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La ciudad volvió a estar pasada por agua ayer, tres días después del fuerte temporal que dejó un saldo de un muerto cuando un árbol cayó sobre la camioneta en la que estaba. Con la advertencia de un aviso de alerta temprana por "fenómenos intensos" para la región por parte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la lluvia cayó intensamente y anegó calles. Cinco líneas de media tensión de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) salieron de servicio, por lo que algunos barrios se quedaron sin energía eléctrica. Los vientos que no tuvieron la fuerza de los que se desarrollaron durante el domingo pasado, y por eso ayer los daños fueron menores que el domingo. "Salvo los anegamientos en algunos lugares, y unos pocos árboles caídos, pero sin mayores consecuencias", indicó ante la consulta de Rosario/12 el subsecretario de Protección Civil de la provincia, Marcos Escajadillo. Por su parte, el subsecretario de Prevención y Seguridad Ciudadana, Luis Baita, consideró que ante la tormenta "la ciudad respondió bien".
Unos minutos después del mediodía, el cielo se oscureció rápidamente y un aguacero inundó varias calles de la ciudad por las bocas de tormenta tapadas. Como ocurre habitualmente, en la zona de la Terminal de Omnibus el agua no escurrió y las calles se inundaron rápidamente. La situación se repitió en otros barrios de Rosario pero sin mayores consecuencias. La peor parte la sufrieron los vecinos de zona oeste, norte y sur, que se quedaron sin luz porque cinco líneas de media tensión salieron de servicio.
Como el alerta de aviso meteorológico a muy corto plazo del SMN "por ocurrencia de tormentas fuertes con ráfagas y ocasional caída de granizo" se renovó horas más tarde, Escajadillo pidió a la población que mantuviera las medidas de prevención y que en lo posible evitaran salir a la calle porque los fenómenos podían repetirse.
En este marco, el funcionario dijo que la gente "responde a las indicaciones y consejos de autoprotección. Hoy vemos que estos fenómenos en determinados momentos son muy extremos, que hacen necesario que tengamos que cumplir algunas pautas de prevención". A pesar que la zona comprendida por el aviso de alerta temprana abarcaba a otras ciudades del territorio provincial, Escajadillo dijo que no recibieron ninguna notificación en los teléfonos de emergencia de la repartición.
Por su parte, Baita sostuvo en declaraciones radiales que el temporal de ayer no había tenido la magnitud del domingo, "más teniendo en cuenta la cantidad de agua que cayó y el impacto del viento que fue la mitad. Igualmente, tuvimos algunos árboles caídos y anegamientos transitorios en algunas calles". Pese a los reclamos de los vecinos por las calles inundadas, el funcionario consideró que la ciudad "respondió bien, con varias cuadrillas municipales trabajando junto con Defensa Civil para tratar de resolver algunos problemas".
En tanto, la vocera de la EPE, Diana Antruejo, informó que las zonas afectadas por las líneas de media tensión que salieron de servicio por el temporal fueron Colombia y Pasco, Godoy y San Nicolás, Virasoro y Cafferata, Guerrero y Boedo, y Las Flores; aunque también reconoció que recibieron denuncias por cortes de baja tensión.
Según Antruejo, las cuadrillas de la EPE iban a trabajar "siempre y cuando el clima lo permita. En los problemas de media tensión, que es la prioridad, se va a trabajar hasta la normalización del servicio, que se supone será hasta última hora de hoy (por ayer). Se están poniendo todos los esfuerzos pero la mayoría son líneas aéreas lo que complica los trabajos".
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