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Que no venga el viejo de la bolsa. Es lo que parece pedir a gritos Scott Weiland, aunque recordando la alegr铆a que le daban sus visitas, en el tema Bagman, del reciente disco ep贸nimo de Stone Temple Pilots y el primero desde aquel Days of the Week de 2001. La canci贸n tiene el clima del hard rock zapado de los 鈥70, al igual que Hazy Daze, otra nueva que camina la misma delgada l铆nea qu铆mica. Ambos podr铆an ser bonus tracks para la autobiograf铆a narc贸tica que el cantante de 42 a帽os est谩 preparando, con m谩s caracteres dedicados a sus constantes reca铆das e ingresos a rehabilitaci贸n que a otra cosa. Pero, recuperado ya de sus adicciones y en su peso (隆lleg贸 a pesar s贸lo 60 kilos hace unos a帽os!), Weiland se ha vuelto a poner al frente del grupo que en los 鈥90 le hizo (un poquito de) fuerza al brit pop desde el mainstream. Stone Temple Pilots est谩 de vuelta y esta vez, a diferencia de los d铆as de su primera visita a la Argentina en 2008, se mueve por fuera del circo de la memorabilia: el disco Stone Temple Pilots es su novedad, y lo acompa帽an con una soberana gira que ayer los tuvo tocando en Dubl铆n y ma帽ana los arrimar谩 a Londres. Hasta fines de junio girar谩n por Europa, entre agosto y septiembre liquidar谩n Estados Unidos y Canad谩 y, al parecer, noviembre los ubicar铆a en los escenarios sudamericanos.
Este 17 de octubre, adem谩s del 65潞 D铆a de la Lealtad peronista, se cumplir谩n dos a帽os de aquella angustiante visita con la que STP cerr贸 la edici贸n 2008 del Pepsi Music. En la cobertura de aquella jornada, el cronista se preguntaba qu茅 clase de sociedad atormenta as铆 a un hombre como para que se consuma en demonios propios, qu茅 fue lo que quebr贸 as铆 a Weiland como para que acabara el show angustiado, roto, con el brillo escurri茅ndole de los ojos y serpenteando por la mejilla que Robert DeLeo, el bajista y compa帽ero de aventuras non sanctas, le sec贸 descuidadamente sobre el tablado del Club Ciudad de Buenos Aires. Weiland se ha puesto a reflexionar y en Stone Temple Pilots intenta respuestas, como muchos alguna vez, a la insoportable levedad de ser un bardero. Y a diferencia de otros casos, la reflexi贸n que habilita es que no hace falta que vuelva a enchastrarse... tanto.
Jorge Araujo de Gran Martell, Gustavo Rowek de Nativo, Tom谩s Taranto de Infierno 18, Doma de El Perrodiablo, Patricio Feely de Hamacas al R铆o e Iv谩n Gram谩tico de Ojas votaron a aquella presentaci贸n gasificada de Stone Temple Pilots como show internacional en la Encuesta 2008 del NO (que, en ese rubro, gan贸 Spiritualized). Pero en la encuesta de la d茅cada nadie se acord贸 de la banda de Weiland, los hermanos Robert y Dean DeLeo y el batero Eric Kretz. Dif铆cilmente este disco los ubique nuevamente entre los preferidos cuando llegue la Encuesta 2010. Stone Temple Pilots no es mucho m谩s que un buen disco de una banda que despert贸 cari帽os, vicios y broncas.
Qu茅 lejos est谩n estas doce canciones de las de Core (Plush, Sex Type Thing) o Purple (Interstate Love Song, Big Empty), incluso de aquel disco menor pero tan cumplidor que fue Tiny Music... Songs from the Vatican Gift Shop (Trippin鈥 on a Hole in a Paper Heart, Lady Picture Show). El corte de este nuevo 谩lbum, Between the Lines, es m谩s de lo mismo. Super贸 a cualquier otro corte de la banda en los charts de m煤sica moderna en Estados Unidos y se col贸 segundo en los de m煤sica mainstream, algo que no consegu铆an desde Trippin鈥 on a Hole in a Paper Heart. Pero es un buen tema, no m谩s que bueno. Y lo mismo se puede decir de Cinnamon (驴homenaje expreso a Stone Roses? 隆Al menos en el sonido!), de Dare if you Dare (驴Bowie y las ara帽as de Marte?), de Fast as I can (驴autohomenaje?) o de First Kiss on Mars (驴Elvis Costello?).
