Imprimir|Regresar a la nota
Sábado, 28 de agosto de 2010
logo m2

El estado de las cosas

El Quartier San Telmo logr贸 un raro fallo a favor y retom贸 las obras. Este y otros casos muestran la l贸gica de un sistema de controles planeado para que la especulaci贸n no tenga problemas.

Por Sergio Kiernan
/fotos/m2/20100828/notas_m/cst.jpg

Quien suba la avenida Garay ver谩 que a la altura de Piedras se reactiv贸 la obra del Quartier San Telmo, el nuevo espanto que ayudar谩 a estropear el barrio. Esta desmesura tan alta tiene el pobre estilo de dise帽o 鈥渢orre鈥 y no ser谩 recordada por sus valores est茅ticos. La obra se reactiv贸 porque la Justicia finalmente desestim贸 el amparo presentado por Basta de Demoler, despu茅s de un curioso plazo 鈥搕res meses, raro en un caso de este tipo鈥 y de algunos procedimientos que llamaron la atenci贸n. Por ejemplo, que no se hiciera lugar a observaciones de los amparistas pero s铆 a cosas raras como que hab铆a discrepancias entre la zonificaci贸n por mapa y la que figura por escrito.

En San Telmo est谩n l铆vidos de bronca. Patricia Barral, activista y vecina, se帽al贸 que de todos los amparos presentados hasta ahora por ONGs, 茅ste era el m谩s raro y dif铆cil de seguir en su l贸gica y sus pasos procesales. El defensor adjunto del pueblo Gerardo G贸mez Coronado dijo que 鈥渓amenta鈥 la decisi贸n judicial porque 鈥渆l da帽o sobre el entorno es muy evidente鈥. Pero el verdadero culpable, dijo el defensor adjunto, es 鈥渓a liviandad con la cual los funcionarios del Gobierno de la Ciudad aprueban obras que producen un gran impacto negativo en su entorno鈥.

G贸mez Coronado dijo que espera que el caso del Quartier finalmente mueva a la Legislatura porte帽a a modificar el c贸digo de planeamiento urbano, como ya es evidente que lo piden los vecinos. El defensor adjunto tiene en mente la ampliaci贸n del Casco Hist贸rico, que sigue demorada, y el proyecto de modificaci贸n de alturas y sistemas de inspecci贸n que impulsa su colega Atilio Alimeni.

La anomia de la legislaci贸n queda muy en evidencia en este caso. La 煤nica l贸gica real parece ser la explotaci贸n de la propiedad privada sin hacer caso a entornos o barrios. Para peor, cuando el c贸digo s铆 fue modificado, en 2000, se aumentaron las masas y alturas permitidas con el argumento de la crisis. La crisis ya pas贸, pero la ampliaci贸n del negocio sigue en los libros. En eso se escudaron el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, y su peculiar secretario, H茅ctor Lostri, para permitir la construcci贸n de la torre. La Defensor铆a del Pueblo les hizo llegar ya en marzo sus observaciones, los vecinos estaban en armas, hubo un amparo, en fin, se arm贸 un verdadero esc谩ndalo. Chain y Lostri se escudaron en que 鈥渢odo era legal鈥 y no pod铆an hacer nada, una pasividad que siempre muestran a la hora de no discutirle un negocio a un colega. Lo 煤nico que hicieron, por presi贸n vecinal, fue sugerir a los desarrolladores que cambiaran el dise帽o y no hicieran una torre sino un edificio. Los especuladores simplemente dijeron que no y eso fue el fin de la actividad oficial.

Este nivel de pasividad y abulia es absolutamente normal y deliberado. La demolici贸n clandestina del viejo asilo de S谩nchez de Bustamente es un ejemplo clar铆simo de c贸mo se arma todo para que no haya controles. Como se recordar谩, la Defensor铆a denunci贸 a la Dgfyco que se estaba destruyendo el edificio sin permiso ni medidas de seguridad, por aviso de vecinos. La Direcci贸n se tom贸 dos semanas para aparecer y como no los dejaron entrar, se fueron sin registrar novedad, aunque la obra se puede ver por la ventana. Resulta que volvieron el 10 de agosto y no hab铆a nadie, con lo que no hicieron nada otra vez. Luego volvieron el 20 y otra vez no los dejaron entrar. Y este mi茅rcoles 25 volvieron al lugar, donde otra vez nadie abri贸 la puerta.

El pat茅tico argumento de los inspectores es que si no los invitan, no pueden entrar sin orden judicial. Como G贸mez Coronado los presiona, le giraron el tema a la secci贸n legales de la Direcci贸n, pidiendo a Javier Ib谩帽ez 鈥搎ue parece es el titular todav铆a no asumido de la Agencia de Control鈥 que pida a la Justicia una orden de allanamiento. Es un recurso extremo, casi imposible: el macrismo nunca pidi贸 una en dos a帽os y medio, y nunca hubo una emitida para un caso as铆 por pedido de particulares.

