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Miércoles, 20 de febrero de 2013
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Anuario literario, un verdadero semillero de las letras rosarinas

Forjando el oficio de escribir

La nueva publicación colectiva del taller de Marcelo Scalona merece la atención. Escritores y escritoras diversos, muchos de ellos premiados. El deseo de escribir y la necesaria práctica del oficio. ¿Cómo se enseña a escribir?

Por Beatriz Vignoli
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Los talleres literarios varían siempre según sus niveles y también por sus producciones.

Una mesa de cuatro personas en el subsuelo de un bar no casualmente llamado Faulkner (que antes había sido una casa de venta de láminas de arte) fue a comienzos de este siglo la piedra fundacional de "marce nomalumbré", el taller literario de Marcelo Scalona, un grupo muy productivo que ha comenzado el 2013 editando una nueva publicación colectiva antológica, del año 2012. La novedad este año es que la publicación, que reúne cuentos y poemas de 56 autores, fue diseñada por dos de ellos. Hay que prestar especial atención crítica a este semillero rosarino de escritores y escritoras, noveles o ya no tanto, muchos de quienes ya tienen obra publicada o incluso premiada. Ariel Zappa colabora en la contratapa de Rosario/12; Eugenia Arpesella escribe en Redacción Rosario; Natalia Massei y Carolina Musa han participado en importantes antologías; Musa y Martín Kaissa no sólo han editado sus propios libros (Musa, en el sello Tropofonía; Kaissa, por su cuenta) sino que han puesto su experiencia en diseño y autoedición al servicio de la calidez particular que tiene este nuevo anuario. Patricio Magnano también se le animó a la autoedición (con el seudónimo de Cartu) y tiene inédito un notable libro de cuentos.

Además, casi todos participan en lecturas y presentaciones, no solamente las del taller. Sus trabajos se pueden leer en http://www.nuestrotaller.com.ar, el sitio web que administran todos los participantes activos, lo mismo que el blog del taller, http://nuestrotaller.zoomblog.com. De marzo a noviembre, en encuentros semanales en la casona de calle Laprida, Scalona propone un recorrido de cuatro años por el discurso, el cuento, la novela y la dramaturgia y el guión, orientando hacia la producción de textos y leyendo "desde la antigüedad y las tradiciones clásicas hasta la actualidad con todas sus vanguardias y corrientes experimentales sean universales, extranjeras, nacionales, regionales o rosarinas", señala.

"Nosotros partimos de la premisa de que escribir es un oficio", sostiene Scalona, él mismo un escritor de extensa y destacada trayectoria, para quien "cualquier persona con instrucción básica que tenga esa vocación o deseo" puede adquirir el oficio de escribir.

"Claro que, como en todo, a los deseos hay que sostenerlos cotidianamente frente a todos los ataques o escollos de la cotidiana alienación o vorágine diaria", aclara el docente. Y de esto habla el cuento de Virginia Bachmann, "De la imposibilidad de abandonar una historia": un cuento acerca del intento de escribir otro cuento, casi un género por derecho propio, al que pertenece también "Historia se busca", de Mariana Sánchez. Los títulos son más que elocuentes.

Zappa, Musa, Massei, Magnano, Alejandra Rodenas y Belén Irusta exploran el relato fragmentario; Ramiro González, la minificción, Soledad Plasenzotti, la prosa poética lírica. Lo autobiográfico prevalece. Se hace explícito en Alfredo Cherara, Gabriel Caciorgna, Guillermo Guido Matías Magliano y el propio Scalona; se deja sospechar en un relato en tercera persona por Mario Jrapko y en la primera persona del singular de los relatos de Damián Fornaso, Elida Rivoira, Estanislao Porta, Gabriela Gervasoni ("En pausa"), Mayra Medina, Mónica González y en un notable relato de infancia de Arpesella, tal vez la única de todo el grupo que logra crear un punto de vista autoral efectivo, incontaminado, por encima de los personajes.

Otra revelación es Lucas Almada, con "El penal de mi vida", un relato coloquial que construye y sostiene un suspenso de tensión extrema a partir de una anécdota en la vida de un deportista amateur. Otras dos son Lucía Andreozzi, con un cuento intimista, y Cecilia Mohni, quien en su cuento "Osamenta" logra que el lector se deslice inadvertidamente desde la estampa costumbrista hasta el ensayo antropológico, entre el humor y la poesía de bajo perfil. Maximiliano Rendo y Carla Caterina sorprenden desde el realismo fantástico. Valentín Gilardoni conmueve con una historia de amor en prosa poética; Gervasoni y Silvia Estévez, con sendos cuentos desde un punto de vista infantil cercano. El horror de la historia reciente se desliza subrepticiamente en "El perfume del jazmín", de Germán Hansel y el de la crónica roja en "La quebrada del lobo", de María Eugenia Laboranti.

La sátira (tomando como blanco a mujeres de edad diferente a la de cada autora) es lo que eligen dos escritoras, Silvina Potenza y Josefina Antoni; esta última parece nutrir su ya filoso trazo en el veneno del chisme para retratar con patetismo grotesco a una mujer enamorada y despechada. En este tema, la saña de los muchachos no se queda atrás: véase el varón abandonado en "Se despeñó", de Nicolás Foppiani. La guerra de los sexos campea en un buen cuento hemingwaiano de Roberto Sánchez. La crueldad misógina de dos mujeres entre sí es el tema en "Probador", de Claudia Malkovic, quien equilibra ambos puntos de vista en una sátira tan realista que si no está basada en hechos reales merecería estarlo. De impiedades aún peores de la calle trata el cuento naturalista de Ailén Gagliano. Desde el naturalismo, o el realismo social, parte Martín Momo para bosquejar una diatriba política de actualidad. Se aventuran más allá de lo tradicional, en sus textos experimentales, Lucía Briguet, Marcela González García, Marisol Baltare, Matías Settimo y Zulma Villalba. El intertexto y la cita son constantes en todo el libro, tanto con la alta literatura como con la canción popular. El libro incluye poemas líricos confesionales por Alina Taborda, Analía Lardone, Andrea Parnisari, Cintia Sartorio, Marta Mirande, Susana Paganini y Germán Caporalini. Se perfila Pablo Mengascini como un poeta que domina la concisión.

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