Stone Temple Pilots tiene ese corte revisionista desde que revisita a la banda, las melod铆as en escalada, el sonido de sus guitarras grunge y las bater铆as funcionales, las letras enroscadas o pasadas de rosca, y a la vez vuelve a visitar cada influencia de la banda, ocho a帽os despu茅s del que entonces pareci贸 el final abrupto, escandaloso y definitivo de 2002, pero que se convirti贸 en simple impasse con el regreso en 2008. La producci贸n del disco cay贸 en manos de los DeLeo y, m谩s all谩 de la fidelidad al sonido de STP, un productor asociado hubiera venido bien. 鈥淎rt铆sticamente tenemos una reputaci贸n, un estilo, pero procuramos no repetirnos, ser ingeniosos, que cada vez que entreg谩s material nuevo sientas que la mierda que est谩s dando a la gente les guste鈥, le explic贸 Dean DeLeo a la prensa estadounidense. Y que, en realidad, es su disco 鈥渕谩s country, debido a canciones como Huckleberry Crumble o First Kiss on Mars鈥. M谩s o menos se entiende.
Pero, 驴d贸nde queda Velvet Revolver en todo eso? Sigue donde estaba, sepultado bajo una monta帽a de drogas y declaraciones cruzadas de las que Weiland entreg贸 un par a Austin Scaggs, de la Rolling Stone: 鈥淪alvo Van Halen, nunca vi a una banda recuperarse luego de perder a su cantante. Pero les deseo lo mejor. Slash acaba de sacar un disco todo estilo Santana. Matt Sorum tiene un curro en Las Vegas con bailarinas de burdel. Duff McKagan no necesita plata porque invirti贸 al principio de Starbucks鈥, se帽ala el cantante, denotando no demasiado cari帽o por sus ex compa帽eros de ese otro proyecto que se fue al diablo enseguida. 鈥淗abernos dado aire con proyectos paralelos tempranamente ayud贸 a que hoy volvamos a estar juntos. Fueron interesantes porque nos permitieron explorar otros sonidos, pero a la vez te hacen decir: 鈥楲a puta madre, extra帽o mi banda, mi casa鈥欌, interpret贸 hace poco Weiland.
La vuelta desde aquel infierno de los STP es sabida: Dean DeLeo pilote贸 cuanto pudo las llamadas de varios productores de festivales norteamericanos y europeos que los quer铆an y ofrec铆an una cifra algo escandalosa. La rehab no se paga sola, as铆 que aceptaron nom谩s y aqu铆 estar谩n en algunos meses: Brasil, M茅xico, Chile, Per煤 y (隆s铆!) la Argentina est谩n en sus planes para el final sudamericano de su gira 2010. Eso si aparecen los productores y la plata escandalosa. 鈥淭ocar en la Argentina es como tocar frente a 40 mil bateristas. La manera en que entienden la m煤sica, conocen los ritmos, cada nota, es una pasi贸n que s贸lo se encuentra en Sudam茅rica鈥, moj贸 la oreja el baterista del grupo, Eric Kretz, en di谩logo con la prensa trasandina.
Adem谩s, estos a帽os de parate le han aportado m铆stica a la banda. David Slade, el director del oscuro video de Sour Girl, es hoy m谩s conocido como el director de Eclipse, el cierre de la saga Crep煤sculo. Para el arte de este disco convocaron al artista Shepard Fairey, un ser铆grafo de culto que, entre otras cositas, hizo afiches para la campa帽a de Barack Obama y dise帽贸 esa joyita que es la portada de Mothership, de Led Zeppelin. Y los Pilots aparecen incluidos en Guitar Hero: Warriors of Rock, la nueva entrega de la saga del air guitar.
Entre tanto esc谩ndalo y fango, para Weiland estos 20 a帽os no han pasado en vano. As铆 como ya no llama al viejo de la bolsa, el hecho de ser padre lo ha centrado (un poco, al menos): 鈥淭en茅s que avivarte y encontrar el modo de no prenderte fuego. Es muy jodido cuando te llaman tus pibes a la medianoche, llorando, pregunt谩ndote cu谩ndo volv茅s a casa鈥.
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