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Martes, 4 de junio de 2013
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Estudiante universitaria imputada por consumo personal de marihuana

Reclaman cierre de la causa

La mujer investigada por la Justicia Federal padece endometriosis. El consumo de cannabis tiene que ver con esa dolencia. "Es un despropósito perseguir a una ciudadana que consume, se trata de una acción privada que no afecta a terceros", dijo su abogado.

Por Lorena Panzerini
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La Asociación Rosarina de Estudios Culturales (Arec) convocó a la protesta de ayer.

La defensa de una estudiante de Medicina -imputada por cultivar cannabis para consumo personal y medicinal- solicitó al juez federal Marcelo Bailaque el sobreseimiento de la joven. Ayer un grupo de personas se movilizó hasta los Tribunales para repudiar la apertura de la causa, que Rosario/12 publicó ayer, y reclamar "que los recursos se utilicen para luchar contra el narcotráfico". "Es un despropósito; un dispendio judicial y policial en perseguir a una ciudadana que consume, hay que ver qué les pasa a los jueces para no ver esto", señaló Lucas Altare, abogado de la mujer a la que le falta una materia para recibirse como médica en la UNR; aunque si la causa continúa no podrá matricularse. Además, desde la Asociación Rosarina de Estudios Culturales (Arec), que convocó a la protesta de ayer, Ignacio Canabal, se quejó de que "es la primera vez que hay un allanamiento por cultivo de marihuana para consumo personal en la ciudad; porque aunque hubo otras causas, se iniciaron por cuestiones diferentes, como robos, y en ese marco se encontraron plantaciones".

La mujer investigada por la Justicia Federal tiene 29 años y padece endometriosis. Justamente, el consumo de cannabis tiene que ver con esa dolencia y el uso medicinal que le da a las plantas que cultiva. Además, es voluntaria de medicina y tiene un trabajo estable hace más de tres años. "El consumo le permite tener una vida normal y paliar los síntomas y dolencias físicas", aseguraron los manifestantes.

El 6 de marzo, cuando la Justicia ordenó el allanamiento en la casa de la muchacha, tras la denuncia anónima que recibieron aparentemente por parte de un vecino que observó las plantaciones en el patio de la vivienda, la joven se encontraba en Misiones realizando un voluntariado médico. Frente al hallazgo, el juez Bailaque la citó el martes pasado a declaración indagatoria, y la imputó por "infracción al artículo 5, inciso a) de la Ley de Estupefacientes, sobre el párrafo de consumo personal", puntualizó su defensor, quien remarcó, como si hiciera falta, que "no se encontró nada que haga presumir que existe comercialización".

En la presentación para pedir el sobreseimiento, Altare planteó que la medida judicial "es contraria al artículo 19 de la Constitución Nacional, porque se trata de una acción privada que no afecta a terceros, ni ofende el orden o la moralidad pública; por lo que tiene que estar exenta de la autoridad de los magistrados. Hablamos de una de las libertades más básicas y fundamentales del hombre. Estamos discutiendo que una persona mayor de edad, que está dentro de las cuatro paredes de su casa, no tiene por qué ser juzgada".

Ayer, temprano, Arec desplegó banderas y carteles que reclamaron el cierre de la causa, en los tribunales de calle Oroño al 900. Canabal comparó la investigación contra la joven con los hechos de violencia relacionados con la comercialización de estupefacientes, en la ciudad. "En momentos en los que vemos que el narcotráfico es un gran problema en la provincia, que genera hasta homicidios, nosotros creemos que es muy preocupante que se persiga a consumidores y cultivadores. Es un despropósito estar gastando plata en esto cuando creemos que el autocultivo va en post de la lucha contra el narcotráfico. A todas luces, esta chica no es el tipo de persona a perseguir".

Al mismo tiempo, aclaró que si la causa continúa abierta "no podrá obtener la matrícula (de la UNR). Este proceso puede llevar años y es terrible para una joven que estudió tanto tiempo. Un procesamiento sería anticonstitucional".

Altare habló de dos tipos de consumidores: "El 25 por ciento abusa del consumo y deben ser asistidos por el sistema de salud, no captados por el penal; mientras que el otro 75 por ciento, hace un uso medicinal, terapéutico o lúdico".

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