Imprimir|Regresar a la nota
Domingo, 17 de junio de 2007
logo libros
Mercier

Una novela del desasosiego

Un viaje, y el verdadero misterio de llegar a conocer al otro, enhebran una sugerente novela pol铆tica.

Por Sergio Kisielewsky

Tren nocturno a Lisboa
Pascal Mercier
C谩ntaro
430 p谩ginas

驴C贸mo se reconstruye una vida? 驴C贸mo se pone el cuerpo en el derrotero del otro? Eso es lo que se intenta aqu铆: narrar lo ajeno como propio, atrapar lo inhallable.

Gregorius es un profesor de Liceo. En un puente de Suiza una mujer le da una pista sobre un m茅dico portugu茅s que trabaj贸 para la Resistencia y cont贸 paso a paso en un diario 铆ntimo sus acciones. La voz que narra, en este caso, es la b煤squeda de la escritura ajena. Es el encuentro con un hombre que escribi贸 al borde del peligro, al filo del mismo ejercicio de la profesi贸n. Es, en definitiva, la traves铆a de un m茅dico que desconfi贸 de sus colegas, que s贸lo se entregaba a sus seres queridos y sus compa帽eros de combate contra la dictadura de Salazar.

La novela es entonces el deseo de sacar del anonimato a Amadeu de Prado. Es all铆 cuando el narrador se convierte en el otro. Comienza a dar a luz sus diarios, sus escritos y sus confesiones (鈥淧alabras en un silencio de oro鈥). Poco a poco se corre el velo de quien eligi贸 un perfil bajo, casi an贸nimo. De pronto el texto es un homenaje a peque帽os ritos, a breves encuentros, al modo de vida que construyen los combatientes en medio del peligro. Gregorius se convierte en un detective de la escritura. Es un extranjero que arma un rompecabezas en un sitio hostil. Viene de un c贸modo puesto como docente en Berna y da un salto sin red. Debe dejar atr谩s una vida marcada por la rutina y el tedio y en ese viaje recompone su memoria. Aflora lo que fue su matrimonio con Florence, las an茅cdotas con sus estudiantes m谩s pr贸ximos, su compromiso con la c谩tedra.

La trama es una suerte de pleites铆a a los idiomas portugu茅s, griego, lat铆n y hebreo. No es casual que en todo momento fluya la obra de Fernando Pessoa, su visi贸n de la Lisboa de ayer y el choque con la ciudad en los 鈥渢iempos modernos鈥.

Tren nocturno a Lisboa es un libro trashumante como los viajes en tren de su autor, como el deambular en una ciudad desconocida, extra帽a, secreta. 鈥淟isboa era la ciudad a la que hab铆a llegado, huyendo de su vida.鈥 En verdad, hu铆a de sus estrictas costumbres como profesor de Liceo. Un tedio que necesit贸 romper; un molde, que una vez roto, le traer谩 m谩s de una sorpresa. Como la mirada de Amadeu sobre su padre, un juez de la Naci贸n que tiene la enfermedad de Bechterev que produce un encorvamiento extremo por una lesi贸n en la columna vertebral. Pero all铆 se encuentra con la mirada de un m茅dico y la de un hijo que quiere curar los vivos huesos de su padre. Un hijo que escribe sobre su padre y 茅l no se entera.

La obra es entonces un cruce sobre la vida y las lecturas. Safo, E莽a de Queiroz, Pessoa, circulan como una forma de alabanza de la lengua, de 茅xtasis por el que enhebra la escritura y luego la vida desordena.

Un texto que se demora, por momentos en detalles que no hacen al coraz贸n de la escritura, sin escarbar en la vida cotidiana de los combatientes en tiempos sombr铆os. Un texto donde 鈥渆l alma est谩 hecha de palabras y la luz de poes铆a鈥, y donde los seres que sobrevivieron dan un car谩cter de extra帽eza al conjunto.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.