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Un joven rosarino fue a la Justicia contra una reconocida marca de cerveza, líder en el mercado, porque compró un envase que en su interior contenía un profiláctico cerrado. La presentación se realizó el viernes pasado en los Tribunales provinciales y será el Juzgado Civil y Comercial Nº 14 el encargado de resolver el conflicto que no llegó a acuerdo en la instancia de mediación pre-judicial que propone el Ministerio de Justicia provincial. Según indicó el abogado de Brian, Pablo Barceló, el muchacho de unos 30 años compró la bebida en un quiosco de zona sur, en 2010, pero nunca abrió el envase porque antes advirtió que había algo anormal adentro. Ante ello, convocó a un escribano para que constatara el suceso.
La anormal situación, según relató el abogado del joven, sucedió cuando el demandante concurrió con un familiar a un negocio de barrio, en la zona sur, a comprar una cerveza. Cuando volvió a su casa se sorprendió al querer abrir el envase porque advirtió que en su interior había un preservativo flotando en la bebida. "Puso la botella sobre la mesa y pudo advertir que en el interior se veía una sombra. Creyó que podía ser un juego de luces y sombras, pero cuando se acercó más observó claramente que era el envoltorio de un preservativo de una marca conocida a que identificó. El muchacho no abrió la botella e hizo las constataciones notariales y las denuncias", sostuvo el abogado sobre el conflicto que "pasó por mediación pre-judicial, pero después de dos audiencias con responsables de la marca no hubo resolución y con ese resultado se realizó ahora la presentación ante la Justicia".
La botella "nunca fue abierta" y el preservativo estaba dentro del sobre. "Hoy pasó tiempo y es difícil saber si esto es realmente así, porque el líquido disolvió en parte el producto".
La presentación realizada con patrocinio de Barceló es en reclamo de resarcimiento por daños y perjuicios. "Tiene que ver con la gravedad que significa no sólo para este consumidor, sino también para quienes accedieron a esa bebida elaborada por la misma cadena de producción", afirmó.
El abogado consideró que el error pudo haberse dado en el momento del llenado de la botella o antes, cuando se realizó la limpieza de la botella no retornable. "Tenemos dos hipótesis: una podría ser el sabotaje de algún empleado dentro de la misma empresa y la otra tiene que ver con un incorrecto lavado de los envases reutilizados. En los dos casos, la responsabilidad de la empresa sigue siendo la misma", advirtió el letrado.
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