Imprimir|Regresar a la nota
Arranca la tercera temporada de Amar, de Alejandro Catalán, esta vez con algunos cambios en el elenco. Amar, como todas las obras de Catalán, es un trabajo para gozar de la actuación. El amor en la generación de treintaipico es la excusa para que estos actores transiten un electrocardiograma emocional, acompañados por la música, que los lleva y trae. En un boliche, varias parejas de amigos se reencuentran y repasan cómo cada uno lleva sus cuentas amorosas. El otro gran protagonista de la obra es la iluminación. Digitada por los mismos actores a cada momento, con linternas y foquitos que son una muestra más de la artificialidad del teatro, y a su vez, de lo poco que interesa eso. Cuando la ficción se arma –igual que en el amor– todo lo demás deja de importar.
Jueves y viernes a las 22, en El Camarín de las Musas,
Mario Bravo 960. Entrada: $ 60. Reservas: 48620655.
Luego de la exitosa Mujeres en el baño, que inició la trilogía Mujeres en 3D, Mariela Asensio presenta esta nueva obra. Un set de filmación. Un grupo de mujeres dispuestas a todo con tal de permanecer activas en el show business. Un hombre dueño. Un mundo estético de cirugías y dietas. Un imperio light que produce y reproduce imágenes de plástico. Publicidad. Música pop, música electrónica, rock and roll. Una comedia trágica. Una tragedia cómica. Esto es un show y todo es un show en este show. Protagonizada por Valentina Bassi y José María Muscari, Pamela Rodríguez, Débora Zanolli, Valeria Alonso y Raquel Ameri.
Viernes y sábados a las 23, en Ciudad Cultural Konex,Sarmiento 3131. Entrada: $ 80.
Con su cuarto opus en una década de vida, el grupo de Alejandro Fassi alcanza su obra de madurez, un disco-libro que reúne no sólo cantantes invitados, sino también escritores e ilustradores. Si para su primer demo el grupo ponía en portada un collage de Frida Kahlo, en Fábulas de la locura los ilustradores invitados provienen de un amplio rango estilístico, que va de Hermenegildo Sábat hasta Gustavo Sala, pasando por Mandrafina y Rocambole, entre otros. Lo que ilustran son cuentos, basados en cada uno de los diez temas de estas Fábulas de la locura, entre los que se destacan Sergio Olguín, Reynaldo Sietecase, Eduardo Mileo y Alberto Muñoz. Pero son los invitados los que dan vida a la música propiamente dicha, y de Montevideo llegan Sebastián Teysera (La Vela Puerca), Emiliano Brancciari (No Te va Gustar) y Roberto Musso (El Cuarteto de Nos). De este lado del río brillan con luz propia el Chizzo, Jorge Serrano y Gringui Herrera. Dos covers engalanan el impecable resultado final: el bonus “Primavera 0”, al que suma Andrés Giménez. Y ese “Héroes” que a esta altura es más de Fricción que de Bowie, con Walas de Massacre y Richard Coleman como cereza sobre la torta.
Estados del ser es el subtítulo de esta tercera escala de Suzanne Vega en la revisión acústica que ha decidido hacer de toda su carrera. Si los indispensables primeros dos discos estuvieron dedicados a las canciones de amor (Marlene On the Wall y Caramel) y sobre gente y lugares (Luka y Tom’s Diner), es el turno de los temas sobre la salud mental, como cariñosamente Vega confiesa haber llamado al volumen. “Instant of The Hour After”, el inédito con el que cierra el disco, fue escrito para una obra de teatro sobre Carson McCullers.
Sádicos jefes guerreros enfrentados a los más nobles pero no menos marciales monjes: tal es el choque central de la nueva película del director Benny Chan, una divertida aventura de kung fu y redención protagonizada por Andy Lau, una de las máximas estrellas del cine popular asiático. En esta reformulación del film debut de Jet Li Shaolin Temple, de 1982, Andy Lau interpreta a un maquiavélico y belicoso general de la joven China republicana que, sumido en el arrepentimiento por su pasado de crueldad, encuentra refugio y consuelo en el templo de Dengfeng, retiro de paz a la vez que centro de entrenamiento de artes marciales. Historia de poderosos y oprimidos y de batallas sangrientas, Shaolin encuentra algunos de sus mejores momentos cuando libera su sentido del humor, particularmente en las apariciones del viejo y querido Jackie Chan, interpretando a un monje y cocinero que jamás se destacó en las artes marciales (¡!) pero que sí sabe cómo defenderse con un wok.
