"Una cosa que me gusta mucho es sentarme frente al equipo a escuchar todo tipo de música. Esa actitud de escucha es la que espero ante este disco, una escucha contemplativa", dice Guillermo Rizzotto al momento de hablar de su flamante Sólo guitarra, el material publicado por la Editorial Municipal de Rosario a partir de su condición de ganador del concurso de coproducciones. Y, de hecho, lo que Rizzotto disfruta de obras ajenas lo ha impregnado en su debut, se que lo encuentra en soledad, lo que genera un clima de atrapante intimidad. Elogiado por Juan Falú en las cálidas palabras introductorias de la placa, el trabajo del joven guitarrista se presenta este sábado 23 en el Centro Cultural Parque España, en un concierto que incluir además la actuación de Enrique Gule, quien hará lo propio con su obra "Tal vez no tenga fin" (ver recuadro).
Por su parte, Rizzotto abordará un listado de temas que, detalla, "en su mayorÃa son tranquilos". Sin embargo, a lo largo de su diálogo con Rosario/12 el músico dejar en claro que esa tranquilidad lejos está de la displicencia: "Por ahà la energÃa pasa por otro lado", asumirá el músico, para de inmediato remarcar que, ya desde su concepción, las composiciones jamás se vieron sujetas a premeditaciones: "Nunca hay nada especulativo en el medio. De hecho hay muchos temas del disco, como `Chaya sola`, que tienen improvisaciones que ni siquiera se pensaron antes de entrar al estudio. A lo mejor estaba el tema compuesto con una forma general, pero mi idea era entrar al estudio y que saliera. Inclusive hablando con otros colegas amigos me decÃan que por ahà se diferencia de mucha música que todos escuchamos, donde se nota que si bien el músico está sintiendo lo que toca, está tocando para la grabación".
Con la intención de evitar esa autolimitación, Rizzotto contó con la complicidad del técnico de grabación Juan De Toma, de El Graboratorio. "Muchas veces la situación de la grabación te incomoda un poco, más cuando te encontrás solo en una habitación. Pero lo bueno es que con Juan somos muy amigos –confesó-. Eso le daba mucha naturalidad, porque yo podÃa pedirle que largara a grabar y que, si querÃa, se fuera a tomar algo a la habitación de al lado. Entones podÃa grabar un rato y después elegir la toma. Era como si hubiera estado tocando en mi pieza. Eso podÃa ayudar a lograr esa cosa intimista que querÃa en el disco".
Mientras tanto, y si bien el propio creador destaca en el booklet que se trata de la reunión de diez años de trabajo como autor, los temas que componen "Sólo guitarra" representan un perÃodo cercano en la labor compositiva de un músico cuya faceta pública está más ligada a su rol como miembro o lÃder de diversas agrupaciones. "Yo venÃa tocando muchos temas, de hecho temas que tocaba con el trÃo en su origen los habÃa hecho para guitarra sola, y que pensaba grabarlos en algún momento. Sin embargo cuando surgió lo del disco yo estaba con muchos temas frescos, como `Frida`, que lo compuse después de viajar a México, porque volvà muy tocado por su vida y su arte. O temas como `RÃo solo` o `Permaneces en mÃ`, que eran muy recientes. A lo mejor uno podrÃa elegir lo que venÃa haciendo hasta ese momento y dejar los temas nuevos para después, pero me encontraba con esos temas y otros más viejos quedaron afuera. De hecho quizás el tema más viejo del disco sea `Carnavalito`, que tiene dos o tres años", precisó.
Aunque esa cercanÃa temporal entre cada obra no las unifica en función de su contenido estilÃstico, y en "Sólo guitarra" conviven distintos géneros folclóricos, más algunas dosis de tango y canción. Al respecto, Rizzotto apuntó: "La diversidad fue natural. Sà en un momento me resultó curioso, porque me encontré, con esa realidad, que en un disco de guitarra sola, y estando muchos de los ritmos, no haya chacareras, por ejemplo. Pero de última me gustó la idea, entonces hice más hincapié, en meter más piezas litoraleñas, o mucho de música del noroeste, algo que me gusta mucho, como el carnavalito o el huayno. En realidad son los ritmos en los que mejor que hallo".
Con todo ello, el guitarrista fue determinante cuando apuntó: "Pensé mucho al respecto y no me animo a decir que es un disco de folclore, porque son todos `aires de...`, ninguna forma es tradicional, los giros melódicos la mayorÃa de las veces no son tradicionales. Es como que están basadas sobre ritmos folclóricos. Después otra cosa que analizo es que yo siempre escuché, mucha música de cantantes, me gusta muchÃsimo Spinetta por ejemplo, entonces por momentos me doy cuenta de que la manera de tratar mi música instrumental es la manera de un músico popular en el sentido de un tipo que hace canciones. Porque si bien están escritas no dirÃa que son piezas para guitarra, sino que son canciones. Eso puede llegar a marcar una diferencia con lo que es un disco de guitarra clásica, porque es otro pensamiento, no es el de un guitarrista clásico que se sienta a interpretar las obras. Aunque tampoco es un disco de una banda, está en un punto medio y pienso que eso puede llegar a generar una espontaneidad en la recepción. Y en eso tiene que ver desde cómo se grabó y hasta esta cuestión de que los temas no están concebidos como piezas de guitarra".
Por último, Rizzotto analizó la calificación que muchos de sus pares realizaron en torno a una placa que consideraron jugada, lo que de hecho no facilitarÃa su aceptación desde un punto de vista meramente comercial. "Eso es porque es un primer disco con solo guitarra, cuando ahora los discos están llenos de cosas, donde todo es súper fuerte. En ese sentido siempre me sostengo de lo que dice en el disco, la cuestión de la honestidad. Cualquier música, si viene bien de adentro, a lo mejor puede tardar un poco más, pero es contundente igual, porque es una verdad. No puede pasar desapercibido algo que está hecho de esa manera", concluyó el artista.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.