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La Cámara de Diputados provincial dio media sanción al proyecto que apunta a instaurar con fuerza de ley el protocolo a seguir por profesionales de la salud que se encuentran ante el pedido de realizar un aborto no punible en los casos contemplados por el derecho penal.
La iniciativa fue presentada en conjunto por las diputadas Mariana Robustelli (Frente para la Victoria), Alicia Gutiérrez (SI) y Griselda Tessio (UCR), y mereció la aprobación por mayoría. Ahora queda a consideración del Senado, junto con el proyecto aprobado por Diputados la semana pasada que promueve la creación del Registro de Objetores de Conciencia. La Legislatura pretende con ambas propuestas consolidar con leyes dos marcos jurídicos que en la actualidad Santa Fe adhiere por decreto del Ejecutivo y su consecuente resolución ministerial.
La "Guía técnica para atención de abortos no punibles" precisa la forma en la que se debe manejar un profesional de la medicina ante la solicitud de una paciente o de su grupo familiar de practicar un aborto si en las circunstancias del embarazo hay una violación o si la vida de la mujer corre peligro. Así lo contempla la ley.
"Establece para el personal de un centro médico cómo atender esos casos, qué método utilizar, deja en claro que no está obligado a hacer la denuncia penal, que se debe respetar la voluntad de la paciente y no obligarla a denunciar la violación si se trata de una situación así", resumió la diputada Gutiérrez, una de las firmantes del proyecto.
De aprobarse, el personal del servicio de salud estará obligado a cumplir con el protocolo, y los jefes, a hacerlo cumplir, a excepción de quienes se registren como "objetores de conciencia". Quien no lo haga, estaría infringiendo la ley.
Durante el debate en la sesión de ayer, Héctor Acuña, diputado justicialista alineado al PRO, avisó de su voto en contra de la iniciativa para "no convalidar el festival de abortos que está ocurriendo en la provincia". Y aventuró que este año se habían realizado 400 abortos en efectores en el Hospital Protomédico de la ciudad de Recreo. Enseguida tuvo que rectificarse porque Gutiérrez le demostró que esa cifra era errónea, que en lo que va del año allí se realizaron 30 interrupciones de embarazo no punibles, derivadas desde otros hospitales de la provincia.
"Ha sido muy positivo haber logrado la unidad en este tema entre el Frente Progresista y el Frente para la Victoria, trabajando en conjunto por los derechos a la salud sexual y reproductiva de las mujeres", concluyó la legisladora.
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