La sala está en un primer piso y se accede a ella después de dar un par de vueltas. Como hemos llegado tarde, no nos sentamos en las sillas que están dispuestas en la sala sino en una especie de chaise longue colorada que se mimetiza con la pasión de las poesÃas aún no descubiertas. Ya están hablando Allison Hedge Coke y Humberto Akábal, a quienes hemos venido a escuchar, y al cabo de la disertación, vendrá la entrevista. Ella, de la nación cherokee de Estados Unidos, él, de etnia maya K'iche, de Guatemala. El host Rodolfo Hachén introduce el tema del bilingüismo, Allison lee el extenso poema "Residence in motion". Con ritmo de palabras como cortadas, en el que las alusiones a la naturaleza y la fe son recurrentes, Allison transmite la idea de que es la tierra la que dicta el idioma. Al verle la piel realmente roja que se divisa entre las cabezas del público, se siente, en la cadencia de su discurso, un leve susurro de rÃo en primavera.
Festival de PoesÃa de por medio, la transculturalidad transcurre armoniosamente: en Rosario, poetas de diferentes paÃses y etnias leen poesÃas a un público no masivo que tiene sed de palabra oralizada más que impresa en un papel, aunque a fuerza de ser sinceros, sorprende esto en una provincia gobernada por quienes tienen por plataforma polÃtica nacional terminar con la humillación de los militares.
Humberto recita con un orgullo solemne, que puede leerse en su voz. En su cultura maya K'iche explica el poeta se definen los puntos cardinales por colores; el rojo es el Este, el negro el Oeste, el blanco el Norte, el amarillo el Sur y el quinto es el verde: nosotros. "Todo verde se vuelve azul, la distancia es lo que transforma", aclara Ak┤Abal, quien concluida la lectura de un bello poema de sonidos eufónicos agrega: "Mi abuelo me enseñó a leer el canto de los pájaros, a descifrar los fenómenos fÃsicos". No podemos evitar copiar en el cuaderno una frase que se escapa de sus labios: "No es que las piedras sean mudas, solo guardan silencio". No es la armonÃa de los griegos, ni es el lamento de los derrotados: es la fuerza de lo original lo que surge en la vehemencia de esta poesÃa.
Más tarde y en otra sala, tratando de deducir el lugar desde donde escribe, Allison, profesora de poesÃa y escritura en la Universidad de Nebraska enumera sus temas: la naturaleza, la fe, la religión. Y prosigue: los campesinos, el medio ambiente, la historia (no la que pasó, la que sigue viva). En cuanto a su público, la poeta de cabello larguÃsimo y muy fino escribe cuentos y trabaja para niños. "El lÃmite entre los géneros sostiene es algo que ellos pueden manipular". Escribe ficción, prosa, guiones de pelÃcula. Asegura que una buena prosa tiene valor poético, aunque para ella la poesÃa es como respirar: siempre está ahÃ. Allison quiere asegurarse que otras voces puedan ser escuchadas desde el interior de su comunidad. "El inglés dice Allison es un idioma que da miedo, los idiomas se usan para validar o invalidar los pensamientos de la gente".
De los dÃas estos en que la tecnologÃa permite manipular grandes volúmenes de información sin importar la fuente, el objeto o la intencionalidad no habla del todo bien. Cuando habla, sin embargo, hace un pequeño gesto con la cabeza que vuelca sus cabellos largos lacios en la misma dirección que la pigmentación de su rostro.
En el suceder del Festival Internacional de PoesÃa, se los verá tanto a Humberto como a Allison nadar, como peces en el agua, entre cardúmenes de especies: exóticas, vulgares, raras... ¿Es el suceder de los poemas que leen lo que nos trae una especie de rumor de aves? ¿Es la charla con el público lo que nos devuelve a cierto paisaje original, a cierta tranquilidad? ¿Es el gesto de los invitados lo que nos germina una rebeldÃa suave?
Estas y otras preguntas discurren mientras volvemos a repantigarnos en el canapé colorado, en un descanso de verso libre.
En los dÃas sucesivos, el Festival, quinceañero, como niña bonita intentará otros maquillajes para seducir a nuevas vÃctimas. No se concientizará aún, de una realidad poética tan ajena al marketing: Los poetas vivimos en planetas alternativos mientras el resto de los mortales restan a merced de bancos y empresas.... ¿Es esta una opción o un destino?
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.