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nTodav铆a hay gente que anda diciendo que proteger el patrimonio en serio es retr贸grado, rom谩ntico y perjudicial para los porte帽os. Son los que aceptan la catalogaci贸n de alg煤n edificio puntual, formato Monumento Hist贸rico, pero tienen un rechazo visceral a la zonificaci贸n, sea baja de alturas o Area de Protecci贸n Hist贸rica. Pero todo el que no haga Arquitectura de Contadores, pensando s贸lo en dinero, sabe que esto no es cierto y que el aparente realismo de los especuladores es cinismo monetario. Esta semana se pudo ver en fuerte contraste qu茅 resultados urbanos da la protecci贸n patrimonial: a un lado de la pantalla, los premios a la Mejor Intervenci贸n en el Casco Hist贸rico de la Sociedad Central de Arquitectos; en el otro, el anuncio de otra obra ramplona y aburrida en Barracas.
La SCA present贸 el lunes los ganadores de su premio y nada casualmente todos los distinguidos son tratamientos de calidad en edificios de calidad. El primer premio en la Categor铆a 1 fue compartido por Ana Mar铆a Carri贸 por su estupenda restauraci贸n del hotel de Salta y Avenida de Mayo que hoy ocupa la Fundaci贸n Cassar谩, y el Estudio Hampton-Rivoira por las obras en Alsina 771. El segundo premio fue para el hotel en Chacabuco 762, de Neumann y Kohn, que fue tapa de m2 este mismo mes. La Categor铆a 2 distingui贸 al Hotel NH Towers de Urgel-Penedo-Urgel y Armando Otero y la obra de Daniel Silberfaden en Defensa 267. La Categor铆a 3 distingui贸 nada menos que las obras de restauraci贸n de Alric y Gal铆ndez en el Pasaje Barolo, ese objeto po茅tico de nuestra ciudad. Y el Museo del Bicentenario de B4FS recibi贸 un premio a la puesta en valor del patrimonio arqueol贸gico.
驴Qu茅 tienen en com煤n estos trabajos distinguidos? Que fueron realizados por arquitectos impecablemente comerciales, ni rom谩nticos ni opuestos a la construcci贸n, y que est谩n todos en 谩reas protegidas por ley. La SCA simplemente distingui贸 un aumento en el stock de calidad de la ciudad.
Pero fuera de estas 谩reas, donde la ley impide el adocenamiento lucrativo, pasan otras cosas. Por ejemplo, lo que ocurre ahora con el garaje de Uspallata al 700, una pieza urbana que cualquier pa铆s civilizado cuidar铆a por s铆 misma y por la rara perfecci贸n de la cuadra en la que est谩.
Barracas es, como se sabe, el verdadero pulm贸n patrimonial de Buenos Aires, due帽a de la mayor colecci贸n de edificios hist贸ricos de la Argentina. Es tambi茅n el nuevo campo or茅gano de los especuladores inmobiliarios, que descubrieron que est谩 cerca del centro y 鈥揺fecto Palermo Viejo鈥 pueden ponerla de moda. Con lo que empezaron a caer edificios y se organiz贸 el ataque corporativo contra la idea de extender el APH1, bajar alturas y frenar la piqueta. Una pieza de esta batalla fue el garaje insertado en una cuadra de altura perfectamente pareja, una rareza porte帽a que parec铆a uno de esos trazados ideales italianos, un ejercicio de fuga.
Este edificio fue la t铆pica inversi贸n de inmigrante, con un espacio comercial 鈥揺l garaje鈥 y varias viviendas por encima, para habitar y para renta. Hace un siglo, la arquitectura comercial argentina merec铆a el nombre y el edificio naci贸 con garbo y buena factura, c贸modo entre sus vecinos y bonito sin pretensiones. El problema es que hoy resulta chico para una industria que piensa en miles de metros y dise帽a con dos Biblias, la planilla Excel del contador y el m铆nimo admisible del C贸digo Urbano.
Estas Biblias son tan potentes que hasta el Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales 鈥渄esestim贸鈥 el garaje, con el capricho con que suelen hacerlo. El terrenazo se vendi贸 y quienes comenzaron a demoler, de adentro para afuera, hasta les mintieron a los vecinos diciendo que se iba a conservar el garaje.
Ahora se sabe que no ment铆an del todo, ya que el especulador inmobiliario de turno va a preservar la fachada del edificio, con sus ojos vaciados y transformada en un decorado para una torre muy grande, cuadrada, olvidable. Ir贸nicamente, el material de venta del edificiote habla de la 鈥渇achada hist贸rica鈥, que le cae tan bien que las dos entradas del garaje le sirven para la calle interna de circulaci贸n de veh铆culos. El bodrio arruina para siempre la perspectiva de la cuadra, pero ofrece 鈥渧istas a茅reas鈥 del barrio. Esto es otro caso de vampirismo, en que un edificio enorme se vende porque desde el balc贸n se puede ver la bonita vista del barrio bajo que est谩 estropeando.
Los vecinos de Proteger Barracas est谩n tristes, por la p茅rdida y porque ellos tendr谩n que ver este feo y desgarbado edificio de ahora en m谩s. Uno de ellos se hizo una pregunta atinada: 驴qu茅 sentir谩n los arquitectos que destruyen un edificio bonito para reemplazarlo por algo tan obviamente mediocre?
Esta semana se reuni贸 la comisi贸n de Planeamiento Urbano de la Legislatura porte帽a y aprob贸 el proyecto de crear el Area de Protecci贸n Hist贸rica de la City porte帽a. Esta ley de Patricio Di Stefano ya tiene primera lectura y es muy probable que pase al recinto este jueves, con lo que Buenos Aires tendr铆a una zona hist贸rica entre la Plaza San Mart铆n y el Parque Lezama. La comisi贸n vot贸 casi un谩nimemente, porque para variar el diputado Campos se puso en una minor铆a de un hombre solo y prometi贸 un despacho propio. El diputado objeta que el nuevo APH tendr谩 una altura m谩xima de 32 metros, con l铆mites de enrasamiento para abajo de acuerdo con los vecinos, sin posibilidades de planta baja despejada o semidespejada, y sin trucos contables como estacionamientos y halls abiertos para poder irse m谩s para arriba. Campos afirma que esta altura es un regalo a los especuladores y prefiere mantener el sistema de FOT que rige en el resto de la ciudad.
Esto es muy cuestionable, ya que el FOT suele dar resultados inesperados para el tejido urbano y muy lucrativos para los especuladores. De hecho, todo proyecto contrata un 鈥渆specialista en C贸digo鈥 para encontrarles la vuelta a los metros de m谩s. El l铆mite de 32 metros aclara las aguas y de hecho baja con mucho las alturas en las avenidas.
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