Su título original es Puncture, “pinchazo”, y alude a la aguja fatal con la que una enfermera se infecta accidentalmente de HIV mientras hace su trabajo. Alrededor de este tema y sus múltiples derivaciones gira este drama basado en una historia real que tuvo consecuencias contundentes en la industria de los insumos médicos norteamericana. Un ambicioso abogado, el cocainómano Mike Weiss (Chris Evans, el limitado protagonista de Capitán América) encuentra el caso de su vida cuando un amigo de la enfermera accidentada, Jeffrey Dancort (Marshall Bell), le da a conocer su causa: la nueva aguja retráctil (no reutilizable y por lo tanto menos riesgosa) que ha inventado, es rechazada por los fabricantes de insumos médicos por sus costos. El resto es el relato de tres individuos contra una corporación poderosísima, un drama intenso y entretenido que no pasó por los cines pero puede perfectamente disfrutarse en un televisor, como un telefilm mejor que el promedio.
El protagonista de la tercera película del escritor Alberto Fuguet —director de Se arrienda y Velódromo— es Alejandro Tazo (Pablo Cerda), quien llega desde Santiago de Chile hasta Nashville, Estados Unidos, siguiendo a una chica norteamericana. Pero apenas ha arribado cuando sobrevienen la decepción amorosa y la pérdida de rumbo: varado emocionalmente, confundido, algo alienado, pasa sus días en casas de slackers, o en trabajos precarios, experimentando la particular vida de ruta y habitaciones de hotel baratas. Fuguet se permite momentos de un humor seco, como cuando el protagonista se cansa de hablar en inglés, y empieza a hacerlo en castellano incluso donde sabe que no será comprendido. Pero aunque en principio parezca algo distanciado, el punto de vista del relato consigue mostrarse empático y sensible en aquellos momentos en que participa de la confusión y la sensación de extravío que embarga a Tazo desde sus diálogos afilados y sus silencios significativos, su melancolía y sus canciones.
Viernes y domingos a las 20, en el Cosmos-UBA, Av. Corrientes 2046
15 años después de su primer largo, una producción casera pero muy ingeniosa y formalmente brillante hecha por 18 pesos convertibles, los muchachos de Farsa Producciones regresan por tercera y última vez a sus personajes más queridos: John West, Bill Johnson y Max Giggs. Es decir, los tres sobrevivientes del apocalipsis y cazadores de zombies de Haedo, que, mucho más adultos, siguen hablando con voces de imitación de doblaje neutro. Es notable cómo, aunque se profesionalizaron filmando para productores importantes, estos realizadores no perdieron el espíritu lúdico, el humor ni el amor de siempre por el cine de súper acción, ahora alimentado por recursos mucho más impresionantes.
Viernes a la medianoche,en el Malba, Av. Figueroa Alcorta 3415
¿Quién es Karl Pilkington? El hombre es una pequeña celebridad en el Reino Unido, gracias a la larga colaboración creativa que lleva con los más famosos Ricky Gervais y Stephen Merchant, los creadores de las extraordinarias series The Office y Extras. Pilkington trabajaba como productor del programa radial de estos dos, que a cambio lo atosigaban permanentemente, hasta que uno de los desafíos que le lanzaron se materializó en un programa televisivo: con la consigna de recorrer el mundo para salir de su “zona de comodidad”, Pilkington empezó a viajar con una cámara en la segunda mitad del 2010; el resultado es An Idiot Abroad, ocho episodios de 45 minutos, todo un reality de viajes en el que el protagonista nunca sabe cuál será la próxima misión encargada por sus instigadores, que lo monitorean desde sus cómodos sillones en Londres.
Por Infinito.
Desprendimiento de la serie Bones, creada por el mismo autor de aquélla, Hart Hanson, esta ficción estreno gira alrededor del personaje de Walter Sherman, un hombre y el don que adquirió en Irak: una capacidad sobrenatural para recuperar cosas y personas perdidas. En el frente era reconocida su habilidad para rastrear a insurgentes y desertores y encontrar artefactos de todo tipo, incluyendo explosivos. Y fue justamente una bomba improvisada que lo encontró a él y el daño cerebral provocado por su detonación lo que lo convirtieron en este raro e improbable héroe, devenido investigador privado fantástico, con algo de Dr. House. Lo rodean la bella y misteriosa Ike (Saffron Burrows) y Leo Knox (el gigantón Michael Clarke Duncan, conocido por Milagros inesperados). Para disfrutar con el cerebro desconectado.
Miércoles a las 22,por Fox.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.