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Desde Santa Fe
La jueza Susana Luna (Instrucción 4) indagará mañana, a las 9.30, al líder de Apropol, Alberto Martínez, por supuestas "coacciones agravadas" en la causa que investiga las amenazas al gobernador Antonio Bonfatti.
La audiencia estaba prevista para el 26 de diciembre, pero se postergó hasta ahora porque Martínez adujo problemas de salud, aunque después, el 7 de enero, formalizó una "presentación espontánea" en la que se puso a disposición del juez de feria, Jorge Patrizi (Instrucción 8). El abogado defensor dijo que Martínez se presentará a declarar y descartó que pueda quedar detenido después de la audiencia. "Ni siquiera lo pienso porque si lo detienen sería un absurdo jurídico", planteó el penalista Romeo Díaz Duarte en un diálogo con Rosario/12.
Como lo adelantó este diario, el fiscal federal Walter Rodríguez decidió pedir la inhibitoria de la jueza Luna en la causa por las amenazas a Bonfatti para acumularla a la investigación del alzamiento policial de diciembre, en la que ya imputó a Martínez y a cinco policías en actividad el supuesto delito de sedición el primero como instigador y los demás como presuntos autores. Pero hasta ayer, la magistrada no había recibido ningún oficio del juez federal N 1, Reinaldo Rodríguez, que debe solicitar la inhibitoria de su colega.
La jueza Luna avanzó en la investigación tras acumular dos causas: una denuncia del fiscal de Estado, Pablo Saccone contra Apropol, presentada en Santa Fe, el viernes 5 de diciembre, por supuesta "instigación a la violencia", cuando se producían los saqueos y desmanes en Córdoba. Y la denuncia de Bonfatti, unos días después, ante el fiscal de turno en Rosario, cuando recibió en su teléfono celular un mensaje de texto que le exigía: "Pagá las 12 lucas, pelado...".
El fiscal N 4 Juan Pablo López Rosas firmó el requerimiento de instrucción y pidió la indagatoria de Martínez por supuestas "coacciones agravadas", y fue citado el 26 de diciembre, pero se excusó por razones de salud: presentó un certificado médico por un cuadro de "hipertensión" y "cefalea" y designó abogados defensores a Díaz Duarte y Miguel Portillo.
El 7 de enero, en la feria judicial, Martínez formalizó una "presentación espontánea" en la que se puso a disposición del juez de turno, Jorge Patrizi. "Quiero hacer saber al Juzgado que poseo desde hace mucho tiempo el número telefónico del gobernador, por haberse reunido muchas veces conmigo, desde que se desempeñaba como secretario de Gobierno del municipio de Rosario, diputado provincial, ministro de Gobierno y ahora gobernador", dijo. Y explicó que "el "día de los hechos le envié mensajes a Bonfatti en homenaje a la confianza que el mismo nos ha dado en el tiempo y como se hacía habitualmente, diciendo que a mi criterio era 'negrero y explotador' por pagar al personal policial 5.000 pesos de bolsillo. A lo sumo puede ser ofensivo, pero ello no convalida el absurdo de hacerme comparecer a un proceso penal". "Lamentablemente, a consecuencia de estos sinsabores vividos, tuve picos de hipertensión arterial que no me permitieron comparecer ante la doctora Luna, sí a mis letrados con la debida justificación de mi inasistencia".
Martínez presentó también copia de sus últimas siete denuncias contra el gobierno. "He denunciado en muchas oportunidades al gobernador Bonfatti, al ministro de Seguridad Pública (Raúl Lamberto), a la secretaria de Delitos Complejos (Ana Viglione) y a varios funcionarios provinciales por razones de interés público relacionadas con irregularidades" en la Policía. Por lo tanto, solicitó que "el personal de esos organismos no actúe en ningún procedimiento, ni pericias que se pudieren practicar sobre teléfonos celulares y computadoras". Y que se remita a la justicia "todo tipo de documental o investigación" contra él o contra Apropol. "Esto es para garantizar un debido proceso judicial que no queremos que se tiña de un color político o termine siendo irregular por anomalías como las sucedieron en la ciudad de Rosario con material probatorio en manos policiales, sin órdenes judiciales", concluyó.
Díaz Duarte descartó que Martínez pueda quedar detenido. "Si aplicamos la lógica jurídica, sería un absurdo. Porque el delito en expectativa que le imputa la jueza Luna a Martínez es susceptible de cualquier libertad. Es más, es susceptible de excarcelación. Dónde está el peligro de fuga de Martínez? Los extremos que se requieren para una medida cautelar no existen porque siempre estuvo a derecho. Además, qué entorpecimiento de la causa puede haber? Eso es una prueba objetiva. Las grabaciones están y sobre esas grabaciones se lo va a indagar. Ni siquiera lo pienso porque sería un absurdo", concluyó.
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