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Y sí, otra vez sopa, como diría Mafalda, el entrañable personaje creado por Quino, los Babasónicos lo hicieron de vuelta: campeones por segundo año consecutivo en lo que refiere a la categoría de show argentino. Aunque esta vez no estuvieron solos, ya que tanto Fito Páez, con su celebración por los 20 años de El amor después del amor (el disco más vendido de la historia del rock argentino), y Divididos, con sus presentaciones en El Teatro de Flores, se coronaron en el primer lugar de una de las votaciones más reñidas de los últimos tiempos.
Para los amantes de la democracia y el sufragio, sépanlo: su voto valió. Y mucho. Un solo voto separó a los primeros de los segundos y a los segundos de los terceros. Ese simple y único acto de elegir a los ganadores de cada una de las seis categorías propuestas para este 2012 logró resultados inéditos. Con un año cargado de grandes shows a nivel nacional, al triple empate del primer puesto se le sumó otro triplete en el segundo lugar con los recitales de Tan Biónica en el Luna Park, el Buenos Aires Funk and Soul Festival en Niceto y Eruca Sativa (que también peleó mano a mano en la categoría disco del año) en Vorterix, más allá todos los artistas que fueron votados en repetidas ocasiones, pero en distintos escenarios argentinos.
El show del Teatro Vorterix de Babasónicos fue una clara muestra del combo alternativo y popular. Acostumbrados a cantidad de recitales en el Luna Park, Obras y todo festival que se cruce por delante, las cuatro fechas organizadas en principio para el local de Colegiales quedaron cortas. Tal fue el clamor multitudinario por la banda que hubo que agregar dos más, para llegar a un total de seis presentaciones en Vorterix. En el show hubo de todo: desde temas de sus primeros discos hasta algunas curiosidades de Carolo, el disco con los inéditos que datan de la época de Jessico (algo así como el “Big Bang” de los comandados por Adrián Dárgelos). Con un histriónico juego de luces sobre el escenario, sumado a la calidad escénica de la banda, las presentaciones en Vorterix redondearon otro gran año para los Babasónicos.
Otro de los ganadores fue Fito Páez. Que El amor después del amor marcó una ruptura en lo que concierne a las máquinas registradoras de nuestro rock, se sabe. Que ese disco está dedicado a su ex pareja, Cecilia Roth, también. Pero que los festejos por los 20 años de semejante obra lograron convocar un público de más de 35 mil personas en tan sólo una noche en el Planetario, invoca otro record, sumados a los once Gran Rex y tres estadios de Vélez de hace dos décadas.
Por último, y no menos importante, el dúo Mollo-Arnedo con la suma del baterista elegido, Catriel Ciavarella, volvió a estar en los primeros lugares con su seguidilla de recitales en El Teatro de Flores. Con una formación estable hace ya unos cuantos años, un disco, Amapola del 66 (no tan nuevo, de 2010) y su primer CD-DVD en vivo, Audio y Agua, los oriundos de Hurlingham siguen destrozando orejas y parlantes por toda la ciudad, demostrando que, a pesar de los años, siguen siendo una verdadera aplanadora del rock.
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