Imprimir|Regresar a la nota
Martes, 17 de diciembre de 2013
logo rosario
Uno de los jóvenes que disparó llevaba la camiseta de Central

Discusión, tiros y muertes

Los hinchas de Ñuls que sobrevivieron a los disparos declararon ayer en sede judicial que uno de los atacantes tenía puesta la camiseta de Central. Una mujer y una niña, que habían sido alcanzadas por los balazos, se encuentran fuera de peligro.

/fotos/rosario/20131217/notas_o/04a.jpg
La combi donde viajaban hinchas de Ñuls recibió tres impactos en la parte delantera.

Luego del feroz ataque a balazos a la combi donde viajaban hinchas de Ñuls de una peña porteña, y que provocó dos muertes, testigos del hecho dijeron que uno de los jóvenes que iba en la moto tenía puesta la camiseta de Central. Las declaraciones fueron brindadas ayer en el Juzgado de Instrucción 15, donde además los pasajeros del vehículo señalaron que hubo una discusión previa con las personas de la moto, por cuestiones futbolísticas que comenzaron con insultos y desencadenaron en la muerte del conductor y de uno de los pasajeros de la combi, además de provocar heridas en una mujer y una niña, que se encuentran fuera de peligro. Por su parte, el secretario de Coordinación de Eventos y Seguridad Deportiva de la provincia, Pablo Farías, descartó que haya sido premeditado. De todos modos, antes de la judicialización de los testimonios, Farías señaló en Radio 2 que el altercado entre pasajeros y motociclistas pudo ser motivado por un cruce verbal "fortuito", o por la rivalidad entre leprosos y canallas.

La balacera se produjo apenas pasada las 21 del domingo, a poco de haber finalizado el partido en el estadio del club del parque, donde Ñuls empató con Lanús. Cuando la combi pretendía regresar a Buenos Aires con los simpatizantes, que pertenecen a una peña leprosa, se habría dado una discusión con insultos e improperios, con dos personas en moto, mientras circulaban por Oroño. Al llegar a Lamadrid, llovieron los disparos contra la tráfic, y provocaron la muerte del conductor José Boladian, de 34 años; y del hincha Walter Palacios, de 39. Ambos fueron recibieron dos balas, de más de una decena que fueron descerrajados con un revólver 9 milímetros.

En tanto, ayer continuaban internadas dos personas. Solange Palacios, una médica pediatra de 29 años, hermana de uno de los fallecidos, quien deberá ser operada en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (HECA), tras recibir un disparo en el hombro. También se le brindó atención psicológica ante la muerte de su hermano. Mientras que la nena de 9 años fue herida en el mentón, tiene comprometido un dedo de la mano con la que pretendía atajar las balas, y permanece internada en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela. "Esto requirió una intervención quirúrgica, se encuentra en buen estado general, recuperándose, con antibióticos", resumió Stella Binelli, directora del efector, al programa Trascendental, de LT8.

Por su parte, la Justicia trabajaba ayer fuertemente en la causa, que está en secreto de sumario por orden del juez Alejandro Negroni. Al parecer, se avanza sobre una línea investigativa que los actores prefirieron no adelantar. Ayer, se esperaban las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de la zona; mientras que durante toda la mañana se tomaron al menos ocho declaraciones testimoniales a familiares de las víctimas y personas sobrevivientes que viajaban en la combi acribillada, quienes comúnmente viajaban a Rosario a ver partidos de su club, con gente de la peña porteña.

El secretario de Seguridad Deportiva dijo a Radio 2 que hubo un altercado previo, entre los pasajeros de la combi y las personas que viajaban en moto, que terminó con las vidas de dos hinchas. "Esto no fue un enfrentamiento entre hinchadas, algo que se haya podido evitar. Fue realmente una locura", remarcó Farías.

Un hincha de Ñuls que viajaba en otra de las combi que llegó a Rosario desde Buenos Aires, para ver el partido del domingo ante Lanús, lamentó en declaraciones radiales que el hecho fue "terrible". "Esto traspasa todo, vamos a ver un partido de fútbol y nos encontramos con esta situación", dijo Fernando, quien era amigo de uno de los fallecidos. "Estaba 40 kilómetros adelante, no sé si hubo un intercambio de palabras o no en el camino, lo que sé es que volví y mi amigo estaba muerto en el piso". Y agregó: "Lo que puedo decir es que nunca nos había pasado esto, nunca tuvimos una discusión por una camiseta u otra, mis amigos no son de bajarse a pelearse con nadie, nunca nos pasó nada de este tipo".

© 2000-2023 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.