Comisión
El más humilde militante polÃtico sabe que el propio Perón decÃa que para que no se resuelva algo, lo mejor era crear una comisión para que lo estudie.
El veterano lÃder peronista querÃa significar asà que el peso de una excesiva burocracia plancha toda iniciativa y es precisamente eso lo sucedido con las "instrucciones" dadas a la ministra de Salud Graciela Ocaña por la señora Presidenta con respecto a las fumigaciones con agroquÃmicos, muy especialmente sobre plantaciones de soja, maÃz y girasol.
Se han expedido tantas organizaciones, centros de investigaciones, médicos especialistas, autoridades sanitarias de sinnúmero de ciudades, asambleas de pobladores, etc., que la documentación obrante en este tema hace innecesario evaluar los daños inferidos a los pobladores, a la propia tierra, a los cursos de agua, la fauna y flora y amerita la toma de decisiones polÃticas urgentes.
Es de tal magnitud el daño, son tan evidentes y comprobados los perjuicios ocasionados a la salud y tan irreversibles muchos de los problemas que sufren decenas de miles de contaminados niños, adultos, mujeres y ancianos que el costo de atención se multiplica cotidianamente y los resultados son casi imperceptibles dada la magnitud del fenómeno contaminante.
A los casos de los banderilleros rociados con glifosato, hay que sumarles las declaraciones de pobladores que denuncian la fumigación sobre sus casas junto a la muerte de peces en los arroyos cercanos, los detectados casos de cáncer de piel, malformaciones de fetos y complicaciones de embarazos. Pero esta enumeración sólo agregar páginas a las ya existentes y profusas biografÃas de los agroquÃmicos y sus nocivos efectos sobre la salud de la población.
Mientras esto ocurre, importantes medios de comunicación callan en resguardo de los intereses de corruptos empresarios, funcionarios y dirigentes que miran al costado por que sus neuronas forman fila tras el dinero que producen coimas y comisiones.
Por miedo, desidia, comodidad, obediencia partidaria o la vieja polÃtica de "no sacar los pie del plato" , presidentes de comunas o intendentes, desatienden los todavÃa tibios reclamos de sus pobladores que ignoran que el origen de sus afecciones respiratorias constituyen los primeros sÃntomas de la intoxicación y el inicio de sus futuros problemas de salud.
Angel M. ContestÃ
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.