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Los números que veía con orgullo Diego Osella sobre Newell's ya no tienen ningún valor. La Lepra empató siete partidos con su entrenador y una nueva derrota dan vuelta el balance sobre lo sucedido con el equipo en el torneo. Newell's, definitivamente, es un equipo que no sabe ganar y cuando la responsabilidad le cae encima se ven todos sus problemas. Como ayer ante Defensa y Justicia, rival que tuvo disciplina táctica, esfuerzos compartidos en defensa y buenos pases en toda la cancha. Ante eso el rojinegro claudicó en un partido en el cual la visita marcó el gol a los cuatro minutos.
A Osella ya no le dan ni los números en Newell's para sostener alguna reflexión positiva sobre su equipo. La derrota de ayer vuelca las estadísticas: es más lo que perdió que lo que ganó, a pesar de que casi todos los partidos los empató. Conclusión: el Newell's de Osella es más de lo mismo.
La diferencia es que la propuesta de juego no se ajusta a las pretensiones del club. Newell's es un equipo armado para defender sin tener que asumir obligaciones ofensivas. Como ante Estudiantes, donde con esa receta "el punto suma".
Cuando el compromiso por ganar es ineludible, como ayer ante Defensa y Justicia, el equipo luce anémico de ideas, desorientado en ataque y con un desorden que expone a Maxi Rodríguez y Formica a jugar en su campo para llegar a la pelota.
Defensa y Justicia se impuso en todos los aspectos del juego y pudo haber goleado. En su primer avance, Rius recibió solo en el área, se acomodó y remató de derecha, en pelota que rechazó Porcnjic. Pero el balón volvió al área lanzado por Isnaldo y el que surgió sin marca, casi en la misma posición de Rius, fue Tomás Martínez para marcar el primero con derechazo bajo. Arrodillado, Porcnjic le pedía explicaciones a todos sus compañeros.
La defensa de Newell's ocupaba espacios y no prestaba atención a los rivales. Y de esto sacará provecho la visita cuando la Lepra desespere, allá en el segundo tiempo. Porque la primera parte se fue sin acción clara de riesgo a favor de los rojinegros, con Boyé intrascendente en sus gambetas y topetazos, y Formica sin aliados en sus intentos.
Newell's no podía asociar pases. Si no se iba larga, el balón le rebotaba al receptor o llegaba a un jugador marcado. Scocco salió a jugar el complemento y el equipo se descompensó definitivamente.
Porcnjic le cometió una infracción a Bordagaray en el área pero Pitana no marcó penal, Barboza estrelló un cabezazo en el palo, luego remató alto y en la siguiente ganó de nuevo por arriba pero atrapó el arquero, siendo figura en las áreas.
Ingresó Torres, luego Tévez, pero en la Lepra no entendía qué podía hacer con la pelota ni para qué le servía. Pitana no marcó un penal en mano de Rius, por lo cual recién en el último minuto hubo un remate al arco por un tiro libre de Maxi Rodríguez que desvió Arias.
Newell's volvió a perder y ya está entre los peores del torneo, por más que falten dos fechas.
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