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Los senadores del PJ allanaron ayer el camino para que Hermes Binner pueda asumir el 11 de diciembre sin percances y tomarle el juramento de práctica a todos sus ministros. Pero cajonearon el presupuesto de la provincia para 2008, por lo que ahora el gobernador electo deberá convocar a sesiones extraordinarias si quiere comenzar sus días en la Casa Gris con las cuentas en orden. La reforma a la Ley de Ministerios que rediseña el gabinete en doce carteras y una Secretaría de Estado de Ciencia, Tecnología e Innovación fue votada en el último día de sesiones ordinarias, en medio de una catarata de leyes y proyectos aprobados de apuro y a última hora, como ocurre en el cierre de cada período legislativo. El fin de un ciclo de cuatro años con legisladores elegidos con la fraudulenta ley de Lemas, en 2003. Y el fin de un ciclo de 24 años con hegemonía del PJ en las dos Cámaras. La semana que viene comenzará otra tiempo, con otro signo político en el poder: mayoría del Frente Progresista en la Cámara de Diputados y predominio del PJ en el Senado.
Ya desde temprano se sabía que el presupuesto 2008 no pasaba el recinto del Senado, a pesar de que anteanoche los senadores del PJ habían recibido a tres emisarios de Binner: su futuro ministro de Economía, Angel Sciara; el diputado y designado ministro de Gobierno, Antonio Bonfatti y el presidente del bloque de senadores del Frente Progresista, Juan Carlos Zabalza. La primera ofrenda política. Y un resultado incierto. Los senadores del PJ dejaron sin quórum la comisión de Presupuesto y Hacienda y por lo tanto sin despacho al presupuesto. "La decisión fue dejar el tema en manos de los futuros senadores que van a ingresar la semana que viene. Ese es el escenario en que estamos ahora", informó el senador del PJ, Juan Carlos Mercier, que ayer pareció comenzar una cruzada contra Binner.
El segundo lamento de Mercier se escuchó ya en la sesión de la tarde. Y apuntó al pedido de Binner para que la Auditoría General de la Nación controle las cuentas que le dejará Jorge Obeid. "Me molesta que la provincia tenga que recurrir a un organismo nacional para ver cómo están sus cuentas", se quejó Mercier. Y pasó otro aviso: recordó que hace un mes le hizo votar a sus colegas de bloque un pedido al gobierno de Obeid para que informe sobre el estado de las cuentas públicas, pero la Casa Gris nunca le respondió. "Desconfiar o pretender transparentar las cuentas a través de un organismo nacional no recuerdo otro hecho similar. Entonces, es razonable pensar que la intervención de un organismo nacional en una provincia tiene un respaldo constitucional que desconozco y un costo político que alguien tendrá que asumir", disparó Mercier.
Ya a la nochecita, el Senado aprobó la ley de Ministerios que tenía media sanción de Diputados, pero el asunto partió al PJ en tres pedazos: 9 senadores votaron a favor, Mercier se abstuvo y Bacalini desapareció de su banca. Esto sin contar el faltazo de Gramajo y Malugani. Resultado final: 13 a 1, con las dos senadoras socialistas y los dos radicales.
El debate comenzó con una cátedra de Mercier, que se tomó de una crítica de un investigador científico que no mencionó para disparar contra el Ministerio de Innovación y Cultura. "Entonces, la similitud que se da entre este Ministerio de Innovación y Cultura con la creación de Secretaría de Ciencia y Técnica nos parece más razonable que hubiera un Ministerio de Innovación Tecnológica, Ciencia, Técnica y Cultura", dijo Mercier.
La senadora Sandoz agradeció el gesto de los senadores del PJ y de la UCR de votar la ley pero retrucó a Mercier con una ironía. "No creo que Innovación, Ciencia y Cultura sea lo mismo. Creo que (el Ministerio de) Innovación y Cultura es una cosa y (la Secretaría de Estado de) Ciencia, Tecnología e Innovación es otra cosa, expresan conceptos diferentes y por ende están en áreas diferentes", dijo Sandoz.
El jefe del bloque del PJ, Daniel Depetris marcó cierta distancia con Mercier. "La ciudadanía de Santa Fe se ha expresado en un proceso electoral absolutamente legítimo, ejemplar: ha elegido nuevas autoridades y estas nuevas autoridades nos piden que una ley de gabinete para organizar el Estado a su saber y entender. Por lo tanto, no debe deslucirse este proceso en Santa Fe con una situación tan incómoda como que no puedan jurar los ministros designados por el gobernador electo".
"No estamos convencidos que esta sea la mejor manera de organizar el Estado, pero respetamos el derecho del gobierno de darse este tipo de organización y por eso lo acompañamos", precisó Depetris. Y siguió con más flores: "Agradecemos las palabras de Sandoz, y las agradecemos porque no hay mezquindad en estos actos. Sabemos lo que es gobernar, las dificultades que existen a la hora de resolver los problemas de la gente. Entonces, mucha suerte".
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