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Tras una exitosa temporada vuelve a escena este clásico de Florencio Sánchez, con dirección de Eva Halac. La obra expone a una familia acomodada que ha caído en desgracia. El padre, jugador compulsivo, perdió la fortuna en la timba y los burros. Toda la familia ha caído en un caos de irresponsabilidad. El hijo mayor llega de visita y se propone regenerar a sus padres y hermanos asumiendo la autoridad de la casa. Damián, el hijo pródigo, lucha como un héroe contra Jorge, su propio padre, quien, irónicamente recibe como piedrazos los valores que su hijo le reclama y que él mismo le inculcó en su infancia. En familia fue estrenada el 6 de octubre de 1905 en el teatro Apolo de Buenos Aires, por la Compañía de los Hermanos Podestá. Con Guillermo Pfening, Carlos Scornik, Monina Bonelli, Guido Massri, Natalia Señorales, Agostina Degasperi y Marcos Rauch.
Viernes a las 21, sábados y domingos a las 20, en el Complejo Cultural Teatro 25 de Mayo, Triunvirato 4444. Entrada: viernes popular: $40, Sábados y domingos: $60.
La obra del dramaturgo Franco D’Alessandro recrea la relación entre Ana Magnani y Tennessee Williams, una amistad donde los dos compartían el arte y la pasión por el teatro. Anna Magnani encarnó en el cine un rol central en La Rosa tatuada de Tennessee Williams y también trabajó en Piel de serpiente, con Marlon Brando como coprotagonista. Los avatares de Hollywood, de Broadway, lo que significaba para Tennessee Williams la creación dramática y luego el choque con el mundo del espectáculo, su adicción al alcohol, el amor y la confianza incondicional que hubo entre ambos, están presentes en la obra. La gran actriz del neorrealismo se convierte en Roma en su madre, su amiga y su hermana. La relación entre los dos personajes crece en intensidad y pocos secretos que quedan entre ambos. Con Virginia Innocenti y Osmar Núñez. Dirigida por Oscar Barney Finn.
Jueves, Viernes y Sábados a las 20, en el Centro Cultural de la Cooperación, Corrientes 1543. Entradas: $ 130.
“Hoy todas las guitarras están de luto”, escribió Pedro Aznar en una carta que hizo pública el día de la muerte de Luis Alberto Spinetta, el 8 de febrero del año pasado. Dos meses más tarde, auspiciado por la Municipalidad porteña, Aznar homenajeó casi en soledad –con la sola presencia de Pomo, de entre los músicos habituales del Flaco– una obra inabarcable. Lo hizo de manera impecable, virtuosa y emotiva, empezando por el díptico de apertura, donde interpreta solo con su guitarra un virtual resumen de popularidad y excelencia estética del homenajeado en dos pasos: “Tema de Pototo” y “Cantata de puentes amarillos”. La edición íntegra del show en un doble CD incluye dos rarezas para fanáticos: el tema central de la obra de teatro Lenny Blues, de comienzos de los ’80, compuesta por Spinetta y que aún pemanecía inédita. Y el único tema que compusieron juntos Pedro y Luis Alberto, “Alas de la mañana”, incluido en el disco Dos Zorros, de Lito Epumer.
Hago lo que quiero y quiero lo que hago fue el título-declaración de principios del álbum debut como solista del baterista de Pez, que venía soltando su voz en algunos discos del grupo. Cuatro años después, su flamante segundo opus es un álbum de separación, en el que junto a Los Crudos –tal el nombre del dúo que lo acompaña, integrado por Gonzalo Giménez en bajo y Migue Pagliarulo en batería– Franco arranca siguiendo la senda de Pappo’s Blues, pero luego se permite acusticazos como “Nos fuimos”.
Si bien es cierto –cualquier fanático de la primera hora está dispuesto a aceptarlo– que Los Simpson comenzaron a perder potencia hace cerca de diez años, todavía vale la pena echarle un vistazo a un capítulo que otro, al menos salteado, cada tanto; por algún destello de ingenio, por sus invitados famosos, o simplemente para ver cómo han crecido los chicos. Que no conserven el poder contracultural con que irrumpieron en el mainstream a principios de los ‘90 no es sino testimonio de la influencia que tuvieron no solo sobre los nuevos dibujos animados sino sobre el medio en general: la familia en televisión nunca volvió a ser la misma después de los disfuncionales amarillos de Matt Groening. La edición en DVD de la 15ª temporada completa –encandilante caja desplegable en cuatro discos, con la cara del inefable y un poco temible Otto, el colectivero escolar– ofrece un artefacto ideal para espíritus completistas, para ir poniéndose al día, y disfrutar de un par de extras con bocetos, pruebas animadas y otros detalles que nos meten un poco más adentro de la cabeza de estos viejos amigos.
