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Las indagatorias por la catástrofe del río Salado complicaron la situación de los cinco ex funcionarios de Carlos Reutemann que desfilaron esta semana por Tribunales: el ex ministro de Obras Públicas, Edgardo Berli; el ex secretario del área, Carlos Gómez Galissier; el ex administrador de Vialidad, José D'Ambrosio; el ex director de Hidráulica, Ricardo Fratti y ayer, el ex director de Defensa Civil, Carlos Filomena. Las preguntas del magistrado permiten deducir también una de las líneas de la investigación: ¿El gobierno de Reutemann sabía que se avecinaba una catástrofe? Los funcionarios utilizaron esa categoría para definir la crisis. Y si lo sabían, ¿por qué no alertó a la población y ordenó evacuar los barrios del oeste que después quedaron bajo agua? Ya en noviembre del 2003, el juez incautó una prueba clave: tres actas del comité de Emergencia Hídrica que operaba en la crisis. Lo integraban los funcionarios de Reutemann, entre ellos los cinco que imputados en la causa.
En el acta Nº 28 del 25 de abril de 2003 -cuatro días antes de que un tercio de la ciudad de Santa Fe quedara bajo el agua, Fratti advirtió que "la situación podría considerarse muy grave" y dijo que se avecinaba una "catástrofe". El aviso quedó plasmado en el documento que firmaron todos. "No descarto que concluidos los estudios de las zonas afectadas, éstas presenten un estado de catástrofe", afirmó el ex director de Hidráulica.
¿Por qué razón no se difundió el cuadro planteado? -fue una de las preguntas que el doctor De la Torre planteó en las indagatorias de esta semana.
Porque no era función del Comité dar una alerta ni difundirla a la población -le contestó Gómez Galissier, quien presidía el organismo, según informó el diario El Litoral. En esa reunión del 25 de abril también participaron Berli, D'Ambrosio y Filomena, quienes -supuestamente escucharon el aviso de Fratti.
El juez quiso saber entonces si Reutemann conocía el contenido del acta 28. Gómez Galissier le contestó que no era él quien tenía uno "contacto directo" con el ex gobernador, sino su jefe inmediato, el ex ministro Berli. El acta siguiente -la Nº 29- que se firmó el 28 de abril también pone en boca de Berli la misma noticia infausta que anunció Fratti, tres días antes. "El ingeniero Berli expresa que en virtud de la situación de catástrofe que, como consecuencia de la altura del agua, viene soportando la ciudad de Santa Fe, el accionar del Comité de Emergencia Hídrica está centrado en dar respuesta inmediata y asistencia a la comunidad de las zonas afectadas". El acta Nº 30 es más que reveladora. El Comité de Emergencia Hídrica estima que la cantidad de damnificados "podría ascender a más de 100.000 personas".
Ayer, el ex director de Defensa Civil tuvo que responder los mismos interrogantes que se plantearon a Berli y Gómez Galissier. ¿Por qué no se alertó a la población de Santa Fe que se avecinaba una catástrofe? "La audiencia comenzó poco antes de las 13 y duró alrededor de una hora y media. El imputado respondió a algo más de 40 preguntas", se informó oficialmente.
Filomena ya había declarado dos veces como testigo en la causa: el 9 de octubre y el 11 de noviembre de 2003, cuando se presentó en forma espontánea para ampliar su primera declaración. En la segunda audiencia, el juez De la Torre le preguntó si podía decirle quién estimó aquella mañana del 29 de abril de 2003 la cantidad de damnificados por la catástrofe: más de 100.000 personas.
Sinceramente, yo no recuerdo que se hablara de esa cifra, si no me hubiera llamado la atención. Puede ser cierto que lo hubieran dicho -respondió Filomena al juez.
El acta Nº 30 no admite dudas: "En virtud del incontrolable avance de las aguas que inundan grandes barrios (...) se hace necesario resolver en forma inmediata y urgente gestiones de provisión y compras que permitan asistir a los afectados, damnificados, evacuados y autoevacuados que se estima podrían ascender a más de 100.000 personas".
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