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A cuatro años del Diciembre Trágico, que dejó en Rosario y sus alrededores 8 muertos, más de tres mil rosarinos se movilizaron ayer por el centro de la ciudad para recordar a las víctimas de la represión y exigir el esclarecimiento de las causas penales estancadas. La nutrida movilización partió desde la plaza 25 de Mayo por calle Santa Fe y culminó en la plaza San Martín. Allí distintas organizaciones sociales, defensoras de los Derechos Humanos, grupos piqueteros y partidos políticos leyeron un duro comunicado en el cual denunciaron la impunidad reinante en la provincia que impide el juzgamiento de los responsables políticos de la tragedia. En ese sentido le endilgaron la responsabilidad al ex gobernador Carlos Reutemann y su secretario de Seguridad, Enrique Alvarez por haber ordenado a la policía "tirar a matar". Además cuestionaron a la Legislatura por no haber investigado y por haber ascendido a camarista Roberto Reyes, uno de los jueces que cajoneó la causa. Aunque de menor tenor, también hubo críticas hacia el accionar del gobernador Jorge Obeid y del presidente Néstor Kirchner.
La marcha de ayer fue por las mismas calles que hace cuatro años. Claro, no ya con la misma intensidad ni con los mismos reclamos de aquellas álgidas jornadas en las que cayó el gobierno de Fernando de la Rúa y la Argentina entró luego en una de sus peores crisis políticas, económicas y sociales de la historia contemporánea.
Ayer se escucharon críticas al accionar policial durante el 19 y 20 de diciembre de 2001 a instancias de la orden impartida desde el poder político. De inmediato el reclamo por el esclarecimiento de los asesinatos: ocurre que a la fecha hay un sólo agente policial condenado por la muerte de Claudio "Pocho" Lepratti.
La movilización partió desde la plaza 25 de Mayo encabezada por los familiares de las víctimas que portaban un afiche con los rostros y los nombres de los 8 asesinados de la región. Estaban también las Madres con sus pañuelos, los piqueteros, integrantes de los sindicatos, partidos políticos, organizaciones sociales y barriales.
Ante la falta de agentes de tránsito -que no trabajaron por la medida de fuerza- los propios participantes de la marcha se encargaron de desviar a los automovilistas que circulaban por el microcentro. Al llegar a la plaza San Martín se podían escuchar las estrofas de Pochormiga, la canción que León Gieco compuso en homenaje al militante del barrio Las Flores.
"A cuatro años del argentinazo, reinvindicamos la gesta de los trabajadores y el pueblo, honramos a nuestros mártires y seguimos exigiendo que termine la impunidad y que haya cárcel y castigo para todos los responsables directos y políticos de los crímenes contra el pueblo", decía el documento suscripto por los organizadores.
Luego se recordó que en diciembre del 2001 Santa Fe fue la provincia con mayor cantidad de víctimas fatales, heridos de gravedad y detenidos de todo el país. "De los nueve asesinados, la mayoría jóvenes, siete fueron asesinados por la policía con balas de plomo", apuntaron.
"Hubo un plan operacional único, coordinado por el gobierno nacional, con órdenes de reprimir con armamento letal impartidas por el entonces gobernador Reutemann y el secretario de Seguridad Pública, Enrique Alvarez. En Villa Gobernador Gálvez hubo dos víctimas con la complicidad del intendente (Pedro) González".
Criticaron la actuación del Poder Judicial santafesino que "desmembró las causas, empujó el desprocesamiento masivo de policías y funcionarios, el archivo y la paralización de las causas".
La última parte del documento lo leyó Celeste Lepratti, la hermana de Pocho quien nombró uno a uno a las víctimas fatales del Diciembre Trágico. El último fue su hermano. Ella se quebró, la multitud aplaudió.
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