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Viernes, 18 de junio de 2010
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La vicegobernadora recibió a Cobos en medio de la indiferencia

"Acá está solamente de paso"

Así lo remarcó Tessio cuando le preguntaron el carácter de la reunión en la Casa Gris. Bonfatti ni siquiera bajó a saludarlo. Y tampoco aparecieron los dirigentes radicales, como Barletta, que se postulaba como su interlocutor.

Por Juan Carlos Tizziani
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Tessio, Superti y Storero se reunieron un rato con el vicepresidente Cobos.

Julio Cleto Cobos pasó por la Casa Gris en medio del vacío político y una imagen que cae en picada entre los radicales y sus aliados. Después del voto no positivo, en marzo de 2008, Hermes Binner lo había recibido con los brazos abiertos y palmadas en la espalda y hasta le ofreció el Salón Blanco para se luzca en el escenario mediático. Eran otros tiempos. Ayer, el vicepresidente volvió a la Casa de Gobierno, pero ya no hubo alfombras rojas, ni aplausos. La encargada de recibirlo fue Griselda Tessio, a cargo del Poder Ejecutivo porque Binner está fuera del país. Y lo hizo en una audiencia "estrictamente protocolar", según se encargó de aclarar la propia vicegobernadora. Un trato frío y distante. Un ninguneo político si se repasa la larga lista de ausentes, entre ellos el intendente de Santa Fe, Mario Barletta, quien se postulaba como el interlocutor privilegiado de Cobos en la provincia, pero que ayer ni apareció por el despacho de Tessio. No fue el único.

Cobos hizo una escala de una hora en la Casa Gris, en viaje a la ciudad de Avellaneda, donde el intendente Orfilio Marcón, lo invitó a compartir un acto oficial. Marcón lo había visitado en el Senado el 15 de abril y ahora el vice le devolvió la gentileza. Los dos están en campaña. Marcón quiere ser senador provincial por el departamento General Obligado, en 2011, para lo que tendrá que desplazar de la banca a su correligionario, Federico Pezz, quien pretende otro mandato y se enroló en las filas de Ricardo Alfonsín.

El vice se metió de lleno en la interna radical en Santa Fe. Y así le fue ayer. Un rato antes de recibirlo, Tessio dijo que la audiencia era "estrictamente protocolar". "El intendente Marcón lo invitó a la ciudad de Avellaneda, así que por acá está solamente de paso. Lo voy a recibir por una cuestión de protocolo porque estoy a cargo del Poder Ejecutivo", agregó.

¿No es una actividad de campaña? insistió un cronista de la Casa Gris.

No, de ninguna manera. Es una actividad institucional lo cortó Tessio.

Después, Cobos también explicó su paso por la Casa de Gobierno como un gesto de cortesía. "Como corresponde, intenté comunicarme con el gobernador Binner, pero me enteré que estaba fuera del país. Por eso, pasé a saludar a la vicegobernadora", dijo. Y fue sólo eso: un saludo. Porque Tessio lo recibió acompañada por el único ministro radical del gabinete, Hugo Storero (Obras Públicas) y su colega Héctor Superti (Justicia y Derechos Humanos). Y nadie más. El ministro de Gobierno, Antonio Bonfatti, uno de los aspirantes anotados para suceder a Binner en 2011, desarrolló su actividad oficial hasta el mediodía, pero a la una y media de la tarde cuando llegó Cobos no bajó para recibirlo. Los corrillos oficiales justificaron su ausencia en una "cuestión de agenda", pero no quedó claro si Bonfatti estaba en su despacho a esa hora o ya se había retirado.

El faltazo general de radicales quedó muy a la vista, sobre todo el del Barletta, quien pretendía convertirse en el interlocutor privilegiado de Cobos en Santa Fe, pero ayer ni se asomó por el despacho de Tessio. En la Legislatura, un diputado de la UCR fue consultado por el ninguneo al vicepresidente y se hizo el sorprendido. "Nadie me avisó", bromeó.

Pero Cobos pareció desentenderse del vacío político y explicó que sus amigos en la provincia están en el Congreso. "Tenemos contactos con los legisladores nacionales, no sólo del radicalismo sino también del socialismo", dijo. Y mencionó al senador Rubén Giustiniani, "con quien trabajamos juntos en el Senado. Somos compañeros de trabajo".

Y ahora, ¿cómo está la relación con sus correligionarios después de sus ida y vuelta?

Son etapas. El radicalismo se dividió, una parte fue (a las elecciones de 2007) con (Roberto) Lavagna y con otros justicialistas. Ya asumimos esa etapa, hicimos nuestra crítica, nuestra reflexión y ahora estamos en otra etapa. No nos vamos a anclar en el pasado contestó.

Después, cuando le recordaron su doble condición de oficialista y opositor, volvió a victimizarse. "Es una situación complicada. Mi compromiso es con la gente que me dio este mandato y estoy cumpliéndolo con las complicaciones que ustedes saben, que son públicas", contestó Cobos.

Una colega planteó a la distancia: "¿Cuándo renuncia?". Pero el vice pareció no escuchar y contestó otra sobre su interna con Ricardito. "El radicalismo se encuentra en un proceso de reunificación e institucionalización, son etapas necesarias para definir las candidaturas, no sólo del partido sino también para las próximas elecciones. Y mi posición, la vamos a definir el año entrante", concluyó.

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