Arbitro: Fernando Echenique.

Cambios: 46m, Rojas (6) por Ferreyra (R); 63m, D.Rodríguez por Castro (G); 69m, Kaprof por Simeone (R); 70m, Angileri por J.Fernández (G); 82m, García por Castillón (G) y Solari por Carbonero (R).

Godoy Cruz recibió anoche a River en Mendoza, pero...

Era muy tarde para los goles

Jugaron 90 minutos en el turno nocturno del domingo, y aunque tuvieron algunas situaciones de peligro, no muchas, las redes no se conmovieron y los gritos de festejo faltaron a la cita. Ramón Díaz tiene una sencilla explicación.