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Martes, 29 de septiembre de 2015
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Habló Tognoli después de Norma Castaño en la quinta jornada del juicio

El jefe policial que hacía política

El ex jefe de la policía durante el gobierno de Bonfatti apuntó a sus superiores, al argüir que respondía a órdenes, y descalificó a la denunciante. Dijo que el narco que está acusado de encubrir, el Tuerto Mendoza, era "un pelele".

Por Juan Carlos Tizziani
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La denunciante de Tognoli, Norma Castaño, que declaró durante dos horas, al salir de Tribunales.

Desde Santa Fe

Hugo Tognoli se definió ayer como un "subordinado del poder político" al romper el silencio ante el Tribunal Oral de Santa Fe que lo juzga por supuesto "encubrimiento" a un preso por narcotráfico, Daniel "Tuerto" Mendoza y "coacciones" a la mujer que denunció a ambos, Norma Castaño. Reveló que ese mandato lo llevó en enero de 2008 a aceptar el cargo de jefe de Drogas Peligrosas, que le ofreció el entonces secretario de Seguridad Pública, Carlos Iparraguirre, en el arranque del gobierno de Hermes Binner, aunque después llegó a jefe de Policía de la provincia, en diciembre de 2011, ya con el gobernador Antonio Bonfatti. En una indagatoria de casi dos horas, Tognoli repitió su libreto y se mostró frágil de memoria ante el interrogatorio del fiscal Martín Suárez Faisal, quien le llegó a preguntar: "Y usted, ¿a qué se dedicaba cuándo era el jefe de Drogas?" "A la parte política, iba al Ministerio, me reunía con el jefe de Policía", contestó. Antes, había descalificado a Castaño por "denunciadora compulsiva", indultó a Mendoza porque "no era (el narco colombiano Pablo) Escobar Gaviria, era un pelele" y metió un fallido al llamar al ex ministro de Seguridad, Leandro Corti "ministro Rossi", por el actual ministro de Defensa, Agustín Rossi.

Tognoli cerró la quinta jornada del juicio. Poco antes, Castaño había declarado durante casi dos horas en una sala vacía de imputados, pero repleta de público y periodistas. El tercer testigo fue un vecino de Castaño, el albañil Sandro Aguirre, quien vive en la misma cuadra y enfrente de Mauricio Otaduy, el policía de Drogas Policías que filmó el video de la coacción por orden de un tercer imputado en la causa, José Luis Baella. Aguirre también estaba olvidadizo. En la instrucción, dijo que Castaño le comentó que había visto a Otaduy acercarse a un Corsa dorado frente a su casa y que arriba del auto estaba Tognoli. Aguirre recordaba el hecho, dijo que había visto a Otaduy, pero no a Tognoli. El fiscal le preguntó si tenía miedo: "Temor por mi familia", contestó el testigo.

--¿Lo conocía a Tognoli? --le planteó entonces, el presidente del Tribunal, José María Escobar Cello.

--Sí, por la televisión.

--¿Y antes?

--Por la televisión --repitió Aguirre.

Después del testimonio de Castaño, Tognoli volvió a la sala con el resto de los imputados y aceptó la indagatoria. Contó su "historia" en la policía y el día que lo llamó Iparraguirre para ofrecerle la jefatura de Drogas. "Me corrió un frío por la espalda". Pero aceptó el cargo. "Soy un subordinado del poder político y tenía que ir a donde me mandara el poder político", dijo. Asumió el 2 de enero de 2008. Y tuvo que hacer "un curso acelerado" para enterarse del pasado de "algunas personas", que no mencionó. Fue allí cuando llamó al ex ministro Corti "ministro Rossi".

El interrogatorio del fiscal metió tensión en la audiencia. Tognoli se ajustó a su libreto y al lugar del que no sabe o nadie le avisó. Eso sí, reveló que el área a su cargo "no tenía reglamento" desde que Drogas Peligrosas se había transformado en la Dirección de Prevención y Control de Adicciones, en 2006.

--¿Existía contrainteligencia? --preguntó Suárez Faisal

--No había reglamento.

--¿Un protocolo de seguridad para testigos en riesgo?

--No existía esa dependencia.

--¿Labor de inteligencia interna?

--No.

El fiscal indagó varias veces sobre la relación de Tognoli con sus subordinados, porque éste también insistió en desligarse, aunque en algún momento mencionó la "responsabilidad funcional", que "es administrativa y no judicial", aclaró. Suárez Faisal quería saber si Tognoli comandaba las investigaciones. "¿Y usted qué hacía?", le preguntó.

--Yo era el encargado de la parte política --respondió Tognoli

--¿La parte política?

--Sí, iba al Ministerio de Seguridad, me reunía con el jefe de Policía de la provincia.

Tognoli se despegó de Baella y dijo que se recién se enteró de la investigación a Mendoza cuando uno de los jefes le comentó que la habían judicializado. Uno de los períodos del supuesto encubrimiento es del 3 de marzo al 25 de agosto de 2011. Y el segundo hecho, el 3 de marzo de 2012, cuando dos investigadores de Asuntos Internos vieron a Baella subir a Mendoza a un auto de Drogas Peligrosas, en Colastiné Norte. "Mendoza no era Escobar Gaviria. Era un pelele", sorprendió el ex jefe de Policía, quien se quejó porque lo investigaron a Baella y a él y no a quienes pidieron el cierre de la causa contra Mendoza por la presunta falta de pruebas. "¿Yo soy el único culpable?", se preguntó.

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