Si resulta incre铆ble que la Ciudad no pueda inspeccionar una obra clandestina, hay que pensar por qu茅 pasan las cosas. La l贸gica es la del dinero, la de ampliar la impunidad de la especulaci贸n inmobiliaria a costa del patrimonio, la calidad de vida y hasta de las vidas de vecinos y trabajadores.

Mientras, en Floresta

Los vecinos de Floresta denunciaron que sigue la demolici贸n clandestina de una bella quinta italiana en la calle Bacacay, que ya hab铆a llegado al CAAP sin sus techados. El caso de la Villa Elizabeth, en Bacacay 3450, apareci贸 por acaso justo en la sesi贸n del Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales en la que estuvieron Basta de Demoler y este suplemento. Fue curioso ver a los consejeros vacilar entre el evidente valor de la casa de 1912, preciosa, y su falta de techumbre, un acto vand谩lico deliberado, para convertirla en ruina y as铆 zafar de la legislaci贸n vigente. El preciosismo del CAAP los hac铆a dudar de 鈥減remiar鈥 a los due帽os con una catalogaci贸n, con lo que estaban casi diciendo que hab铆a que 鈥減remiar鈥 al vandalismo interesado, permitiendo que la demolieran. Catalogar 鈥搊 mejor dicho, proponer la catalogaci贸n鈥 no es un premio, es un instrumento para detener justamente este tipo de avivadas.

Se ve que la duda sigue, porque los vecinos de Salvar Floresta denuncian que la villa est谩 siendo destruida de a poquito. Ya faltan las m茅nsulas de los balcones que se ven en la foto y las rejas, y el estado de los interiores debe ser ya muy malo. La pobre casa est谩 siendo castigada por estar en la nueva zona de comercio que surgi贸 explosivamente sobre Avellaneda y est谩 arrasando edificios sin el menor control de la Ciudad. Cualquier tapera ahora se vende a buen precio 鈥搇iteralmente, a la vuelta de la villa hay una tapera ruinosa que ahora vale oro鈥 pero s贸lo para hacer locales.

La falta de control ya no asombra a nadie, pero en este caso ya es una falta de respeto a varias bandas. Resulta que la villa tiene pedido de catalogaci贸n por un proyecto presentado a la Legislatura el 26 de marzo nada menos que por la presidenta de la Comisi贸n de Planeamiento Urbano, Silvina Pedreira. Al desaparecer el techo, la Defensor铆a del Pueblo pidi贸 a la Dgfyco una inspecci贸n el 11 de mayo. 驴Saben cu谩ndo fueron? Jam谩s.

Los vecinos est谩n dispuestos a dar pelea por su barrio y convocaron a una actividad para el s谩bado que viene a las once de la ma帽ana. Salvar a Floresta y la Defensor铆a del Pueblo porte帽o se re煤nen en la carpinter铆a Velasco, una esquina del novecientos que fue f谩brica de escobas y es una joyita italianizante con entrada en la esquina, una muestra perfecta de una arquitectura porte帽a que est谩 en v铆as de extinci贸n. Los vecinos, con el defensor adjunto Gerardo G贸mez Coronado, quieren salvarla como un ejemplar hist贸rico de la vieja industria liviana de la ciudad. La cita es en Lacarra 148. Informes en www.salvarafloresta.blogspot.com o en www.gomezcoronado.com.ar.

Fiesta en Barracas

Este domingo comienza la semana de Barracas, capitaneada por el Circuito Cultural Barracas y con esa deliciosa ONG que es Proteger Barracas como invitada especial. El arranque es con la ya tradicional fiesta que organiza el Circuito en la plaza Colombia, Montes de Oca y Brandsen, a partir de las 15. Proteger Barracas tendr谩, por convite, una mesa para reunir firmas para los proyectos de ley que buscan proteger el patrimonio del barrio, limitar las torres y frenar la destrucci贸n silvestre de sus casas.

El Circuito naci贸 en 1996 en una casa de la calle California como una murga, y fue evolucionando hacia un proyecto cultural comunitario con un fuerte lado teatral. El primer domingo de cada mes, el grupo muestra lo suyo con una fiesta frente a su sede en Iriarte 2165 y sus espect谩culos llevan a帽os present谩ndose en diversos puntos. Tambi茅n son conocidas sus giras por la ciudad, presentando el show 鈥淐ambio clim谩tico o recalentamiento barrial鈥. O sea que este domingo la cosa mezcla fiesta callejera y firmas para que la Legislatura apruebe de una vez las leyes que salven Barracas. M谩s informaciones en www.protegerbarracas.com.ar.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.