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La Municipalidad envío ayer al Concejo Municipal el estudio de costos, en base a la nueva metodología aprobada por el cuerpo la semana pasada, para actualizar la tarifa de taxis y remises. En rigor, el estudio fue enviado con tres valores referenciales que prevén un incremento del 40 por ciento en agosto y otro 7 por ciento en noviembre. Los taxistas, quienes pretenden un aumento del 65 por ciento que les garantice el aumento salarial acordado con los titulares en paritarias, pero que aún no fue homologado por el Ministerio de Trabajo de la Nación, rechazaron el proyecto del Departamento Ejecutivo. El titular del sindicato de Peones, Horacio Boix, fue más allá al anunciar que el lunes llevarán un estudio de costos propio para que sea analizado por los concejales. Además, el dirigente gremial no descartó realizar nuevas medidas de fuerza si no se atienden sus reclamos (ver aparte). Desde la intendencia reiteraron que aplicarán sanciones a los taxistas que protagonizaron incidentes durante el paro de 18 horas que culminó ayer a las 6.
Los ediles que integran la comisión de Servicios Públicos recibieron ayer el proyecto del Departamento Ejecutivo con el estudio de costos que elaboraron en forma conjunta el Ente de la Movilidad de Rosario (EMR) y la Universidad Nacional de Rosario (UNR). La iniciativa ingresará formalmente hoy el recinto y se estima que el lunes los concejales comenzarán a debatir las tres propuestas incluidas en el mensaje.
En el primer cálculo de referencia, y según el acta acuerdo firmada entre titulares de licencia y el sindicato de Peones de Taxis para una recomposición salarial, el estudio incluye una bajada de bandera diurna de 8,15 pesos y una ficha de 0,41; mientras que para el horario nocturno, los valores serían de 9,29 y 0,46.
En el segundo valor de referencia, que incluye una remuneración mínima mensual para los choferes de 3.600 pesos a partir del 1° de agosto, la bajada de bandera en horario diurno es de 7,83 pesos y la ficha de 0,39; 8,92 y 0,45 durante la noche.
La tercera propuesta de costo, que toma un sueldo de 4.000 pesos para los choferes a partir del 1° de noviembre, da como resultado 8,25 pesos la bajada de bandera y 0,41 la ficha en horario diurno; 9,41 y 0,41 respectivamente en horario nocturno. Para los remises, en tanto, el estudio de costos propone una bajada de bandera de 12,70 pesos, 0,51 la ficha y 0,76 la espera.
Ante la consulta de Rosario/12, el titular de la comisión, Manuel Sciutto (PS), explicó que la tres propuestas de costos están relacionadas con el acuerdo salarial entre titulares y choferes. "Si bien aún no está homologado, no podíamos desconocer esta situación", resumió el edil socialista. De todos modos, Sciutto remarcó que en la nueva metodología el incremento a los choferes "tampoco incide de manera tan sustancial, es bastante compatible con los números".
Respecto al tratamiento del mensaje a partir del lunes en la comisión de Servicios Públicos, y la posibilidad de conseguir un rápido despacho, el titular del bloque socialista consideró que "difícilmente pueda haber consensos para valores que estén por encima de los propuestos; entiendo que hay una predisposición de la mayoría de los bloques para consensuar una modificación, pensando en algún escalonamiento como una de las alternativas".
Sciutto adelantó que se pondrán a consideración otros proyectos relacionados con los taxis como la tarjeta de contacto como medio de pago, y la obligatoriedad de GPS en todas las unidades. En este sentido, la concejala María Eugenia Schmuck (UCR), vicepresidenta de la comisión de Servicios Públicos, señaló que "hay que cumplir con la ordenanza vigente, no se puede otorgar aumentos hasta que todos los taxis tengan GPS, ya que ese dispositivo le permitirá a la Municipalidad controlar que el servicio se preste con las cantidad de autos necesarios en la calle".
Respecto a los incidentes protagonizados por un grupo de choferes durante el paro, el secretario de Servicios Públicos municipal, Pablo Seghezzo, indicó que están constatando las chapas patente de los vehículos que estuvieron ahí, y que también van a citar a los titulares de esos taxis para que brinden explicaciones. "No descartamos que pudiesen haber sido matones contratados", planteó el funcionario. "Están trabajando de oficio las comisarías 2ª, 6ª y 7ª y el juzgado Nº2. Creo que hay que extremar las medidas porque los hechos son absolutamente reprobables", abundó Seghezzo.
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