Pasó muy discretamente por los cines hace unos meses esta rara comedia dramática con Steve Carell y Keira Knightley, uno de los films más atípicos sobre el apocalipsis que se hayan filmado jamás. Como en algún relato de Ray Bradbury y algún otro de Boris Vian, en el film de Lorena Scafaria el fin del mundo tiene fecha, pero no importan las causas ni las explicaciones: simplemente llega y no hay nada que hacer al respecto: ni mandar misiones espaciales ni guarecerse en bunkers subterráneos. Carell se aleja un poco de la caricatura y se pone en modo sincero y sensible, compensando los a veces insoportables mohínes de Knightley, para interpretar juntos a una pareja improbable de último-último momento. El resultado es bizarro y melancólico.
Dos grandes iconos del cine europeo trenzados en un duelo cinéfilo: tal como indica la presentación del ciclo, ambos –Lino Ventura (1919-1987) y Jean Paul Belmondo (1933)– fueron deportistas, solían interpretar sus propias escenas de riesgo y definieron a muchos de sus personajes a través de la acción física. Lo de Belmondo fueron los charlatanes expresivos, mientras que “Ventura daba lo mejor de sí con una mirada severa y lacónica”, pero “ambos supieron salir de esos arquetipos cuando fue necesario o bien exacerbarlos hasta la perfección”. Sin otra excusa que darle forma a un divertido capricho, ambos se medirán en una competencia compuestas por dieciséis películas imperdibles, entre las cuales se cuentan Moderato Cantabile (de Peter Brook, 1960, con Jeanne Moreau); Un cura y Morir matando (ambas de Jean-Pierre Melville, 1961 y ’62); Cartouche (Philippe de Broca, 1962, con Claudia Cardinale: la de la foto de acá arriba) o Ascensor para el cadalso (Louis Malle, 1958).
Desde el jueves 7 de febrero hasta el domingo 3 de marzo, en el Malba, Av. Figueroa Alcorta 3415.
A 70 años de la rendición del ejército alemán en la batalla por Stalingrado y 70 años del asesinato de la dirigente del movimiento de Resistencia Rosa Blanca en la Alemania nazi, Sophie Scholl, el Museo del Cine Pablo C. Ducrós Hicken inaugura la temporada cinematográfica 2013 con un ciclo doble de films relacionados con ambos episodios y personajes históricos. Se verá el inoxidable clásico de Grigori Chujrai La balada del soldado (1959, URSS) y para los próximos fines de semana se anuncian, entre otras, Ellos lucharon por la patria y El destino de un hombre (ambas de Serguei Bondarchuk, 1975 y 1959) y Sophie Scholl, los últimos días (de Marc Rothemund, 2005, con una de las revelaciones del reciente cine alemán: Julia Jentsch) y La rosa blanca (de Michael Verhoeven, 1982, con Lena Stolze).
Sábados y domingos (hasta el 24 de febrero) a las 16, en el Museo del Cine, Caffarena 49 (La Boca). Gratis
Producida por el Channel 4 británico y reciente ganadora del premio a mejor telefilm/miniserie en los Emmy internacionales, es una de las últimas maravillas que nos llegan de la televisión inglesa. Esta vez, Brooker se mete con la obsesión contemporánea por la tecnología de la información instantánea: Facebook y Twitter, smartphones, tablets, plasmas inteligentes, la nube. Con algo de La dimensión desconocida, ambientada en una zona intermedia entre “el placer adictivo y la paranoia de la vigilancia y la pérdida de la privacidad”, Black Mirror presenta una historia autónoma en cada episodio: diferentes escenarios, personajes, actores. En el primer episodio, un thriller político titulado “Himno nacional”, el primer ministro es chantajeado por los secuestradores de la princesa de Inglaterra: si quiere volver a verla viva, deberá mantener relacione sexuales con un cerdo en vivo, por televisión. Imperdible.
Martes 5 de febrero a las 22 (y repeticiones durante toda la semana), Por I.Sat
Producido y dirigido por Gregg Barson, este documental sobre uno de los mayores comediantes del cine norteamericano tiene sello “oficial” y aprobación de su retratado, que firma también entre los productores; pero esto no le quita valor al loable intento de explicar cuáles fueron sus aportes a ese arte tantas veces subvalorado y también por qué lo quieren tanto más en Francia que en su propio país. Lo que asombra y abruma es la cantidad y el tenor de los testimonios recogidos, que van de Steven Spielbergn a Quentin Tarantino, pasando por Eddie Murphy, Carol Burnett, Billy Crystal, Jerry Seinfeld, y el propio Lewis, en pleno tour mundial un par de años atrás.
Lunes 4 a la 1.35 (repite lunes 11 a las 15.10, y jueves 14 a las 12.40), Por HBO Plus.
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