Una empresa criminal azul y blanca

El juez federal Marcelo Bailaque elevó a juicio oral la causa en la que el ex jefe de la policía santafesina Hugo Tognoli, está imputado como miembro de una empresa criminal conjunta, junto a Carlos Ascaini y dos de sus subalternos del sur santafesino, junto a quienes le brindaban protección a la banda narco del sur. El ex jefe antinarcóticos de Hermes Binner, cumplirá tres años de detención sin sentencia en febrero próximo, y se espera que el juicio comience para entonces. Hace solo un mes el Tribunal Oral Federal de Santa Fe condenó a Tognoli a seis años de prisión por los delitos de encubrimiento de narcotraficantes triplemente agravado, coacciones e incumplimiento de los deberes de funcionario público. En el mismo fallo que condenó a Hugo Tognoli a la pena de 6 años de prisión también se condenó a 5 años al exsubjefe de Inteligencia de la División Drogas Peligrosas santafesina, José Luis Baella; a 6 años y medio a su superior Daniel "Tuerto" Mendoza; y 4 años al remisero Fernando Torres, por transportar drogas con fines de comercialización.

Hugo Damián Tognoli, 52 años está imputado "haberle informado a Carlos Andrés Ascaini, investigado por comercio de estupefacientes dentro de la causa Miguens, Mauro y otros s/ ley 23737", que la camioneta Isuzu blanca dominio DSI 951 que lo seguía correspondía a la Policía de Seguridad Aeroportuaria, que lo investigaba en relación a su presunta actividad delictiva. Esta conducta la habría realizado "como contraprestación de pagos que recibiría de Ascaíni, y habiendo realizado una consulta a la Dirección Nacional de Registros de la Propiedad Automotor con fecha 25 de noviembre de 2009 desde el código de usuario habilitado segu21083 cuya asignación le corresponde". Para la justicia esta información motivó la frustración de la investigación llevada a cabo por dicha fuerza de seguridad, colaborando de ese modo en la impunidad y continuidad de la actividad delictiva del imputado Ascaíni e incumpliendo de esa manera los deberes que como Oficial de Policía de la Provincia de Santa Fe le competían en la persecución de tales conductas.

En rigor en su ampliación de indagatoria a Tognoli se le imputó: "Haber desarrollado con Andrés Ascaíni, Néstor Juan Fernández y Carlos Alberto Quintana una empresa criminal conjunta para el comercio de estupefacientes que Ascaíni llevaba a cabo. El rol de Tognoli era la protección del normal desarrollo de dicha actividad ilícita, logrando evitar que fuera frustrada tanto por la fuerza policial que tenía a cargo -específicamente avocada a la prevención y represión de dicho delito-, como por otras fuerzas policiales que eran puestas en evidencia de Ascaíni.

Para la justicia en ese rol de protector, Tognoli "convalidó como responsable las consultas efectuadas por sus subalternos Fernández y Quintana al sistema de consultas del Registro Nacional de Propiedad Automotor y Crédito Prendario desde el segu y clave que previamente le había suministrado al primero, a fin de informarle a Ascaíni que los vehículos que lo estaban siguiendo pertenecían a la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Esto le permitió a Ascaini evadir la investigación y la acción de la justicia para continuar con el tráfico de estupefacientes con cuyas ganancias se beneficiaban", reza textualmente el escrito de elevación a juicio.

Tal hecho es calificado en el delito previsto en el artículo 5 inc. c) y 11 inc. c) y d) de la ley 23.737 (tráfico de estupefacientes en la modalidad de comercio, doblemente agravado por haberse cometido con la concurrencia de tres o más personas organizadas a tal fin y por su condición de funcionario policial) en calidad de coautor.

Otro de los que llegan este juicio es Carlos Andres Ascaíni, de 40 años oriundo de Villa Cañas: llega imputado por "traficar con estupefacientes, concretamente, tener con fines de comercialización, aproximadamente 1168 gramos de cocaína secuestrada en el interior de la guantera del automóvil Audi A4 dominio JKX 323". Luego se le secuestró en su domicilio una prensa de hierro de 15 toneladas, una balanza electrónica marca systel y dos tubos de hierro con pistón, que estarían dirigidas a prensar la droga.

También será enjuiciado Aldo Cesar "Totola" Orozco, de 35 años, oriundo de Firmat, quien se le imputó: "Tener con fines de comercialización y en forma organizada junto a Carlos Andrés Ascaini, y otros".

En cuanto a los subalternos de Tognoli figuran Carlos Alfredo Quintana, de 45 años, oriundo de Elortondo, llega imputado de "haberle informado a Ascaini, que la camioneta Isuzu blanca dominio DSI 951 y el vehículo dominio CCM653, lo seguían en el marco de una investigación sobre comercio de estupefacientes que se encontraba en curso y que lo tenía al nombrado como principal implicado. El policía le informó a Ascaini que pertenecían a la Policía de Seguridad Aeroportuaria. También hubo dos consultas en relación al dominio CCM653 en fechas 9/04/10 y 14/04/10 utilizando el código de usuario que le fue asignado a la fecha de los hechos en que se desempeñaba como Jefe de la Brigada Operativa Departamental VIII de la D.G.P.C.A. Esta información motivó la frustración de la investigación llevada a cabo por dicha fuerza de seguridad, colaborando de ese modo en la impunidad y continuidad de la actividad delictiva del imputado Ascaini e incumpliendo de esa manera los deberes que como Oficial de Policía de la Provincia de Santa Fe le competían en la persecución de tales conductas".

Con más jerarquía que el anterior, llega al juicio Néstor Juan Fernandez, 43 años nacido en Vera, quien el 25 de noviembre de 2009 consultó el dominio DSI951 y dos consultas en relación al dominio CCM653 en fechas 9/04/10 y 14/04/10 utilizando el código de usuario habilitado segu210183 que le fue asignado a la fecha de los hechos en que se desempeñaba como Jefe de la Brigada Operativa Departamental VIII de la Dirección General de Prevención Contra las Adicciones.

En tanto otro de los encartados es Oscar Alberto Ledesma, de 54 años en Hughes se le imputó : "haber omitido en fecha 21/11/11, mientras se desempeñaba en la U.R. VIII de General López como Funcionario Público perteneciente a la Policía de la Provincia de Santa Fe, denunciar ante la autoridad competente su conocimiento acerca de las personas que llevaban a cabo actividades de narcotráfico en Firmat -a saber, Aldo César Orozco, alias "Totola" y Franco Arias, alias "El Venadito"-, y en Villa Cañás -a saber, Ascaíni- y que los de Firmat -Orozco y Arias- "arreglaban" con los de drogas de Venado y con la Policía Federal a "6000 por mes cada uno", y el de Villa Cañás "30000 directo con Tognoli", circunstancias que puso en conocimiento de la llamada "Nilda" por medio de los mensajes de texto remitidos al celular de Nilda Liberata Luques.

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